WE ARE BIRDS

CAPITULO 3

Miradas

Me desperté con un fuerte dolor de cabeza y al levantarme de la cama y revisar mi célular pude ver que tenía 3 llamadas pérdidas de Jhope. Lo llamé.

-¿Qué pasa?

-Resulta que salí con Na Ee Ra, pero creo que no le gustó mucho nuestra cita. Veras... Ella se cayó y yo me reí, hombre no pude evitarlo, pero una risa que te cagas y luego la ayudé y me disculpé. Ella no podía ocultar sus ganas de matarme y eso hizo que todo se pusiera incomodo y no puedo negar que me gusta, en serio me gusta, no me podía creer que finalmente estuviera saliendo con ella... Pero creo que es muy seria para mí.

-Dale una oportunidad idiota. Es su primera salida, creo que le exiges demasiado. Y yo también hubiese querido matarte si me cayera y lo primero que haces es reírte en mi cara. Pero en fin, así eres tú. Solo... Dale una oportunidad.

-Bien, tal vez te haré caso ya que supongo que tienes razón. Adiós... Ah, hoy iremos al parque a las 4pm.- Y colgó.

Al salir de la habitación noté que estaba solo. Al parecer Val salió más temprano de lo normal. Me dejó una nota.

Sarah me dará el aventón hoy. Por favor limpia el baño que está hecho un asco y compra las cosas para la ensalada, ahí te dejé la tarjeta. Cuídate monstruo.

Te quiere, Val

Desayuné. Lavé el baño y limpié la casa. Ya eran las 11:00am cuando había terminado. Me duché, me vestí y salí a comprar las cosas. Me puse mis audífonos y empecé a caminar las 7 cuadras que me separaban del supermercado. Cuando venía de regreso noté que estaba trancada una calle, así que tuve que tomar otra y mientras iba caminando lo vi, al chico del bus y venia caminando hacia mi dirección pero no me había notado, así que baje la cabeza, nervioso. Sin embargo no pude evitarlo, así que tuve que subir la mirada para verlo y descubrí que él me estaba observando. Muy serio por supuesto. Fue una mirada fugaz, ninguno se detuvo. Ambos seguimos nuestro destino. Para mi sorpresa al mirar hacia atrás noté que él hacía lo mismo, y rápidamente volteé. Sólo eso basto para empezar a sentir una corriente por todo mi cuerpo. Queria salir corriendo y hablarle, tocarlo o simplemente verlo y no entendía porque estos impulsos se apoderaban de mí. Caminé más rápido, como si de alguna manera eso hiciera que mis pensamientos se fueran. No funciono. Al llegar a casa me recosté de la puerta y solté un aire que no sabía que estaba conteniendo, sintiéndome muy extraño y con una adrenalina que se esparcía por cada parte de mi cuerpo. Necesitaba tomar aire.

-Alo, ¿qué pasa V?

-Iré a tu casa.

Tardé aproximadamente 40 minutos en llegar a la casa de Kookie cuando el recorrido no dura más de 20 minutos. Necesitaba respirar, sentir el aire en mi cara, relajar mi cuerpo. Necesitaba esos 20 minutos de más.

-Que bueno que viniste antes. Necesito que veas esto.- Kookie tenía puesta una camisa gigantesta blanca y sus botas amarrillas. A veces pensaba que dormía con ellas puestas.

Empezó una cuenta de 16 tiempos. La verdad se veía muy bien, muy muy bien.

-Se ve genial Kook.-Dije con la mirada un poco pérdida, no podía dejar de pensar en lo ocurrido hace un momento.

-¿Qué te pasa viejo?.- Odiaba que me conociera tan bien.

-Es sólo que...

-¿Qué pasa V?

-Conocí a un chico. Bueno no lo conocí, lo vi en el bus hace un par de días y hoy lo vi de nuevo. Es extraño. Y me siento muy raro cuando lo veo, se apodera de mi una gran adrenalina y un gran deseo de estar cerca de él...

-Pues la próxima vez que lo veas háblale, dah.

-He querido, pero su mirada es tan seca cuando me ve que simplemente me quedo congelado. Es muy extraño.

-Sí que lo es, no parecen cosas tuyas. Pero tal vez mañana se te pase. O cuando vayamos a la fiesta y veas a otro chico. Ya faltan dos días, recuérdalo. Lo que yo creo es que te hace falta una noche de sexo. Ya verás que cuando eso pase, no recordarás ni en donde fue que viste a este chico la primera vez.

-Tal vez tengas razón.- Me quedé pensando en la fiesta, en que posiblemente me encontraré a Luca, el bombón de España y en cómo posiblemente tendremos sexo. Sonreí.

-De seguro estás pensando en Luca, es que te conozco como la palma de mi mano.-Dijo Kookie para hacerme molestar, pero no pude evitar sonreír. Me conocía demasiado bien.

Al cabo de una hora Jhope, Kookie y yo nos fuimos al parque. Trotamos, hicimos ejercicios y charlamos. Mientras caminábamos de regreso recordé que había dejado mi pote de agua en uno de los bancos. Corrí a buscarlo y como cosa rara tropecé con alguien. Me disculpé y seguí, al llegar a la banca y recuperar mi pote me di la vuelta y sentí que alguien intento esquivarme y al darme cuenta de quien se trataba me puse de todos colores. Su mirada era de molestia, pero al verme cambió a una de sorpresa y sonrió.

-Lo lamento, no te vi.- Dijo posando una de sus manos en mi hombro.

-Tra...tranquilo, todo bien.- Me odiaba en ese preciso instante.

Y siguió. Me quedé de pie, viendo cómo se alejaba y esperando que volteara y curiosamente no me sorprendí cuando lo hizo. Nuestras miradas hicieron contacto hasta que Jhope me brincó encima. Al mirar otra vez en su dirección ya no estaba.

-Pedazo de mier....-Dije golpeando a Jhope.-Lo vi Kookie, al chico del bus.

-Vaya vaya, esto es raro.

....

Sábado, 8pm

-¿A dónde vas tío?.-Lulu estaba recostada de la puerta de mi cuarto, con sus dos manitas en la parte de atrás balanceando su cuerpo.

-Tu tío va a una fiesta.-Dije mientras terminaba de arreglarme.

-¿Iras con Jhope y Kook?

-Así es mi pequeña niña. Mañana prometo llevarte al parque, ¿está bien?

-¡Si!.- Dijo sonriendo y mostrando su espacio vacío en la parte inferior de su boca. Fui hasta donde se encontraba y la cargue, ella me abrazo muy fuertemente y me dio un esplendoroso beso en la nariz. Era la niña más hermosa del mundo. Salí de la habitación.

-Me voy hermana, cuídense.

-Cuídate tu monstruo y mucho cuidado con lo que haces. Kookie sé la mamá por favor, a Jhope no le digo nada porque... Jhope es Jhope.

-Gracias por el apoyo Val, también te quiero.-Dijo Jhope mostrando todos sus dientes falsamente.

-Let's go boys!

La noche era fría, y más oscura de lo normal. Me sentía excitado, feliz. No salía a una fiesta en mucho tiempo y quería pasarla en grande. Sobretodo quería olvidar a ese chico.

Antes de llegar ya podíamos escuchar el fuerte sonido de la música y la bulla de la gente. Al entrar distinguimos a Lily de entre toda la gente. Su cabello rosa la hacía fácil de distinguir.

-¡Eeeeh! Que bueno que están aquí.- Se me acercó al oído.- Por allí vi a Luca.- Y empezó a tocarme el estómago. Yo rodee los ojos pero sonreí.

-Quiero bailar hasta no poder más, vámonos a la pista.- Hale a los muchachos. Empezamos a bailar al ritmo de I found you de The Wanted. Amaba esa canción. Me sumí con las demás personas, viviendo cada nota de la canción, cerré mis ojos y al abrirlos noté que los muchachos no estaban. Cuando intente buscarlos mi mirada capto a alguien que me estaba mirando fijamente. Era él, el chico del bus. Podía distinguirlo aun con la pequeña iluminación del lugar y cuando sonrió no me quedaron dudas. Era él... Y venia hacia mí...