Capítulo 13

4.1K 279 20
                                    

Narrador externo.

Entonces lo apartó de golpe mientras miraba asustada a su novio salir rápidamente, miró aquel condón, estaba roto. Dio un respingo y miró a Matteo con rapidez.

- Mierda. - susurró mientras corría a buscar su ropa.

Matteo se había quedado estático, no sabía qué hacer, simplemente estaba ahí, quieto, mientras Luna corría a vestirse, corrió al baño y se limpió como pudo, era la regla general normalmente, cuando acabó aquel proceso de asearse un poco antes de huir despavorida a urgencias donde le darían la pastilla del día después.

Vistió su tanga y prosiguió con el sujetador, su camiseta, su chaqueta, los pantalones... hasta hallarse ya vestida, cuando salió del baño, Matteo seguía estático, Luna frunció el ceño molesta por no saber que estaba pensando y por no haberla tranquilizado en un momento así, ella quería un bebé siempre y cuando fuera mayor y no tuviera la vida por delante. Como no la apoye si pasa algo, juraba para sí misma que lo mataría, salió corriendo mientras marcaba el número de su hermano mayor.

- Sebas, te necesito justo ahora. Por favor, ven...

Las lágrimas caían de sus mejillas, estaba totalmente triste, destrozada mientras que veía como su futuro podía destrozarse si no tomaba la pastilla.

- ¿Qué sucede? - preguntó asustado.

- Yo... ven conmigo a urgencias y toma mi bolso.

No fue capaz a explicar nada de lo que le había pasado, estaba asustada y no sabía que hacer exactamente para evitar algo, porque podía fallar la pastilla o hacer que algo sucediera que estropeara la situación, una vez que pasaron diez minutos esperando a su hermano en la estación, llegó.

Subió corriendo, no tenía tiempo para nada, quería alejarse de todo.

- ¿Qué ha pasado?

- El condón... - masculló tan bajo que casi no podía oírse lo que había dicho.

- Genial...

Simplemente se quedó callada, y su hermano mayor no la presiono para que hablara de lo que le estaba pasando, así que relajada trato de convencerse de que todo estaba bien, que todo saldría bien y que no habría problemas con ninguna cosa.

Llegaron al centro médico y revisó su móvil para saber si Matteo le había escrito algún mensaje, mientras tanto, se dedicaba a esperar por su hermano que estaba hablando con el de ventanilla para pedir que la deje pasar, una vez acabado aquello, se sentó al lado de Luna tranquilizándola con palabras.

- Todo saldrá bien, estoy aquí contigo.

El sí era un buen hermano que la apoyaba en todo.

Novios | LutteoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora