Capítulo 10

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28/ Septiembre/ 2012

(Narra ______)

El alma vacía

De horas descompuestas y alteradas es el día hoy, de encíclicas arcanas sobre Dioses mediocres que prefieren ser hombres, de cólicos gramaticales atrapados en el ático de mi cabeza que ya huele a flores secas, de agua barro que ensucia los límpidos cristales transparentes, de nubes de plata envejecida sostenidas por cuatro clavos clavados sobre las sienes, de vómitos de pequeños diablos que una vez fuera de la boca vuelven la cara te escupen y salen corriendo...
De un gris amanecer sobre un coche solitario en la puerta de un club de carretera abandonado, de mano izquierda que aprieta el estómago con la misma fuerza con la que la derecha oprime el pecho del corazón guardado, de discurso sin sonido y sin prole, de reyes sin país y sin lacayos, de vírgenes sin desamparados, de tratado de paz sin guerra previa, de platos llenos de arena, de noches sin sol al que ir, de días que nunca acaban de apagarse...

Hoy es un día de esos de suicidarse siete veces y resucitar cobardemente seis, porque quieres pensar que alguna de esas veces has muerto de verdad.

Mi corazón latia queriendo explotar, me encontraba en mi departamento y a lado unos llorosos de Lady y Mile.

Lady: ¿Que mierda te estas haciendo?- Me sarandeaba fuertemente.

Mile: ¡_______ por dios! Mirate te estas muriendo....¡_______! ......¡______!- Cerré mis ojos, estaba realmente cansada de mi vida, de mis problemas y de todo.

......

Todo estaba obscuro, me sentía intranquila, tenía miedo, mucho miedo, camine por mucho tiempo y una luz al final del camino llamó mi atención, me tarde mas en llegar al final que nada, crucé y la luz me cego.
Abrí los ojos y los acostumbré a tanta claridad, inspeccione todo y me encontraba en un bosque, el aire en mi rostro me daba paz, cerre los ojos para disfrutarlo.

Caminé un poco é iba mirando todo, había flores que nunca en mi vida había visto, tomé una y la acerqué a mi nariz, ese olor era extremadamente delicioso.

Al seguir caminando encontré una senda llena de flores de diversos colores, di un paso hacía el y mi corazón lo sentía débil, me inque y respire pausadamente.
Escuché mi nombre, miré a todos lados y no había nadie, regresé al lugar y mi vista la atrajo un punto, unas hermosas rosas rojas, toqué una y escuché nuevamente esa voz, volteo y me encontré a mi en una camilla, miré a todos lados y estaba en un cuarto blanco, pero lo mas impresionante era verme ahí, acostada y conectada a esos cables.

Tomé el pomo de la puerta y salí, ahí se encontraba mi família, lloraban, me acerqué y vi al Doctor hablando con ellos.

Enrique: ¿Se pondrá bien?- su labio temblaba y le costaba hablar.

Doctor: No se, tubo una sobredosis, segun su expediente ya tubo uno hace años, le hicieron un lavado de estómago.- Suspiró y vio directamente a los ojos a Enrique.- Tu hija calló en coma otra vez...

Enrique: No puede ser.... no otra vez....- Se sento en la banca y se tapo la cara, a lado estaba Jose.

Alejandro: ¿Va a despertar?- Se veia realmente mal.

Doctor: No se, puede que ahora, mañana, en semanas, meses o incluso años... solo tengan fe. Disculpen.

Se fue y todos se veían realmente mal, di la vuelta y entré al cuarto, me acerqué a mi misma.

_______: tengo un cuerpo realmente inútil, se supone que tenía que ser un suicidio, tenía que morir y no solo quedar en coma...- Suspire y me sente.

¿Ahora que se suponía que tenía que hacer?¿Vagar por el mundo?
Me reí fuerte e irónicamente, me acerqué a la ventana y la luz me cego nuevamente, abrí los ojos y me encontré en el bosque otra vez, me acerqué a la senda.
Camine por ella y escuche ese sonido, me recordó cuando murió mi Tía Carmen, ese ruido de la máquina que anunciaba su muerte, miré hacía atras y escuché gritos y llorosos, pero seguí caminando, poco a poco ese ruido se fue haciendo lejano.
Llegué al final de la senda y me encontré con una casa grande, ¿Es mi casa? Es la casa donde crecí, donde mi padres vivieron, camine explorandola desde afuera, miré el cielo y estaba soleado, fui al jardín guiada por una dulce voz, alguien estaba cantando, había escuchado esa vos y esa canción antes, pero no recordaba donde.

Me paré y miré detenidamente a la mujer que estaba cantando, no era alta, ni de baja estatura, traía unos guantes de jardinero, se encontraba tocando las flores y podandolas, su voz era hermosa y me recordaba a mi niñez.
La miré mas detenidamente, su cabello era rubio como el de Ángela, le llegaba a la cintura y era ondulado, llevaba una blusa floreada y un pantalón de mezclilla un poco sucio por la tierra de las plantas.

Se escuchó un ruido que me asustó, miré hacía atras y era ella, Carmen, en el suelo estaban vasos rotos y el piso mojado por un liquido transparentoso, pero con un olor a naranja, Carmen me miraba asombrada y a la ves con terror.

Carmen: ¿________ que haces aquí?- me acerqué y la abracé.

________: Tía.....- ella me soltó y me miró con lágrimas en los ojos.

Carmen: no hija...... - una voz se escuchó a mi espalda, miré y era la señora que apodaba las flores.

La miré mejor y su cara se me hacía conocida, sus ojos eran casi identicos a los de Ángela, el contorno de su rostro era igual al de Ángela.

*****: No deberías estar aquí, Enrique sufrirá mucho.- iba a contestar pero calle.

Carmen: ¿Que hiciste _______? Tienes que vivir ¡Debes irte ya!- Me empujo a dirección del sendero.

*****: Puede quedarse un tiempo con nosotras, tenemos mucho de que hablar.- La mire nuevamente.

Carmen: pero.....- Mi tia se veía muy alterada.

*****: Tenemos permiso de ayudarla a salir del camino feo, necesita amor, mucho amor.- me miró tan maternal y se lo permití, me gusto y quería que me mirara siempre así.

______: ¿Quién eres?- Ella sonrió.

*****: Es normal que me hayas olvidado... soy Selena, tu mamá. 

......

Look What You've Done. Parte III.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora