Capítulo 8

2.6K 164 3
                                    


La mañana comenzaba, la brisa fría golpeaba la ventana y acurrucaba a las chicas que aún dormían abrazadas, al fondo en la sala sonaba un poco fuerte la radio, y creándose un bello momento al son de Thinking Out Loud de Ed Sheeran. Camila despierta para solo volver a dormir acurrucándose más en el cuerpo de Lauren, por otro lado Lauren tenía el rostro rojizo por haber llorado toda la noche.

Después de un par de horas, el frió se hizo más fuerte y el viento termina abriendo la ventana. Ambas despiertan, Lauren voltea y al percatarse de la presencia de Camila, salta asustada. Camila trata de calmarla y de explicarle lo que sucede pero esta solo termina huyendo del edificio, ignorando el hecho de estaba descalza y solo llevando puesta una ancha y muy larga camiseta negra con el logo de Metallica en ella. Camila sale detrás de ella pero no pudo alcanzarla, al ver que perdió por completo su rastro pide ayuda busca a algunos amigos, tanto de Lauren como de ella, y contactan a la Policía. Todos la estuvieron buscando durante horas, y nunca consiguieron indicios de Lauren. Camila estaba muy preocupada, sentía que todo lo que estaba sucediendo era por su culpa, el accidente, pensó en todo hasta los momentos que ahora estaban viviendo y no pudo dejar de sentirse culpable.

Mientras todos estaban en plena avenida, Camila al pensar excesivamente rompió en llanto, sus lágrimas cubrieron por completo su rostro, Shawn la abrazo y trato de hacerla sentir mejor, pero no funciono y ella solo termino desplomada en el suelo, aun con su pijama rosada con pequeñas bananas, sostuvo fuerte la pierna de Shawn mientras lloraba con más fuerza, Shawn le musitaba con mucha suavidad con la esperanzas de que se recuperara pero fue imposible nuevamente, Camila salió corriendo. Las dos desaparecieron por completo, ahora la búsqueda fue más extensa y se unieron en ello más personas, familiares y hasta vecinos colaboraron. Lo que nadie sabía ni siquiera su mejor amigo Shawn, desde los diez años, Camila al sentirse mal se escondía en una casa de árbol que se había encontrado cerca de un parque y esta vez no era la excepción, ella había ido a ese sitio, y para su sorpresa esta vez ya estaría alguien en la casa del árbol. Así es, Lauren estaba ahí, llorando y con sus muñecas marcadas y cubiertas de sangre.

Lauren: ¡Aléjate de mí! –exclamó señalándola con un pequeño cuchillo.

Camila: ¿Qué haces, Lern? –pregunto completamente pálida al detallar semejante escena.

Lauren: No sé quién soy, de donde vengo, no sé quién eres y una parte de mí tampoco lo quiere saber.

Camila: Soy tu novia... –musitó mientras se acercaba a ella.

Pero fue muy difícil, Lauren no le permitió en ningún momento acercarse, dio unos pasos hacia atrás y se sentó, extendió su brazo. Viéndola fijamente a sus ojos verdes le suplico le diera el cuchillo, pero Lauren solo le respondió con una sacudida hiriendo a Camila. Se levantó con rapidez, empuño su mano y la cubrió con parte de su pijama.

Lauren: Lo lamento, lo lamento en verdad, no fue mi intención. –exclamó sollozando tratando de curar la mano de Camila que yace bañada en sangre.

Camila: No te preocupes, sé que no lo hiciste a propósito. –susurro sonriendo muy cerca de su rostro.

Lauren: ¿En serio somos pareja?

Camila: ¿Por qué lo dudas?

Lauren: Porque siento como si te hubiera perdido hace tiempo.

Camila: Y es que así fue, me perdiste y yo te perdí a ti... –musito mientras masajeaba su mejilla con la otra mano. –Pero nos estamos volviendo a encontrar. –agregó mientras sus ojos brillaban a ver a una Lauren temerosa.

Camila continuaba masajeando la mejilla rojiza de Lauren, había dejado de llorar, Lauren se sentíasegura pero aún estaba triste, Camila en cambio sintió felicidad, porque la había encontrado y porque sabía que parte de ella aún seguía vigente, después de un fuerte abrazo, Lauren saco su rostro el pecho de Camila y está volvió a penetrar sus ojos cafés y cristalinos con los de ella, ambas se besaron apasionada dentro de la casa del árbol cerrando así un trato que les costaba romper. Las dos tenían mucho que decirse pero las dos también tenían mucho que callar. 

Same Place #BdF2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora