El es mi problema ~ C.D. (En Pausa)

Cap 48 - Candy + alcohol = desastre

- Christi, me duele.

- Si, lo sé, nena, lo sé.

Candy hizo una mueca y después vino una arcada acompañada de vomito, demasiado vomito.

Desvíe la mirada del liquido asqueroso que salia de la boca de mi amiga pero sin dejar de sujetar su cabello y masajear su espalda empapada de agua.

- Debemos buscarte ropa seca, Candy, o te resfriadas.

Cuando ella dejo de desechar la comida y el alcohol que había ingerido minutos antes me miro con sus ojos decaídos.

- No, estoy bien - rodé lo ojos fastidiada.

- Candy...

- Aquí están - Cameron entró al baño y me extendió las toallas de tela blancas. Las sujete y enseguida envolví a mi amiga con una de ellas - ¿Como sigue?

- Mal, sigue con el vomito - hice una mueca cuando nuevamente Candy comenzó a desechar lo que tenia en el estomago que ya no era mucho - ¿Cuanto bebiste, tonta?

- Mu... Poquito - ella rió e hizo una seña con sus dedos, dejó de reír y me miró seria - Musho.

Y una vez mas comenzó a vomitar.

Me senté a un lado de Cameron en el suelo del baño y recargue mi espalda en la pared mientras escuchábamos a Candy quejarse y vomitar. Deje caer mi cabeza hacia atrás y la recargue en la pared.

Todo tiene una explicación.

Principalmente debo dejar en claro que Candy, al igual que yo, no es una chica fiestera, no bebe, para nada, jamas lo había hecho, no hasta hoy.

Ahora, sabiendo eso, iremos a la explicación.

Fue hace un par de horas cuando todo comenzó, después de que Cameron y yo regresáramos con los chicos, más enamorados que nunca... Ajam, y bueno, la cosa paso demasiado rápido, Jazzy hablo, el tema incluía una fiesta y todos aceptaron, excepto yo. Si, claro, llamenme aguafiestas pero les diré algo gracioso, ahora yo era la que reía al final, bueno, mas o menos. El tema es que tenia razón, todo fue un total desastre, lo único a nuestro favor fueron los contactos de mi padre que al final también eran, de alguna manera mios.

Seré mas especifica.

3 horas antes.

Como de costumbre, mis palabras fueron ignoradas olímpicamente, ni siquiera el ogro que llamaba novio logró convencer a los descerebrados de mis amigos y amigas. Tenia sentimientos extraños y totalmente revueltos, estaba la preocupación, el mal presentimiento, ese sexto sentido que nadie tiene pero que parecía bastante real, sentía, mas bien, sabia que nada de esta idea de ir a una fiesta en un antro de algún hotel saldría bien, y no solo por el hecho de que no teníamos auto para regresar a casa en plena madrugada y tampoco un lugar cercano en donde pasar la noche después de que ellos se divirtieran en la fiesta y que seguramente terminarían ebrios hasta más no poder.

Pero así fue, nadie me apoyo y ahora todos se dirigían hacia el hotel más cercano por donde retumbaba la musica.

Candy estaba entusiasmada, y los demás también, por suerte no era la única en desacuerdo. Cameron me apoyo e intento impedirlo y Shawn y Aaron igual, pero nadie ni siquiera se inmuto de nuestros reclamos.

Por el momento la bola de fiesteros iban unos metros adelante de nosotros cuatro gritando y alzando sus manos con emoción, mientras tanto nosotros ideábamos una estrategia de protección hacia nuestros amigos o algo útil para impedir que algo saliera terriblemente mal.

- El dueño de uno de estos hoteles es amigo de mi padre, así que creo poder hablar con él y conseguir habitaciones - hice una mueca - La cosa es que este disponible y que haya habitaciones disponibles.