Hablando con las chicas; Rowen

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Narra Romeo

Luego de lo sucedido con Nashi, unas horas después las cosas se habían calmado en el gremio, los chicos se habían ido hace bastante y yo me encontraba con la cabeza apoyada en la mesa, teniendo un debate mental sobre si ir donde Wendy o no. Decidí no darle más vuelta al asunto e ir a donde estaba.

—We-Wendy... ¿Podemos hablar?

Me miró dudosa unos segundos, que me parecieron eternos.

— Esta bien, esto pasaría tarde o temprano, vamos.

Comenzó a caminar y rápidamente la seguí, me quedé observandola embobado, había cambiado bastante, pero esa aura de inocencia aún estaba con ella, seguia igual de hermosa.

El silencio reinaba, lo cual me puso incómodo por lo que decidí romper el hielo

— Y dime... ¿Qué fue de ustedes estos años?

—A ver... Pues poco después de irnos Lucy-san consiguio una llave muy importante que nos permitió ir a otro mundo y ser princesas, entrenamos todos estos años luego de tener a nuestros bebés, sufrimos bastante pero los perdonamos, nos hizo muy feliz el poder volver a verlos, los extrañamos mucho.

—Lo lamento. — dije mientras me detuve a medio camino, estaba apretando mis puños.

—¿Por qué?

¿Cómo podía ser tan dulce y sonreír de esa manera angelical, aún después de todo?

—Por todo... Por el daño que les cause, por no creer en ti, por no estar contigo, me hubiera encantado que tu hijo tambien fuera mío y vivir la experiencia del embarazo y lo que es la paternidad, aunque se que no lo merezco, aún asi me gustaría tener la oportunidad de tener una familia contigo y Rowen...

—Romeo... hay algo que no te he dicho.

La mire confundido y preocupado al ver la expresión en su rostro.

—¿Qué cosa?

—Rowen... Rowen Es tu hijo.

—¿Qué?

Abrí mis ojos como plato, la noticia me impacto pero no podía comparar con nada la emoción que sentí al escuchar esas palabras.

—Lo siento Romeo-kun, se que quizá debi decirlo antes, pero no sabía si querías hacerte responsable, eramos pequeños en ese entonces y no quería molestarte.

Bajo su mirada mientras lloraba y mi corazón se estrujo al verla así, rápidamente me acerque y luego de limpiar suavemente su rostro la abrace con fuerza.

-Idiota... ¿Cómo podría haberme molestado? Es la segunda mejor cosa que me podría haber pasado, la primera sin duda fue conocerte.

Me apartó suavemente y me miró a los ojos mientras sonreía y nuevamente comenzaba a llorar.

—¿Lo... Lo dices enserio?

—Por supuesto... Wendy, dejame empezar de nuevo, siendo una familia, estando juntos... como debió ser siempre, Talvez me cueste ganar la confianza de t... Nuestro hijo y la tuya pero estoy seguro que lo lograré.

—Yo también quiero empezar de cero, aunque tienes razón, te costará ganar la confianza de Row...

Wendy fue interrumpida por una voz a mi espalda, por lo me gire a ver la persona.

—Asi es Mamá, a este tipo le costara ganar mi confianza, se me es desagradable oirte decir eso, en sí el saber que existes es un hecho desagradable, más te vale que no vuelvas a dañar a Mamá o las pagaras.

Rowen se encontraba de brazos cruzados, dedicandome una mirada fría, soltando las palabras de forma seca y con una molestia notable.

—Hijo...

-Rowen para ti.

Escupió interrumpiendome, para marcharse y dejarme con las palabras en la boca.

—Tranquilo, él es difícil pero de seguro lo lograrás.

Wendy trataba de consolarme mientras me dedicaba una cálida sonrisa.

—Si... tienes razón.

Esto sera más difícil de lo que pense...

¿Traición?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora