Son las seis de la tarde, y estoy esperando que Jordyn venga a verme para ir a la feria del pueblo.
Mientras tanto escucho las primeras musicas de Justin Bieber a través de mis audífonos, y leo 50 sombras más oscuras.
No soy pervertida...
Si como no, teniendo de ídolo a Justin Bieber, soy una santa.
Me río sola como la persona enfermita que soy y de reojo veo como la puerta de mi habitación se abre.
Levanto la mirada encontrándome a mi amiga mirándome con el ceño fruncido.
Me quito los audífonos y cierro el libro.
— Seguro te estabas riendo porque Christian, estaba azotando a Anastasia. — acusa divertida y le hago una cara pervertida.
— Dejame ser — me quejo y me levanto de mi cama — Ya vámonos, que hoy mi Crush estará ahí — la apuro.
Es el mes de Octubre, y hace mucho viento, así que agarro una sudadera que está encima de mi silla de escritorio, me la pongo y salgo de mi habitación con Jordyn detrás mío.
— ¡MAMÁ! — grito bajando las escaleras viendo a mi mamá sentada en el sofá jugando Candy Crush en su tableta.
Típico de mi mamá.
— ¡¿POR QUÉ MIERDA GRITAS?! — se voltea totalmente cabreada — Ah, hola Jordyn. — dice calmada volviéndose a acomodar sin esperar respuesta.
— Nunca me acostumbraré a que sea tan bipolar — susurra la castaña a mi lado.
— ¿Quién te dejo entrar? — le preguntó confundida, después de haber visto a mi mamá saludándola.
— Tu papá — me mira a los ojos mientras encoge los hombros.
Con razón, mi madre se enfrasca mucho en ese juego, que no se da cuenta de lo que pasa a su alrededor.
No me sorprende...
— Bueno, entonces como mi papá esta en casa aprovecharemos su alma caritativa, para sacarle dinero — hago una sonrisa malvada.
— Que perratza deberás — dice y ambas nos reímos mientras nos dirigimos a la cocina.
Y por supuesto, nos encontramos al señor Michael Larson, o mejor dicho, mi papá.
— Querido pá, vamos a a ir a la feria, dame dinero — ruego y él se voltea a mirarme — Voy con Jordyn — añado rápido mientras la señalo.
— Estoy haciendo arroz con brócoli, tu favorito ¿Te guardo? — pregunta mientras abre su billetera y saca un billete de veinte dolares.
— Si, claro — digo con entusiasmo.
Adoro ese platillo, no es lo que piensan.
Me da el billete, le agradezco y me dirijo a la salida con Jordyn.
×××
Llevamos unos 10 minutos caminando en un silencio cómodo, me encanta caminar así, cuando esta anocheciendo.
— ¿Qué es arroz con brócoli? — interrumpe Jordyn mi paz.
— Es arroz normal, mezclado con brócoli, pollo y tocino en cuadritos — la miro con una sonrisa y ella hace una mueca.
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Acosando A Mi Crush
Teen FictionSamantha lleva alrededor de dos años observando cada día, a la misma hora, en el mismo lugar al mismo chico; un skater de hermosos ojos azules. Hasta que por un pequeño y ridículo accidente, su "Crush" empieza a notarla. Quién diría que ese skater...