"Un novio de alquiler"

Introducción

La persona en la que se había convertido Kim Jaejoong, era algo que nunca hubiera imaginado. Ahora no solo era el economista principal de una de las compañías más influyentes en Inglaterra. Sino que también es uno de los accionistas de Burberry® empresa de prendas y moda exclusiva del mundo. Es una de las marcas con mayor reputación del mundo y no solo se dedica a las prendas de ropa, sino que tiene una gran cantidad de accesorios de moda que son perfectos para la mujer cosmopolita. 

Tanto la ropa como los accesorios se gestionan y envían a todas partes del mundo. Siendo un fashionista de primera se tomó muy en serio su trabajo. Pues, su sueño siempre había sido ser diseñador de modas pero por la presión de sus padres lo abandonó. Poco después, ante los deseos de estos se convirtió en economista. 

Al principio, le resultó muy aburrido pero poco a poco se fue a acostumbrando. Hasta llegar a la empresa que más admiró. 

Estaría a un paso de uno de sus más grandes sueños.

En navidad viajaría a ver a sus padres, pues en realidad tenía que hacerlo. Hacía muchos años que no pasaba esa fecha tan especial con ellos. La verdad era que todas las vacaciones que tenía se la pasaba viajando a diferentes países, era un hobby y se había hecho costumbre. 

Nunca pasaba una navidad o año nuevo en el mismo lugar. Siempre eran países diferentes, amaba ese tipo de experiencias y no las cambiaría por nada. 

Y esa navidad con sus padres, lo hicieron pensar mucho sobre su futuro incierto. Puesto que no tenía pareja. Tampoco era que no quisiera tenerla pero por ahora estaba muy ocupado con su trabajo, así que no lo veía como algo cercano. No era su prioridad.

Cuando regresó a Inglaterra, recibió una invitación de la empresa, en donde se anunciaba una fiesta por fin de año. Tendría que asistir y así posponer su viaje de fin de año para otro momento. 

El día de la fiesta llegó y ahí pudo ver diferentes personajes como: cantantes, modelos y directivos de la misma empresa entre otros asistentes. 

Le sorprendió mucho que dijeran que estaría allí un conde. Un conde de Inglaterra, el nuevo sucesor, Yoochun Wellesley X conde de Wellington. Se decía que era un hijo ilegítimo del antiguo conde, Charles Wellesley, que hacía un año lo había reconocido y tras su muerte heredó todo lo de su padre. 

Ciertamente, era más parecido a su madre que a su padre y todos lo sabían. Hablaban a sus espaldas pero poco le importaba al duque Yoochun. Tenía una personalidad muy despreocupada y parece ser un tipo afable. 

Esa noche, se conocieron y de inmediato se llevaron bien. Pues para Jaejoong era bueno ver a un coreano, como si se tratase de una cara conocida.

Hablaron mucho y pronto ya eran amigos. Aunque, Jaejoong conocía la fama del nuevo duque, decían que era un despilfarrador de la fortuna de su padre y que se la pasaba de fiesta en fiesta. Eso no le importó. Y después de tratar al duque de Wellington se dio cuenta que era un buen chico. 

La noche transcurriría sin mayores problemas. Hasta que al conde se le ocurrió invitarlo para el año nuevo lunar chino. Haría una gran fiesta en una de sus casas recién compradas. Jaejoong no dudó en aceptar pero le diría que el pagaría su propio boleto. El conde casi se ahoga de tanto reírse, puesto que, no creía que su nuevo amigo pudiese comprar un boleto para su jet privado, en el cual se movilizaba a otros países. 

Jaejoong aceptaría y acordarían verse unos días antes del veintiocho de enero. Se verían en el aeropuerto privado que tenía la nobleza de Wellington. Y luego se irían directo a China. 

Los días pasaron y llegaría el día del encuentro. Iría con todas sus maletas al aeropuerto acordado y se encontraría con un gran y lujoso jet, del cual salía el duque Yoochun que estaba esperándolo con otros amigos. Se sentarían juntos y hablarían de todo. Jaejoong sintió tanta confianza que le habló de su problema con su familia, ya que, ellos seguían empecinados en que les presente una pareja. Sino lo hacía pronto su madre le concertaría muchas citas a ciegas. Pronto vendría a la mente del conde una idea, una descabellada pero muy lógica idea. 

Un novio de alquiler  sería lo que necesitaría para por lo menos calmar a sus padres. Pues eran muy populares en China, lugar a donde iban. 

Sin nada que perder, Jaejoong estuvo estudiando los pros y contras de aceptar aquella idea.