Partamos de una base: ¿Qué es el aborto?
El aborto es la interrupción y finalización prematura del embarazo de forma natural o voluntaria. En un sentido más amplio, puede referirse al fracaso por interrupción o malogramiento de cualquier proceso o actividad. El aborto espontáneo o aborto natural es aquel que no es provocado intencionalmente. Muchas mujeres experimentan este tipo de pérdida del embarazo. De hecho, entre el 10 y el 20% de los embarazos terminan en abortos espontáneos muchos de estos por causas naturales que son la muerte fetal; por anomalías congénitas del feto, frecuentemente genéticas. En otros casos se debe a anormalidades del tracto reproductivo, o a enfermedades sistémicas de la madre o enfermedades infecciosas. Los factores que pueden producir aborto espontáneo son muy variados: genéticos o cromosómicos del mismo feto, la exposición a toxinas ambientales, problemas hormonales de la madre, y otros como el tabaquismo, la drogadicción o el alcoholismo. Cuando la edad gestacional es superior a 22 semanas o el peso del feto supera los 500 gramos, se habla de muerte fetal. Entre los signos y síntomas se encuentran el sangrado vaginal, el lumbago, dolor abdominal sordo, agudo o cólico o la presencia de coágulos que salen de la vagina. Todos ellos deben ser valorados por un ginecólogo y verificar que no queden restos placentarios. Ante los síntomas, existen diversas pruebas y exámenes para verificar o prevenir este tipo de abortos, como son el ultrasonido vaginal o abdominal que ayuda a examinar el desarrollo del embrión/feto, los latidos cardíacos y la cantidad de su sangrado. En caso de aborto, es fundamental para la salud de la mujer comprobar si queda algún resto fetal o de tejido placentario en el útero. El producto expulsado debe ser analizado para determinar si la causa del aborto espontáneo es tratable y prevenirlo en el futuro. El aborto inducido consiste en provocar la muerte del embrión o feto. Puede tratarse de un aborto terapéutico cuando se realiza desde razones médicas, o de un aborto por decisión personal (interrupción voluntaria del embarazo), cuando se realiza a petición de la mujer embarazada. A su vez, según la técnica empleada para inducir el aborto, se puede hablar de aborto médico o de aborto con medicamentos y de aborto quirúrgico. A su vez, según la técnica empleada para inducir el aborto, se puede hablar de aborto médico o aborto con medicamentos y de aborto quirúrgico. Las dos son seguras y muy comunes. En el mundo, uno de cada cuatro embarazos son interrumpidos de forma voluntaria. El aborto terapéutico es la interrupción provocada del desarrollo vital del feto. A diferencia del aborto inducido a este le preceden razones estrictamente médicas. Es importante diferenciar el aborto terapéutico del inducido, ya que en el segundo influyen más factores socioeconómicos como ser producto de una violación, tener la incapacidad de solvencia económica, entre otros.
Siguiendo eso: ¿El aborto es matar una persona?
Primero empecemos con simples definiciones:
Embrión: En los seres vivos de reproducción sexual, óvulo fecundado en las primeras etapas de su desarrollo.
Feto: Embrión de los vivíparos a partir del momento en que ha adquirido la conformación característica de la especie a que pertenece (en los humanos, a finales del tercer mes de gestación) hasta el nacimiento.
Bebé: Niño recién nacido o de pocos meses y que todavía no anda.
Persona: Individuo de la especie humana.
Individuo: Persona considerada independientemente de las demás.
Muchos mencionan a la ciencia para justificar el hecho de que se asesina una persona cuando en realidad la ciencia y la biología jamás habla de asesinato. Jamás. Habla de muerte, como la de las células que te arrancas al rascarte, las plantas y los animales que te comes. ¿Matamos una vida? Puede que sí, pero dime, ¿qué es una vida para ti? ¿llamarías asesino a tu amigo que fue a comer un asado el domingo? ¿Llamarías asesina a la niña que arrancó una flor del pasto? ¿Llamarías asesino al que mata un insecto? Pues todo lo que he mencionado es vida. Así que sí, se puede decir que estamos matando una vida como todos los anteriores mencionados. Pero, ahora sí, ¿estamos matando una persona? No ¿Un ser humano? Tampoco. Puede tener ADN humano pero no es en sí un SER humano. Mi pelo tiene ADN humano por sí solo y no cometo un asesinato cada vez que voy a cortarlo. Estamos matando un conjunto de células sin SNC. Porque vamos, es muy hipócrita estar en contra del aborto con el puño en alto diciendo "si a la vida" y en la otra mano sostener un cadáver. Si me venís a hablar de "no compares una vida humana con un animal" te comento que además de hipócrita, eres especista. Porque al menos el animal siente dolor y tiene SNC. No como el embrión. No digo que ser vegano y proaborto no sea compatible ya que los veganos defienden a los seres con sensocentrismo. Los seres con sensocentrismo son aquellos que sienten dolor al ser, explotados, torturados o asesinados. (No, las plantas no sienten). Dicho esto un feto hasta las 24-25 semanas de formación no siente absolutamente nada: (https://t.co/IsbhM5YCTf). Y con el argumento de "es un ser vivo, no importa que no sienta dolor" ¿van a defender también a las plantas que son seres vivos y no sienten dolor?
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Feminismo
RandomHe decidido traer aquí el feminismo porque creo que debe ser divulgado en todas las redes sociales. Aquí subiré sobre temas recurrentes en el feminismo como roles de género, sexualizacion, violencia machista, etc. ...