Capitulo 1

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Como todos los días, me paseo por la entrada de mi casa, esperando el momento en el que él pase...

Siempre pasa los lunes, miércoles, y viernes, exactamente a las 5 de la tarde...

Ya se, hasta la hora me se, pero es que ese chico me da tanta intriga..... Y es tan guapo, que no puedo evitar pararme en el umbral de mi puerta para botar baba cuando lo veo pasar en su patineta.

Siempre va con su cabello negro despeinado, su cuerpo totalmente relajado sobre su patineta, con una guitarra.

Siempre lleva una guitarra, supongo que es para tocarla....

Obvio Samantha, no va a ser para matar a alguien.

Bueno, como decía, me moriría porque alguna vez pudiera verme, ya que, siempre pasa y solo mira al frente.

Nunca mira a los lados, si fuera así, ya me hubiera notado.

Que triste.

Lo he acosado durante 2 años, se donde vive, conozco a su madre, obvio solo de vista, pero AÚN, no sé su nombre.

Se preguntaran, ¿que tipo de acosadora soy? Pues, no se, quizá una muy mala, porque si fuera una buena acosadora lo primero que sabría es su nombre.

— ¿Que haces aquí afuera? —pregunta mi mamá mirándome con el ceño fruncido saliendo de la casa.

—Eh... — miro disimuladamente hacia los lados y veo a mi perra Cookie saltando mientras trata de atrapar ¿moscas? — Solo la saque un rato, porque estaba desesperada allá  dentro — digo señalándola y en parte es cierto, bueno, la perra era la excusa.

Mi mamá asiente lentamente como desconfiando, y finalmente se termina metiendo a la casa.

Obvio no voy a decirle a mi mamá: “Estoy esperando para ver a un chico que acoso desde hace dos años”

Eso seria muy extraño, incluso para mi.

La única que sabe de esto es Jordyn, mi amiga, ella es la que me acompaña en esta aventura de mi vida.

De pronto escucho un sonido muy conocido.

El sonido de las ruedas de una patineta hace que mi corazón se acelere descontroladamente. Mis manos sudan y tiemblan, aunque se que él nunca me va a ver, de todas formas.

Miro a la dirección de siempre y lo veo a él, en eso escucho como mi perra comienza a ladrar y todo pasa tan rápido...

Mi perra corre como loca hacia él, se le abalanza, lo tumba, su patineta vuela por los aires, al igual que él y termina en el suelo.

¡MADRE MÍA! ¡ESTO NO HABÍA PASADO ANTES!

Mis ojos y boca se abren de la sorpresa, y me quedo estática en mi puerta mirando como mi Crush, acaba de darse un suelazo, por culpa de mi perra gorda.

Bueno, ni que yo fuera una angelita de Victoria Secret's.

Sacudo la cabeza alejando esos pensamientos y me concentro en ver a ese bello chico acariciando a mi mascota mientras ella le lame la mano.

De pronto él voltea a mirarme, y por primera vez, puedo ver sus ojos, pues estamos algo cerca y se ve con claridad el azul de sus bellos ojos.

Otra cosa más para mi lista: “¿Por que acoso a mi Crush?”

Acosando A Mi CrushDonde viven las historias. Descúbrelo ahora