Los cabros del goth deben sobrevivir a un mundo apocalíptico, sufrirán, perderán cosas importantes, tendrán triunfos, vivirán cosas que nunca se hubieran imaginado... Una de ellas fue encontrar el amor...
¿Vivirán hasta el final donde tendrán una...
Aun seguía pensando en el Jaime besándose con otra mujer, se sentía extraño, tenia demasiado celos, podía ver esa imagen en mi cabeza y la único remedio que encontré fue golpearme en la cara, tengo mas fuerte en mi brazo derecho así logre caerme al suelo, mire para todos lados para asegurarme que nadie me había visto haciendo el ridículo.
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Pude recuperar la compostura, me asegure de taparme bien el rostro, que mi collar estuviera escondido y entre a la enfermería, aun me acordaba donde estaba, pero esta vez estaba más implementada, habían muchas cosas, en algunas camillas habían algunos enfermos que dormían acompañados de sus familiares. A lo lejos en unas camillas estaba el Edgar hablando con el Bestia y el Naiko estaba conversando con un chico que por su ropa poder darme cuenta que cuidaba a los enfermos, era enfermero seguramente. Fingí toser para llamar la atención.
-Fer.- Naiko corrió hacia mí y me tomo del brazo para acercarme al resto del grupo.- Él es uno de los enfermeros de acá, el no sale a las expediciones porque es cobarde.- el enfermero se dio vuelta y era el Yelo, se veía mucho más hombre, cuando éramos compañeros del colegio físicamente siempre se veía menor pero ahora había cambiado mucho, musculo y tenía el pelo largo que sujetaba con una coleta para estar peinado pero su rostro seguía igual, era como un niño.
-Holi me llamo Manuel pero dime Yelo...-chocamos nuestras manos.- Oye a mí me habían dicho que tenías una herida en la frente pero yo no veo nada.- paso sus dedos por mi rostro pero este estaba sano, así es, Patt podía regenerar mi piel.
-Qué extraño, jure ver una herida incluso el Edgar se la vio, que extraño.- Ambos se acercaron a mi cara para examinarme.
-¡Fer! Debes estar muy cansado...ven te voy a mostrar donde vas a dormir!- él Edgar me tomo del brazo y comenzamos a caminar.
-¡Si! Tengo mucho sueño.- comencé a bostezar.- Un gusto Yelo, buenas noches a los demás.- me despedía con una mano , el Edgar me saco rápidamente de ahí.
-Te debo una...
Llegamos a una cabaña, a la misma en la que yo había vivido, pero estaba diferente, no tenía los mismos muebles y estaba llena de fotos, de todo el grupo, mire todos las fotos, había fotos antiguas, de antes que pasara todo esto, incluso yo salía en muchas,
-¿De dónde sacaron estas fotos?.- tome una entre mis manos para verla de cerca, era una foto de todos juntos cuando nos juntábamos tomar.
-Un día quisimos ir a nuestros antiguos hogares y recuperamos estas fotos, quisimos ir a tu departamento pero la zona no era segura, ven.- me guio a una de las habitaciones.
Sobre la cama había una mochila, toda sucia y dañada por el tiempo, era mi mochila, la primera que use junto con un poleron que había dejado olvidado una vez que me cambie de ropa.
-El Jaime las había conservado ya que quemo el resto de tu ropa de forma simbólica...incluso quería deshacerse de esta pero preferí consérvala para recordarte.- me miraba apenada.
