Crush » Calum Hood

80

31 de Diciembre, 2016.

Calum me había invitado a pasar con él Año Nuevo pero había decidido rechazar su invitación. Tenía que pensar algunas cosas, y en todas él estaba vinculado. Tenía que tratar de aclarar mis sentimientos hacia él, aunque éstos ya estén más que claros; tenía que tratar de controlarme al momento de estar a su lado, y el último, pero no menos importante..., prepararme mentalmente para poder hacer lo que tanto había estado pensando la noche anterior.

Había estado todo el día tratando de encontrar una manera de decírselo pero ninguna me convencía. Había decidido decirle lo que sentía por él.

Sé que es raro que yo le diga mis sentimientos pero es fin de año así que éste día se hace lo que sea. Obviamente no me le declararé, solamente le diré lo que siento por él, y que pase lo que tenga que pasar.

Había pensado decirle esto a alguno de los chicos para que me diera su punto de vista o que me diera consejos pero preferí mejor hacer esto sola. Sin ayuda de nadie. Sólo espero no arrepentirme de esto.

Mi teléfono comenzó a vibrar sobre la mesa y lo tomé. Tenía un mensaje de Calum.

Calum♥

¡Hey, Brook!

Hola, Calum.

¿Qué haces?

Preparaba algo ¿y tú?

Estoy con mi familia ¿segura que no quieres venir?

Que bien. Estoy segura, Calum.

Está bien, ¿entonces sí nos veremos hoy?

Sí, a las 11:30 ¿no?

Exacto. Paso por ti a esa hora, no te demores.

Claro...

***

Eran las once en punto y decidí darme una ducha para quitar cualquier rastro de sueño. Sí, había dormido todo el día. Había sido aburrido pero sé que cuando esté con Calum esto no importará.

Comencé a buscar que ropa ponerme durante unos minutos hasta que encontré algo. Me vestí, me maquillé y comí un poco. Lavé mis dientes y me senté en el sofá.

Tomé mi celular y hablé un poco con Ashton. Le había dicho que saldría con Calum un rato y él me deseó suerte. Obviamente no le dije lo que haría y el sólo recordar eso me puse nerviosa.

Calum llegó por mí y subimos a su auto.

—¿A dónde iremos?—pregunté un poco nerviosa por lo anterior.

—Al parque central ¿está bien?

Me gustaba la idea. Casi siempre en Año Nuevo o Navidad, o en la celebración de algo importante, se llena de gente ya que se lanzan fuegos artificiales y de allí se ven hermosos. Así que hoy podré verlos mejor a cómo siempre los veo.

—¡Genial!—sonreí.

Él sonrió y acercó su mano a una de mis piernas dejándola allí. Miré unos segundos su mano y rápidamente miré por la ventana para que Calum no viera el color rojo en mi cara.