Después de tomar un baño, me cambié. Elegí unos de los vestidos que me había comprado mi tía, y unos zapatos bajos. El vestido era de color azul, me llegaba arriba de las rodillas. La parte de arriba tenía corte corazón y la falda caía pareciendo una campana. Lindo y sencillo.
Deje que mi pelo se seque y decidí dejarlo suelto. Pinté mis labios con un color suave, y aplique delineador en mis ojos.
Cuándo me mire en el espejo parecía otra persona. Una totalmente diferente, una Elena más radiante, más feliz, más... linda.
Por primera vez en mi vida me veía bien. Es decir... siempre fui insegura de mi misma y eso está cambiado.
Miro el reloj de mi móvil, siete en punto. Harry llegará en cualquier momento.
Tomo mi bolso y guardo las llaves y el celular allí. Me lo cruzo sobre mi hombro, cuando escucho una bocina afuera.
Antes de irme le dejo una nota a mi tía, justo donde había dejado la suya.
Harry está apoyado en el auto y mira despreocupadamente el suelo.
Aprovecho su distracción para observarlo. Trae unos zapatos negros, un jeans del mismo color que está rasgado en las rodillas. Una camisa de color bordo con lunares blancos en ella. Trae los dos primeros botones desabrochados. De su cuello cuelga su típica cadena, con una cruz.
Cuando llego a él, levanta la vista y me mira detenidamente. Al llegar a mi rostro sonríe.
- Estás hermosa Elena. - me dice y siento el rubor subir por mis mejillas.
- Gracias. Tú no estás nada mal... - sonrío tímidamente.
- ¿Nada mal? - una risa ronca brota de sus labios.
- Te ves hermoso. - le digo de una vez dejando mi timidez de lado.
- Gracias. - sonríe ampliamente.
- ¿Vamos?
- Vamos. - me abre la puerta del acompañante para que pueda subir.
Pasa por el frente del auto, y sube. Inserta la llave, enciende el auto y arranca.
- Me gusta tú auto... - comento para llenar el silencio que inunda el ambiente.
- Y a mi me gustas tú. - dice y el corazón me da un vuelco en ese instante.
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El Chico De Las Notas | Harry Styles
FanfictionEstoy empezando a sentir algo sumamente fuerte por él y eso me asusta. Pero hay algo que es peor, no se absolutamente nada suyo, ni siquiera su nombre. Aquél chico apareció de repente en mi vida... con aquella nota tan extraña y poco convincente. Co...