— Ryan sientate aquí a mi lado — pido dando palmaditas a mi lado.Él hace caso como un niño y se sienta a mi lado con la cabeza gacha.
— ¿Cómo nos viste?
— Pues... Estaba sacando la basura temprano y te vi subirte en su auto.
— ¿Y cómo me viste llegar? ¿Te mantuviste en la ventana?
Había olvidado el detalle de que Ryan vive a lado de Jordyn. Cosa que también es un vecino. Por eso todo el vecindario quiere que sea novia de él.
Prácticamente nos vieron crecer.
Él no me responde y se que, es exactamente lo que hizo.
Por Dios. Lo que faltaba.
¡QUE ME ESPIARA!
— ¿Ya eres su novia? — sus ojos están aguados y las lágrimas caen por sus mejillas.
— No, claro que no. Ese beso solo sucedió por el calor del momento — miento aunque yo tampoco se por qué lo deje hacerlo o porque lo hice yo también.
Sonríe aliviado y se limpia las lágrimas con su brazo.
— Perdona Samy — pide y su nariz roja por llorar me causa un poco de gracia.
— ¿Por qué?
— Por venir a llorar aquí, se que no debería hacerlo, porque se que no somos nada, pero es que no puedo evitar sentirme tan mal — agarra mi mano que está a un lado mio y la atrapa en sus manos.
— Esta bien Ryan. Tu no decides de quien enamorarte — digo en voz baja tratando de sonreír y él hace lo mismo.
Escucho unos cuantos ruidos abajo seguido de la puerta abrirse.
Me volteo porque estoy de espaldas a esta y me encuentro a un pelinegro de ojos celestes mirándome desconcertado, atrás de él está Aaron.
Jason mira a Ryan directamente y este se pone de pie.
Se acerca a Jason peligrosamente y se lo que va a hacer.
— Ryan, para — ordeno y así lo hace matando al pelinegro con los ojos.
Y parece que el sentimiento es mutuo porque los ojos de mi Crush brillan en algo que parece furia.
¡Ay Dios! ¡Esto parece una novela mexicana!
— ¡Ya basta! ¡Dejen de mirarse como si están preparados para atacar! — ordeno buscando a mi sobrino con la mirada, pero parece ya se ha ido.
Miro a Jason, este suaviza sus gestos y trata de sonreír.
Miro a Ryan, suspira, y también relaja sus gestos pero aún sigue apretando los puños a sus costados.
— Ryan — susurro lo suficientemente alto para que me escuche.
Me acerco a él y le agarro las muñecas. Sus manos dejan de hacer puños, baja sus ojos color avellana hacia mi y sus gestos se suavizan completamente.
— Ryan ¿Puedes dejarnos a solas? — él me mira lastimado pero entrecierro los ojos para que vea que hablo en serio.
— Está bien.
Levanta la mirada observando por encima de mi, y sus cejas se fruncen un poco.
Se separa de mi y sale de la habitación esquivando a Jason y mirándolo mal.
Miro al pelinegro y este me mira con una sonrisa tímida.
— Cierra la puerta con seguro — me vuelvo a sentar donde minutos antes estaba con Jordyn y me quedo allí.
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Acosando A Mi Crush
Teen FictionSamantha lleva alrededor de dos años observando cada día, a la misma hora, en el mismo lugar al mismo chico; un skater de hermosos ojos azules. Hasta que por un pequeño y ridículo accidente, su "Crush" empieza a notarla. Quién diría que ese skater...