CAPÍTULO OCHO

68 3 0
                                    

9:26 a.m.

Me desperté con unos brazos sosteniéndome por la cintura, era Eric.

Estaba tan pegado a mí que de tan sólo pensar que mi madre llegaba hoy me sonroje. Traté de apartar sus brazos de mí alrededor, pero apenas me moví, abrió los ojos.

-¿Tratando de escapar, Anna? -dijo volviendo a cerrar sus ojos y atrayéndome más hacia él.

-Mmmm, tal vez…

-Pues no quiero dejarte ir, quiero tenerte para siempre así. -dijo, me tomo por la cintura para girarme y dejarme mirándolo fijamente a esos hermosos ojos que tenía.

Ese hermoso color azul grisáceo de ojos que me encantaban cada día más.

Me dio un corto beso en los labios y sonrió.

-Buenos días linda.

-Buenos días…. -sonreí- feo. -me carcajee unos segundos al ver la cara de perrito que puso, pero me dio mucha ternura y acto siguiente termine diciéndole un montón de adjetivos lindos y estirándole las mejillas como una abuela.

Me di una ducha y le dije a Eric que podía hacer lo mismo en la habitación de invitados.

Desayunamos juntos y salimos a comprar algunas cosas para el almuerzo.

Cuando estábamos entrando a la tienda, nos encontramos con Megan y una chica.

-¡Qué bonito verlos así de juntos! -dio unos saltitos y nos abrazó- Desde ahora los voy a shippear -me guiño un ojo y atrajo a la chica hacia nosotros.

-Ella es mi prima Lori, vino aquí a quedarse unos meses y espero incluirla en nuestras salidas, ¿Qué te parece Anna?

-Un gusto Lori, soy Anna, -dije estirando mi mano para saludarla- me encantaría que saliera con nosotras.

-Yo soy Eric -dijo sonriendo y estirando su mano.

Pude ver como Lori dejo de verme a mí para ver a Eric, y casi le doy un trapo para la baba. ¡Diu!

-Un gusto Eric… -dijo y se quedó pasmada recorriendo con la mirada a Eric. Ya me imagino que cosas estará pensando, pero ¡que ni lo sueñe!- me gustaría salir con…. Con ustedes por supuesto que sí.

De inmediato me di cuenta que ella seguía sosteniendo la mano de Eric, y bufé. Eric se dio cuenta de eso y soltó su mano y la paso por mis hombros.

-Lori, me encantaría salir con Megan, contigo… -vi cómo le brillaron los ojos- y con Anna, por supuesto, -Eric me miro y sonrío- ella es mi futura novia.

Sonríe victoriosa por que el semblante de Lori cambio completamente, pero también me puse roja como la nariz de un payaso.

-Bueno nosotras ya nos íbamos, adiós. -dijo Megan.

-Adiós chicas, nos vemos. -dije.
Eric se limitó a hacer un movimiento con la cabeza.

-¿Acaso mi Julieta se ha puesto celosa? -dijo Eric mientras me veía con una gesto de diversión  en el rostro.

-No. -dije mientras intentaba sacar la mano de Eric de mis hombros.

Eric me apretó con más fuerza y me dio un beso en mi cabeza.

-Simplemente me incómodo la forma de mirarte de esa niña.

-Tranquila tengo ojos solo para ti. -dijo y me besó.

Creo que sus besos se me van a volver adictivos.

(…)

Cuando estábamos llegando a la entrada, el hombre del servicio nos avisó que mi madre ya había llegado.

Entramos tomados de la mano a la casa y no me importó lo que pudiera decirme mi madre. La verdad es que no le conté nada sobre Eric, ya que al principio sólo éramos amigos, ella jamás acepto mis relaciones al principio pero luego tenía que soportarlas igual, así que me da igual lo que ella opine.

Mamá estaba en la cocina, entramos y en cuanto nos vio sonrió.

-Cariño, que gusto volver a verte. -dijo, tomándome de los hombros para darme un abrazo- Te extrañe mucho… mm pero creo que tú no me extrañaste tanto -dijo mirando a Eric- ¿o sí?

-Buenas tardes Señora Bood, un placer volver a verla.

-Eric, que bueno verte, ¿cómo ha estado tu madre?

-Mucho mejor, gracias por preguntar.

Wow, parece que ya se llevan bien, y esto me da ventaja ya que mamá lo conoce, o eso creo.

-Espero que sea lo que sea que tienes con mi hija, la cuides y la respetes y además no la hagas sufrir. -dijo mi madre intercambiando la mirada de mí hacia Eric- Bueno Anna, yo ya he comido así que iré a tomar una siesta, te quiero -beso mi frente y subió a su habitación.

-Eres el primer chico que mi madre ha aceptado desde el comienzo, sumas puntos

-Entonces dame mi premio. –dijo y estiro los labios cerrando los ojos, la verdad se veía como un niño pequeño.

Le tome la cara y le di un beso en la mejilla, trate de irme pero me tomo del brazo y caímos al suelo.

Eric me comenzó besando como si me necesitara, desesperadamente. Yo lo seguí porque la verdad era que me encantaban sus labios, si no necesitara oxígeno para respirar no me hubiera apartado.

Me miro a los ojos unos instantes con la respiración agitada y dijo.

-Eres lo único que siempre quise, Anna. –Me acaricio suavemente mi mejilla- Siempre te he necesitado.

-¿Siempre? –dije un poco confundida, hacia unas semanas que nos conocíamos.

-Quiero decir, que eres todo lo que he esperado, una chica como tú, eres única.

Me beso tiernamente y luego nos fuimos a preparar el almuerzo.

***

22:03 p.m.


El día se me paso volando, luego de comer unos macarrones con queso, que preparo Eric, no está demás decir que me sorprendió que supiera cocinar tan bien.

-¿Acaso eres el ama de casa? –le dije riéndome.

-Ja ja, muy graciosa. –dijo e hizo que lo abrazara con mis manos para quedar cara a cara- Mi madre sufre de cáncer desde que soy pequeño, tuve que encargarme de la comida y la limpieza mientras mi padre la cuidaba, además de que me gusta la gastronomía. –dijo guiñándome un ojo al final.

No sabía que decir, yo había bromeado con algo tan serio, no sabía de lo que él estaba soportando con su madre enferma.

-Lo siento, Eric. Yo no…

-No te preocupes, no lo sabias. –me interrumpió y me beso la frente.

Por la tarde vimos unas películas y le hicimos unos chocolates a mamá.

A las ocho Eric tuvo que irse; sé que no contarle lo que estoy viviendo con lo de mi familia está mal ya que él no dudo ni un segundo en contarme lo de su madre, pero siento que aún no estoy lista para hablar sobre eso con nadie.

EL FARODonde viven las historias. Descúbrelo ahora