Como si percibiera que ella había despertado, él abrió los ojos y se quedaron viendo fijamente como si fuera la primera vez que lo hicieran y al mismo tiempo como dos antiguos oponentes.
- ¿Has dormido bien? – Le preguntó él incorporándose del sillón.
- Tenemos que hablar – Susurró Allyson por toda respuesta.
- ¿Has recordado? – Dijo como si temiera la respuesta.
- Sí. – Y luchó por controlar las traicioneras lágrimas que le escocían los ojos. Se sentó en la cama y se obligó a mirarlo. - ¿Sigues pensando que soy culpable? – Le preguntó sin más.
- Tú misma viste las fotografías – Contestó levantándose y yendo hacia una de las ventanas y recorriendo la cortina se concentró en fijar la vista al parecer en la nada. – ¿Qué se supone que debo pensar?
- Que soy inocente ¿tal vez? – Le dijo con un nudo en la garganta.
- ¡Maldición Allyson! ¿crees que no es lo que más deseo en esta vida? – le dijo con la voz controlada y girándose a verla – A pesar de todo, te he ofrecido empezar de cero. Olvidar todo lo pasado.
- No podemos basar nuestro futuro en la desconfianza. Pasaron demasiadas cosas. Tú nunca me has creído y eso me duele como nunca tendrás idea. Jamás olvidarás mi supuesta infidelidad eso lo sé. Te conozco.
- Estoy dispuesto a hacerlo porque...
- ¿Por qué?
- Por que merecemos otra oportunidad.
- No funcionará.
- ¿Por qué no? – explotó – El agraviado soy yo, y soy yo el que te ofrece dejar todo atrás. Borrar todo y escribir nuestro futuro los dos de nuevo. Tú me amabas o me amaste aunque sea un breve espacio de tiempo no lo sé, eso puede bastar para empezar de nuevo.
- ¿Tú me amaste alguna vez Máximo?
- Sabes muy bien la respuesta.
- No, no la sé y por eso pregunto. Pensé que sí. Pero el amor es confianza, el amor verdadero es a prueba de todo y de todos, sobre todo de demonios como William.
- No te atrevas siquiera a pronunciar su nombre. –Dijo con la mandíbula apretada.
- Permitiste que nos destruyera y no se si eso yo te lo pueda perdonar nunca. –Prosiguió ella sin contemplaciones.
- ¿Tú? ¿perdonarme a mí? ¿No debería ser alrevés? – Le dijo haciendo obvios esfuerzos por controlarse, respiró profundamente y asombró a ambos diciendo:- No te traté bien, cuando me enteré de tu adulterio. La rabia me carcomía las entrañas y no pensaba racionalmente, te pido disculpas por ello.
Una disculpa no era lo mismo que pedir perdón pensó Allyson levantándose de la cama y poniéndose su bata encima del camisón. Una cortina de cabello le cubría la cara y cuando levantó el rostro tenía los ojos brillantes por las lágrimas reprimidas.
- Y respecto a mi supuesto adulterio, ¿Me has perdonado a mí por lo que supuestamente hice? ¿Lo has hecho? ¡Contéstame!
- ¿En serio quieres saberlo?- preguntó Máximo.
- ¡Por supuesto que quiero saberlo! – gritó ella dejándose llevar por lo que sentía en esos momentos.
- No lo sé.
- ¿Cómo?
- Sólo sé que no quiero que te vayas de mi lado.
- Eso es sentido de posesión Máximo, no es perdón, no es amor, es simplemente un macho señalando su territorio.
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Amargo Recordar (Saga Amores Inolvidables 1)
RomansAllyson Castillo había perdido la memoria y tenía la sensación de un vacío enorme en su corazón mismo que se relacionaba con los sueños recurrentes con un guapísimo extraño. El cual se materializó frente a ella en la vida real diciendo que estaba ca...