peligro | Harry Styles #1

veintidós

Había un gran silencio incómodo entre Gordon y yo.

Él estaba sentado en la barra de mi cocina mientras que yo me encontraba sentada en una silla comiendo unos cereales.

—¿Dónde crees que pueda estar Louis? — pregunté intentando romper ese silencio.

—Puede que lo hayan mandado a hablar con el director, no tengo ni idea.

De nuevo aquel momento incómodo.

—¿Te gustaría salir alguna vez con nosotros?

—Eso sería genial. — dijo sonriendo.

—Te advierto que al principio te cansarás de mis amigos. Las bromas de Louis, la sobreprotección de Zayn, el sentido paternal de Liam y, los celos de Harry.

—¿Celos? ¿Por qué?

—Ya te darás cuenta.

Estuvimos hablando sobre temas triviales y le invité a comer cuando era medio día.

Teníamos pensado ir al instituto por la tarde a ver a Zayn, ya que algunas tardes el equipo debía quedarse a entrenar.

[ ... ]

—¡Zayn! — grité al verle caminar por el césped del campo con una toalla sobre su cuello con la que se limpiaba el sudor.

Este al oírme corrió hacia mí y me levantó en el aire dándome vueltas a la vez que me abrazaba.

—¡Amber!

—Hueles fatal. — dije riendo.

—Yo también me alegro de verte pequeña.

—Sabes que te quiero.

—Y yo.

Nos volvimos a abrazar..

Me separé de Zayn y acerqué a Gordon a mi lado agarrándole del brazo.

_Zayn, este es Gordon Deep. Gordon, este es Zayn Malik.

Ambos sonrieron y se dieron la mano para acto seguido abrazarse.

—Nosotros ya nos conocemos. — comentó Gordon.

—Nos conocemos desde hace dos años, él me ayudaba con química. — siguió Zayn — Por cierto Amber, ¿cómo te encuentras?

—¿A qué te refieres? — pregunté algo confundida.

—Louis me contó lo de esta mañana, dijo que Dylan te besó y tú golpeaste sus bolas, ¿es verdad?

—Por desgracia sí, pero Gordon me sacó de ahí antes de que las cosas empeorasen. Dylan es idiota.

—Tranquila, ya se han encargado de él Louis, Liam y Harry.

—¿Qué han hecho?

_Le dieron una paliza y le amenazaron con que no se volviera a acercar a ti ni a mirarte.

—Pero eso es estúpido.

—Ellos son estúpidos. Los hubiese parado, pero hemos estado todo el día entrenando y me enteré después.

—¿Dónde están ahora?

—Han estado dos horas en detención después de que terminasen las clases, y ahora están limpiando el instituto.

—¿Limpiar el instituto?

—Sí, ya sabes, fregar, quitar el polvo, colocar todo en su sitio, barrer...

—Voy a buscarles, ¿venís? — pregunté a Zayn y Gordon.

—Debo ir a ducharme, apesto a sudor.

—Yo te acompaño.

Agarré la mano de Gordon y comenzamos a correr hacia la entrada del establecimiento.

Comenzamos por la primera planta, entramos a todas las clases, pero no estaban; subimos a la segunda e hicimos lo mismo, pero tampoco estaban, al igual que con la tercera.

Fuimos al gimnasio que era donde se hacían los partidos de baloncesto y voleibol. Abrimos la puerta silenciosamente para no interrumpir si había algún tipo de reunión.

Al abrirla del todo pudimos ver a Liam, Louis y Harry jugando con unas pelotas de baloncesto.

—¡Chicos! — grité.

Estos al verme repitieron la misma acción de Zayn y se me echaron encima.

—¿Cómo te sientes muñeca? — preguntó Louis acariciando mi mejilla con el dorso de su mano.

—Mucho mejor, estoy calmada. Ya no parezco una loca.

—Te queremos tanto, estábamos preocupados por ti. — dijo Liam abrazándome.

—Tranquilos, Gordon ha estado conmigo todo el día cuidándome.

Louis dio dos suaves palmadas en su espalda y le sonrió.

—Gracias por cuidar de ella. — le dijo.

—No hay de que. — le contestó sonriéndole también.

Harry se acercó a mí y me alejó de los demás. Cuando estuvimos lo suficientemente lejos, me envolvió con sus brazos y me perdí en su perfume. Besó mi mejilla aún abrazándome.

—No dejaré que nadie te vuelva a tocar, te lo prometo. Nadie volverá a hacerte daño. Tú eres mi pequeño mundo, y si te derriban yo les derribo.

—Te quiero Harry, muchísimo.

—Yo también, ya lo sabes.

Seguimos abrazándonos por lo que a mi parecer fueron cinco minutos.

Al separarse de mí me dio un corto beso en los labios sin que nadie nos viera. No se lo repliqué, realmente necesitaba un beso de Harry.

Nos miramos a los ojos y sonreímos.

Le quería, de eso no había duda.

Volvimos con los demás que se encontraban sentados en el suelo hablando entre ellos.

—¿Tú qué opinas Amber? - preguntó Liam en el mismo momento en que me senté.

—¿Sobre qué? — le pregunté.

—Sobre ir a hacerle una visita sorpresa a Niall, echamos de menos al leprechaun.