My Best Mistake Part II:Forever

...Eighteen...

"¡Esta vez no se escapa!"

Melanie's POV

París es una ciudad muy bonita, pero tanto a Justin como a mi nos traen malos recuerdos. Aquí todo se acabó. Aquí todo murió...

Pero, como siempre, nosotros luchamos por nuestro amor, porque la vida es así.

Si quieres a alguien, no lo dejes ir, lucha por él.

Ahora mismo estábamos los dos en el lujoso hotel en el centro de París, donde la Torre Eiffel se veía perfectamente. Y era muy romántico. Era por la mañana y Justin dormía plácidamente sobre mi pecho. Parecía un niño.

Le miré y le bese la nariz. Él hizo una mueca y yo reí. Me atrajo más hacia él abrazándome.

-¿Qué hora es? -Me preguntó.

-Son las 9. Vamos, hemos quedado con los chicos para desayunar. -Me levanté de la cama.

-No quiero. -Se quejó tapándose con una almohada.

Yo reí y fui al baño. A los segundos veo que él también entró.

-¿No que no querías ir a ninguna parte? -Reí al verlo.

-Bueno, te vi entrar y... -Me sonrió pícaro.

Reí y entré en la bañera.

{...}

-No me digáis que vais a planear otro golpe. -Les miré seria.

Se quedaron callados.

-¿No os basta con todo el dinero que tenéis? -Preguntó esta vez Kendall.

-Bruce necesita que le ayudemos. Él nos ayudó con lo nuestro. Habrá que hacer las cosas bien. -Dijo Justin.

-¿Y qué si esta vez si os cogen? Se suponía que este viaje seria unas vacaciones lejos de toda la mierda que tenemos, joder. -Hablé.

-De eso no hay problema. Siempre tenemos cuidado.

-Ah claro, como ahora que nos busca toda la puta policía de Estados Unidos. -Reí sarcástica.

Me levanté y me fui fuera del restaurante del hotel. Ya estoy harta de toda esta mierda.

Busqué en mis bolsillos el paquete de tabaco. Me saqué uno y lo encendí. Que relajante. No sé, pero desde que volví, ya no hago lo que me gusta. No quiero decir que estar con Justin y los chicos no me guste, sino que ya no me siento bien conmigo misma. Ando preocupándome por todo y me olvidé de mi misma.

Ahora con otro puto golpe encima... No sé que diablos tiene Justin en la cabeza. Le di otra calada a mi cigarro y veo una mano en mi hombro.

-¿Qué quieres? -Hablé.

-Mel. -Me dio la vuelta.

Vio el cigarro, lo cogió y lo tiró.

-¿Por qué eres así? -Me preguntó.

-¿Así como? Lo único que hago es preocuparme pero veo que no me sirve de nada. Al final siempre haces lo que te da la gana. -Me crucé de brazos.

-Eso no es así, muñeca. Sabes que hay que hacer las cosas bien en esto, y eso es lo que hago. Te prometí que este viaje sería unas vacaciones, pero perdóname por mentirte. Teníamos que venir a París inmediatamente. Esta noche vendrá Bruce para hablar. Por favor, perdóname. -Me miró preocupado.

Le miré seria y luego entré en el hotel. Subí a mi piso y pasé por la puerta de la habitación de Brok, así que pensé en ver cómo estaba. Iba a tocar la puerta cuando de repente noté la respiración de alguien en mi nuca. Me giré rápidamente y abrí mis ojos como platos. Solté un pequeño grito por si alguien me escuchaba pero nada. Puso un pañuelo en mi nariz, y me quede inconsciente.