Estaba en casa justo en este preciso instante, cuando lo vi avanzar hacia mi portal, estaba sola, así que justo al verlo, corrí hacia abajo sonriente. El primer día había sido totalmente hermoso, a pesar de las dos peleas de Matteo, bueno la primera pelea de Matteo y la "discusión verbal" con Nico.
- Hola cielo. - abrí la puerta justo cuando él estaba a punto de llamar al timbre.
Me sonrió mostrándome sus preciosos ojos haciéndose chiquitos tras el gesto.
- Hola linda. - sonrió dulcemente. -¿Qué tal?
- Bien señor celoso, ¿y tú?
Frunció el ceño, el ápodo no le había gustado nada por lo visto. De hecho, está muy celoso de Nico, aunque él, le aclaro que está enamorado de Jim, me alegro de que sea feliz de una vez por todas.
- No me llames así. - se quejó. -Necesitamos hablar sobre Pedr...
No quería que me hablara de él, no estaba lista aun para abrirle esa parte de mí.
- Cariño... - rugió excitado. - Tenemos que...
- Por dios, ¿no quieres seguir con esto?
- A la mierda. - se quejó mientras tiraba de mí tomándome de las piernas para subir a mi habitación. -Dios... nena.
Me acostó en la cama y comenzó a quitarme la ropa lentamente, estaba expuesta a él. Paseaba sus manos por mi cuerpo mientras que yo gemía levemente y con suavidad. Estaba extasiada, hasta que Matteo paró sus caricias mientras miraba mi coño.
- ¿Quieres que te lo bese?
- Sí, quiero que lo hagas. - supliqué mientras veía su sonrisa aparecer.
Sentí su aliento caliente sobre mí, mientras sus labios me rozaban el estómago. Me tocó con un dedo, lo bajo por mi vientre hasta el final, y me lo deslizó hacía dentro.
- Estás mojada, muy mojada.
Como acto reflejo desesperado, puse una mano sobre su cabeza y lo agarre suavemente del pelo.
- ¿Quieres que te bese este coñito tan lindo? - repitió, amaba sentirme desesperada.
- Sí... dios, lo deseo.
Apoyó sus labios en el estómago, me exploró el ombligo con la lengua. Recorrió con la boca el mismo trayecto que había seguido con el dedo, y... cuando encontró lo que buscaba, se puso a lamer y a morder, sin dejar de dar vueltas con los dedos por dentro y por el borde. No podía creer lo que estaba sintiendo, era muchísimo más fuerte que esto, quizás porque era nuestro primer polvo como pareja, como dos locos excitados enamorados.
- Me encanta tu sabor, Luna.
¿De verdad?
¿Sería eso posible?
Sus manos empezaron a subir por mis piernas y a separarlas aún más sobre la cama. Nunca me había sentido tan llena, me sentía tan feliz, me encontraba al borde de mil estallidos, de un millón de sensaciones diferentes y sabía que si él seguía haciendo lo que estaba haciendo, yo... Entonces paró.
- ¿Por qué paras? - exclamé.
- ¿No quieres que paré? - me preguntó asombrado.
- ¡No!
- Entonces dime lo que quieres.
- Quiero correrme, quiero follarte, quiero follar contigo, quiero hacer el amor contigo. Matteo.
Sentí al fin, algo cálido que se movía en círculos alrededor de mi pezón izquierdo. Su mano me agarraba el otro pecho con firmeza, tenía la boca caliente. Chupó y tiro del pezón, mientras su mano libre abandonaba mi pecho y viajaba hacia abajo sobre mi estremecido vientre, por el pubis y más allá, esta vez se deslizó dentro de mí dos dedos, al principio, su suavidad y después con urgencia.
¡Oh qué placer!
Levanto las rodillas para arquear la espalda.
- No te muevas. - me susurró - ¿Te gusta así?
- Sí, me gusta muchísimo. - respondí, levantando un brazo por encima de la cabeza para agarrarme al borde de la cama.
Entonces dejó de mover los dedos y se separó de mí para mirarme.
- Eres preciosa. - dijo.
Continuó su trabajo, comenzó a lamerme con suavidad, lentamente, en círculos como si fuera una cosa desigual. Mientras que se ayudaba con los dedos. Prosiguió sus movimientos hasta que me corrí.
- Oh dios.
Matteo se separó de mí con una sonrisa.
- Eres tan deliciosa, Luna.
- Matteo, ¡fóllame ya!
- Hazme el amor. - me corrigió.
- Hazme el amor, necesito tenerte dentro.
- Te deseo tanto. - me susurró para separarme más las piernas y casi tumbarse encima de mí mientras me penetraba.
Gemí internamente, mientras que él comenzaba con sus embestidas.
- Te quiero linda...
- Y yo te quiero a ti.
- - -
A veces se me hace raro escribir eso xd Por cierto... ¡Ya vieron a Luna y Matteo cantando Vives en mí! ♡♡♡ Son hermosos :'3
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