Capitulo 5

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—  ¿Cómo andas preciosa? — pregunta Ryan mirándome coqueto.

—  Con los pies — respondo sarcástica y Jordyn suelta una risotada.

Él rueda los ojos con una sonrisa y se sienta a mi lado, pasando uno de sus brazos por mi hombro.

— ¿Quieres que te golpee con mi chocolate? — lo miro y él se ríe.

— Eso es de la entrenadora Jaeger — lo miro con la boca abierta.

— ¿Tu como sabes eso? — frunzo el ceño y esta vez, se sonroja un poco.

Ya se lo que viene...

— Me gusta ir a verte jugar — dice en voz baja.

— Acosador — dice Jordyn rápido y tose disimulando.

El castaño la mira mal y yo me río.

— No soy acosador, solo me gusta ver — se queja.

— Depravado — Jordyn vuelve a hacer lo mismo y vuelvo a reír.

Ambas nos reímos muy fuerte y el castaño nos mira mal, especialmente a Jordyn.

— Sam... ¿Quieres ir a la feria conmigo hoy? — pregunta Ryan ignorando a la castaña y yo la miro.

Esta asiente con la cabeza disimuladamente hacia mi.

Suspiro.

No tiene porque ser tan malo.

Además, ya he salido varias veces con él.

Los dos solos.

— Está bien — le sonrió sincera y el me abraza sorprendiéndome.

— Gracias, gracias, la pasaremos genial, ya lo verás — comienza rápidamente, se pone de pie y sale corriendo.

Él es muy raro....

Incluso más que yo.

Mi papá lo ama.

— ¿Y si encuentras a Jason allí? — Jordyn me mira alarmada y yo sacudo la cabeza.

— No pasará, él solo esta allí los viernes — digo completamente segura.

— Ojala sea así — ella deja las palabras en el aire y sigue comiendo su hamburguesa.

Ojala no este ahí.

La que se va a armar.

A saber como se va a poner Ryan.


×××


— Señorita Larson, si no le gusta mi clase, con gusto puede salir al pasillo — el profesor de matemáticas me mira con el ceño fruncido y yo me enderezco en mi asiento.

— Si salgo usted me suspenderá y no podre aprender — le doy una sonrisa inocente y su ceño se frunce más.

— No veo como pueda aprender si esta desparramada sobre su mesa — entrecierra los ojos y muchos de mis compañeros ríen por lo bajo.

— Pues, vera, yo puedo hacer dos cosas a la vez — muerdo mi labio para no sonreír.

— ¡NO COMIENCE CON SUS CHISTES! ¡FUERA! — señala la puerta totalmente cabreado.

Acosando A Mi CrushDonde viven las historias. Descúbrelo ahora