Que cliché!!

Que frío

Narra Diana

- Aquí es- entré a un cuarto de color celeste, con algo de polvo, pero el lugar no estaba tan destruido. En el medio, se encontraba una cama de dos plazas, con sábanas sucias, a la izquierda de la puerta se encontraba un armario de mármol color blanco, al igual que el suelo laminado. Y sobre este colgaba un candelabro con cristales rotos, por último había un pequeño balcón- la luz no funciona así que arréglate con velas, solo eso te diré- se estaba por ir pero lo interrumpí antes.

- hay algún estanque o río o lago con agua limpia?

- si, por?

- necesito limpiar esas mantas- dije señalándolas.

(...)

Oh por dios! Es tan útil esta mochila, en ella llevaba las sábanas que raramente me entraron y un vestido azul con detalles dorados que saqué del armario. Me dirigí a la dirección que me dio Calb, y con mucha determinación logré llegar. Era un bello estanque de piedra con aguas claras y con flores alrededor.

- esta fría - dije al medir la temperatura del agua con meter mi pie.

Primero saqué las sábanas y las limpié como pude, ya que es la primera ves que limpio ropa, es agotador pero aún así estoy feliz de poder hacer esto por mí misma. Una ves creo haber terminado, cuelgo las sábanas en alguna que otra rama, y prosigo a desvestirme y poner a un costado el vestido lleno de sangre, rasgado y sucio, y me meto a la congelada agua que dentro de unos minutos ya me acostumbrare a la temperatura de esta.

- ya necesitaba esto - nadaba de un lado a otro, igual me sentía media incómoda, no sea que en cualquier momento aparezca un cazador o un animal grande y yo aquí desnuda. Sería horrible.

 Terminé de sacarme toda la suciedad, y salí del estanque. Me puse el vestido y me dirigí al castillo. Al llegar,  encontré el libro que me olvidé, y lo llevé a la biblioteca. Allí se encontraba Calb.

- que inesperado encontrarte aquí- dije irónica y con gracia.

-  JA JA que graciosa- rodó los ojos.

Devolví el libro a su estante y me senté en uno de los sillones. Me lo quedé mirando.

- que miras niña? - dijo sin sacar su vista del libro.

- bueno... ya qué no puedo escapar, pensé que sería mejor conocernos bien, no crees?

- no lo creo

- que frío - murmuré- yo empiezo.

- no pienso cont- lo interrumpí

- qué tipo de libros te gustan?

- los de... éso no te importa- frunció el ceño.

- a mí me gustan los de romance y fantasía.

- no me importa- volvió a aclarar.

- sigamos- dije haciendo notar que continuaría aun si no contestaba.