Capítulo Siete.- "Dulce reconciliación"

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Jaejoong abre los ojos estaba en su cama. Se sienta y se recuesta sobre las almohadas. El dolor de su cabeza es insoportable. Todo el lugar da vueltas. No hay nadie más que él en la habitación. Se pregunta quién lo pudo haber traído hasta ahí. Se distrae pues siente su boca reseca. La sed se apodera de su mente, necesitaba sentir agua corriendo por su garganta, a su lado pudo encontrar una jarra con agua. Toma el vaso que está en la misma mesita de noche, y se sirve, coloca el vaso sobre sus labios. Pronto el agua discurre por su garganta, calmando así parte de su sed. Coge la jarra nuevamente para servirse. Dos vasos después, el alivio se hace presente. El dolor de cabeza no lo deja concentrarse, así que decide dormir por un tiempo más. Todavía era muy temprano. Se acomodó en la cama, y quedó profundamente dormido al instante. En sus sueños podía sentir como Yunho cuidaba de él, lo acariciaba y le decía lo mucho que lo quería. Pudo sentir un tierno beso sobre sus labios. Todo parecía tan real que de inmediato se levantó. Estuvo sentado observando cualquier cosa fuera de su lugar, se tocó los labios no parecía como si hubiese sido besado. Observó las ventanas, la noche caía, percibió que el dolor de cabeza había desaparecido por completo. Decidió tomar un baño, estuvo en la bañera por un buen tiempo, después salió para secarse y cambiarse. Estuvo pensando por unos instantes en Yunho.

¿Qué hubiese pasado si encontraba a Yunho a mi lado? ¿De qué estoy hablando? Eso no hubiera cambiado el hecho de que estamos peleados... Mentiroso.

Bajó para dirigirse a la sala. Ahí estaba Yoochun, sentado viendo el jardín, se acomodó a su lado. Yoochun le informó que Yunho no estaba pues se había ofrecido para ser guía de un grupo de invitados. Jaejoong suspiró por lo menos así podía estar un poco tranquilo. Los otros invitados se habían ido del palacio. Así que básicamente estaban solos en casa. Se quedaron muy tranquilos observando el jardín. Desde que Jaejoong conoció a Yoochun, él había sido un buen amigo y siempre se sentía bien a su lado. Era muy divertido hablar con él.

Jaejoong, ¿puedo preguntarte algo? -Lo veía de reojo-

Sí, claro. -Veía el jardín con una sonrisa-

¿Tuviste una discusión con Yunho? -suspiró-

Eh... bueno la verdad es que sí pero ¿por qué tan de repente? -se giraba para verlo-

Lo que pasa es que él tenía una expresión muy triste, y pensé ¿a qué se debe? Luego me contesté: es por Jaejoong. -lo veía fijamente-

Eh... -sonrió nervioso- Es solo que él no quiere aceptar el dinero por su trabajo -bajó la mirada- dijo que rompía una de las reglas de su empresa y yo no le veo ningún problema a eso. Digo se supone que ahora somos una pareja de verdad... -suspiró-

¡Oh! Pero no tenía idea de que fuesen una pareja real... yo pensé que se tomarían un poco más de tiempo para conocerse. -estaba asombrado-

Mm... -se acomodó el cabello- aunque no sé si lo seguimos siendo, puesto que ayer se me declaró y después tuvimos esa discusión... -hacía un puchero involuntario-

¡Ah! Pero en parte él tiene razón. No creo que estuviese bien que acepte tu dinero después de enamorarse de ti. Eso sería deshonesto, pues si lo ves cómo lo ve Yunho, sería como aceptar que se quiso aprovechar de ti. Bueno quiero decir que si lo ves de otra manera sería como si él se hubiese propuesto enamorarte para conseguir ese dinero y más. ¿Entiendes? -Lo veía con curiosidad-

Algo así pero además de ello me llamó niño mimado, niño rico, que en pocas palabras no puedo entender el porqué de su orgullo... ¿crees que eso está bien? -Giró su rostro para ver al jardín-

¡Ah! Es por ello que tenía ese rostro, parecía muy arrepentido. Será mejor que aclaren pronto las cosas... no justifico ninguna de sus acciones pero sería bueno que los dos hablen calmados. -sonreía-

"Un novio de alquiler"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora