Beth soltó una lágrima mientras las puertas del ascensor se cerraban, había sido una completa tonta al arruinarlo todo pero era como podía reaccionar, no era de piedra y le dolía como se portaba él con ella cuando le había salvado prácticamente la vida.
Se sorprendió cuando unos dedos fueron casi aplastados por las puertas y las puertas se abrieron de golpe, la delgada joven se tapó la boca y luego sintió que tiraron de ella hacia afuera. Kai la sostenía del abrigo mientras la miraba a la cara.
Tomó su pequeña mano mientras la llevaba de regreso a paso rápido al departamento, abrió la puerta y entraron. Fue Kai quien la puso alerta, al parecer algo había pasado.
¡Entra al baño!-le dijo mientras miraba esta vez por la ventana.
Por la rendija vio como cerraba las ventanas disimuladamente y miraba desde una esquina hacia la calle. Al parecer eran acechados otra vez.
Kai caminó hacia el baño y cerró la puerta mientras la truncaba con el pequeño aparador en donde acomodaban las toallas, caminó hasta la ducha y apoyado en la pared subió como un acróbata para abrir la ventana de arriba.
Escúchame –la miró a la cara desde su posición- si tocan la puerta, escaparás por aquí.
Beth solo asintió mientras lo veía bajar, se sentó a su lado mientras este sacaba el arma que tenía y la dejaba sobre sus pies, la muchacha lo observó con los ojos bien abiertos y luego siguió sus manos que fueron hacia su pantalón, sacó de una de sus botas un cuchillo que reposó sobre el piso.
¿Sabes usar un arma?-la miró.
Antes de que Beth articulara algo, Kai tomó su mano y dejó la pistola sobre su mano.
Aprenderás de todas maneras –le dijo mirándola, solo halló un pequeño rastro de inocencia y nervios- solo si es necesario.
Beth dejó el arma en sus pies nuevamente y bajó la vista mientras soltaba un suspiro, Kai incluso la miró, esta era una buena oportunidad para hablar pero no sabía como.
Be-Beth –le dijo y giró a ver su rostro- ¿Estás bien?
Genial, ni él mismo sabía lo que estaba diciendo.
Disculpa-pronunció ella, Kai la miró incrédulo- me porté como una niña tonta... te puse en riesgo.
No es cierto –contestó este- yo tuve la culpa, además, me porté como un idiota y quiero... disculparme por eso.
Beth lo miró al igual que él, incrédula.
Sé que me porté como un tonto pero todo me ha resultado difícil desde que murió Kyung Soo, lo extraño mucho, incluso extraño a So Hee y esos días en los que solíamos reír aunque sea una milésima de segundo con ellos. No puedo superarlo tan rápido pero debo hacerlo, sentí que me había quedado solo hasta que bebí sin control y pensé que me iba a morir. Cuando desperté te vi y supe que no estaba solo, que me estabas apoyando a pesar de todo Beth y quiero al menos decirte gracias por eso –giró a verla.
Beth estaba cerrando los ojos de sueño mientras su cabeza danzaba en la pared, al parecer Beth no había oído nada de lo que el sincero corazón de Jong In había dicho, porque él estaba seguro que ese había sido Jong In y no Kai, el asesino.
Se acercó a ella y tomó la pequeña cabeza de la muchacha para apoyarla en su hombro. La miró un momento y luego miró al frente mientras apoyaba esta vez la cabeza en la pared. Nunca antes había tenido compañía femenina, ni siquiera una amiga y su hermana no contaba porque ella no había conocido ese lado oscuro de él.
♥♥♥
Ando algo demostivada, mi cirugía no salió como esperaba. Demoré en sala dos horas y he perdido movilidad de la lengua porque me lesioné un nervio. Estaré así por unos meses, sin hablar bien y sin sentir sabores en la lengua. :C tomaré algunas terapias y trataré de ya no desmotivarme.
Espero les guste el capítulo ♥
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Sweet Peach ✤ Kim Jong In
Fiksi Penggemar✤ Ella lo vio, él la vio. "Él se la llevó con la certeza de que sería un secuestro, sin pensar que terminaría secuestrado por su amor." ✤ Capítulos cortos. ✤ Inspirado en la película: León El Profesional.