¡Narcotraficante está en el puesto #4 en Romance!
___•___Castiel.
—¿Cómo haremos para saber donde está The Hell? sabes que sin su ubicación no podremos infiltrar a los dos hombres.
Paso la lengua por mis labios y golpeo la mesa con mis dedos, el único que puede brindarnos esa información es el padre de Lauren. Con dos hombres infiltrados en el bando enemigo podemos atacar con éxito, sabríamos cada uno de sus movimientos, incluso sus planes si piensan atacar a Black Blood, mi prioridad ahora es acabar con cada uno de ellos, ya ni siquiera el tema de Christian me importa tanto, por ahora.
Y aunque tome meses para que todo salga con éxito, no voy a desistir, trato de pensar positivo pero no encuentro como, no culpo a la vida ni tampoco a Dios por lo que a ella le ha pasado, sino a The Hell. Me desespera, verla tan débil y demacrada, sin poder escucharla o apreciar sus hermosos ojos azul cielo.Si tan solo hubiera llegado antes, tal vez ella estaría bien, pero solo tal vez...ahora queda encontrar una solución, he perdido las esperanzas de que ella despierte. El coma es una mierda.
El reloj que cuelga en la pared de mi despacho marca las tres de la tarde, es hora, ya no aguanto un segundo más sin verla, no importa que no me vea, me levanto y abrocho el botón del centro de mi traje.—Llama a Frank, él debe tener el número de los distribuidores de The Hell, que investigue cuando será su próximo cliente y en donde.
Asintió y volvió su mirada hacia la portátil.
—La saludas de mi parte.– Dijo, no respondí y salí del despacho.
Sentado en mi auto recuesto mi cabeza en el asiento y dejo salir un suspiro de cansancio, hace un mes que no duermo como debería y ya está haciendo mella en mi. Enciendo el auto y empiezo a conducir hacia el centro de Londres, rumbo al hospital, el silencio en el auto es escalofriante. Jamás a habido tanto silencio desde que ella no está, recuerdo que hablaba todo el tiempo o subía el volumen de la radio al máximo, y todo para molestarme puesto que sabía que odiaba el ruido, odiaba, pero luego terminé de acostumbrarme, y ahora que no está para hacerlo solo queda encender la radio y visualizarla a mi lado; ríendo con ganas y aplaudiendo mientras lo hace, acariciándome y besándome cuando me enojaba. La amo, y me duele pensar que en algún momento se irá.
¿Por qué pienso así? en momentos como estos es mejor pensar con positivismo, no lamentarse con los "si yo hubiera" porque los "hubiera" no existen ni sirven, si ella llegara a irse sufriría como nunca, pero estaría feliz porque con ella compartí demasiadas cosas. A veces, las personas, nos lamentamos de lo que no pudimos hacer con quien ya no está; pero, ¿por qué lamentarse? ¿No es mejor revivir lo que se hizo con esa persona? De ella aprendí que a pesar de los obstáculos que la vida nos pone o de las palabras hirientes de las personas, siempre hay que seguir con la frente en alto, sin importar si las cosas se compliquen y si se complican, enfrentarlas con valentía y sin temor, luchar para encontrar una solución. Porque jamás conocí y conoceré a una mujer más fuerte que ella.
Aprendí a que sin importar si el día es gris, es mejor sonreír para iluminarlo, si bien es cierto que el mundo no es color de rosa, tampoco se puede estar lamentado por lo que no se tiene o por lo que no pudimos hacer, hay que luchar para obtenerlo, y agradecer por lo poco que se tiene.Entré con prisa al hospital, con ansias de verla y hablarle de nosotros, Mike estaba sentado junto a ella en una silla y al verme se levantó, se despidió y se fue. Mike y Andy -el chico con nombre de mujer- se turnan para cuidarla mientras que yo no puedo, Andy cree que la asaltaron puesto que eso fue lo que dije, no podía decirles que fue una banda de mafiosos.
La contemplo, es hermosa aún con su piel casi gris y su notable falta de peso, su belleza y elegancia siguen estando presentes.
Tomo asiento en la silla en la que estaba Mike y envuelvo su fría mano con la mía.—Hola, preciosa. No te imaginas lo frío que está el día de hoy, anoche tuve que usar tres cobijas para entrar en calor, por eso tienes que despertar, para que me abraces en las noches. En el almuerzo Nina hizo tu comida favorita, estaba deliciosa. Recupérate ¿Si? solo tienes que hacer eso, lucha para que puedas estar de nuevo conmigo, Jay y yo estamos haciendo lo imposible para acabar con The Hell, pronto estaremos en paz, cielo.
Vamos, despierta, tu padre te extraña, todos te extrañamos e incluso tu madre vendrá a verte.
Te amo, Lauren, te amo mucho.Acaricié su rostro y besé sus labios con ternura varias veces.
La máquina que toma su pulso cardiaco empieza a sonar como si estuviera a punto de explotar, empiezo a desesperarme y llamo a gritos a un doctor pero tardan demasiado, su cuerpo empieza a sacudirse con violencia y corro a sostenerla de los hombros para que no se lastime. ¿Cómo sucedió si acabo de verla bien? ¿Por qué todo tan pronto?.
El miedo me consume y las voces en mi cabeza me traicionan «se irá» «le queda poco y morirá» «siempre estuvo en la mira de la muerte».—No, no, no, no. Vamos, Lauren, no hagas esto, por favor.
Las puertas de la habitación se abren con brusquedad y un montón de enfermeras y doctores entran a socorrer a Lauren, ¿Por qué hay tantos?. Me apartan de su lado y me tiran a una esquina de la habitación, forcejeo contra ellos y golpeo a algunos pero son más que yo.
Todo parece estar en cámara lenta, Lauren se sigue sacudiendo en la camilla y los doctores corren por todo el lugar, ¿Ell está bien?—¡Suéltenme! ¡Maldición! ¡Es mí esposa, suéltenme!
No sé como sucedió, no logro entender por qué.
Pero su cuerpo dejó de sacudirse, mi mundo cayó mientras veía como una fina línea se marcaba en la pantalla, ¿Se fue? su corazón dejó de latir y todos formaron un círculo a su alrededor. No la puedo ver, solo veo a un doctor negar con la cabeza.—Lo siento.– Dijo una enfermera con lástima y después me inyectó algo.
¿Ya no está? ¿Ha partido de mi lado? ¿Decidió escapar?
¿Por qué ahora todo está tan oscuro? ¿Por qué ya no la siento?
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Narcotraficante
RomansaSEGUNDO LUGAR EN LOS REVER AWARDS 2017 ¿Quién iba a decir que una simple cena cambiaría la vida de Lauren Dallas? La inocencia le ganó a la razón. Una simple chica estudiante y amante de la moda, una habitante más de Londres. ¿Su problema? Ella era...