"Best Friends"

¨C22: Verdadero Amor¨

Me desperté con un gran buen humor, tarareaba por todos los lugares de la casa. Mi madre me miraba extraño pero prefiero no preguntar nada. -Hoy es un gran día - dijo Michael, mi padrastro. 

-Hoy es grandioso y hermoso día, Michael - dije con una gran sonrisa. 

Anoche Leo se había ido muy tarde, pero fue una de las noches mas linda que había tenido. Y mi rostro y todo mi cuerpo mostraban esa felicidad que tenia, de haber pasado una noche así con Leo.

Escuche el claxon de un auto, -Leo- pensé. - Me tengo que ir - dije a mi familia y salí, y vi a Leo salir de su auto, camino mas bien corrió hacia mi y me beso. 

-Buenos días, preciosa - dijo luego de besarme. 

-Buenos días - dije con una gran sonrisa. Ambos caminamos hasta su auto abrazados, el me abrió la puerta y entre en el auto. Lo vi mientras el rodeaba el auto, segundo antes de que entrara su teléfono comenzó a sonar, lo tome y el entro. En la pantalla vi el nombre de Alex, y lo mire. 

-Terminare con ella hoy - dijo Leo, y solo asentí como respuesta. Mi teléfono sonó y era un mensaje de West. 

-Terminare con el hoy - dije y Leo solo asintió como respuesta. 

***

Ya en la escuela todo era normal, y tranquilo. Tenia que decirle a Kelly que terminaría con su hermanastro pero no encontraba como hacerlo, ni como comenzar la conversación. Estábamos sentadas en las gradas viendo a los chicos jugar, se supone que no debemos estar aquí, debemos estar en historia pero Kelly no tenia ganas de tomar la clase así que yo tampoco. 

-Amber Roy - dijo Kelly y gire a verla, sorprendida al escuchar mi nombre completo saliendo de sus labios. -Tienes algo que decirme. 

-¿Que? No... claro que no. - mentí pero muy mal, realmente mal. 

-Eres mala mintiendo, Roy - dijo. 

-¿Como sabes que tengo algo que decir? 

-Cuando sueles estar nerviosa o ansiosa, tensa o incomoda, sueles jugar con tus dedos como lo estas haciendo ahora- dijo y ambas miramos mis manos, y era así, estaba jugando con mis dedos de manera nerviosa. 

-Me conoces mejor que yo misma... 

-¿Que pasa? 

-Oye - dije y la tome de las manos - Prométeme que no me vas a odiar

-Amber...

-Solo prometerlo

-Esta bien, no te voy a odiar, te lo prometo. 

-Pues, creo que terminare con West y no es por que el es un mal novio, o me hizo algo. O nada parecido, es solo que estoy muy confundida ahora mismo, con todo... Vamos a terminar la escuela en unos pocos meses, tengo que pensar en la Universidad y en los exámenes. - hable muy rápido. Ella solo me miraba sin decir nada - No te quedes callada

-¿Te diste cuenta de que amas a Leo? - dijo, me sorprendí al escucharla. 

-¿Que? - dije confundida.

-Desde que llegue a la escuela supe que tu y Leo, estaban muy enamorados, todos lo saben menos ustedes. Las chicas lo único que dicen sobre Leo es que puedes tener su cuerpo pero nunca  su corazón porque su corazón es de Amber Roy.

-No puedo cree que todo mundo lo sabes. Lo siento mucho...

-¿Por que te disculpas? Por amar a alguien que te ama tanto como te ama a ti... West puede parecer, no, West es un idiota pero no un tonto, el sabe que Leo es el dueño de tu corazón. 

-¿Por que nunca dijo nada? - dije 

-Porque a West le gustas, y creyó que podría sacar a Leo de tu corazón pero eso es imposible... Mama siempre dice algo, por amar nunca podemos arrepentirnos, el amor es el mejor sentimiento que existe en esta tierra. 

-Soy muy tonta... No debí jugar con West así.

-No jugaste con West, se que lo quieres pero nunca como a Leo. Lo bueno de todo esto es que no esperaron mucho tiempo para hablar claro de lo que siente uno por el otro. No dejes ir a Leo esta vez, ¿si? 

-Si..- dije mientras asentía.

-¿Cuando hablaras con el? - dijo 

-Esta noche

-Mientras mas rápido mejor. - dijo y solo asentí como respuesta.

***

-Leo, no- dije entre risas. Leo estaba sobre mi, haciéndome cosquillas. - ¡Leo! 

-Ya - dijo y se acostó a mi lado. Estábamos en su habitación, luego de la escuela decidimos ir a su casa. Ni sus padres ni su abuela se encontraban en casa, ya que trabajaban en el restaurante. - Ven aquí - dijo con sus brazos abiertos y nos abrazamos. 

Estábamos en silencio en la habitación, solo se escuchaba uno que otro auto pasar. Estaba cómoda, me sentía a salvo, y sobre todo feliz. -Estoy tan feliz - dijo Leo, como si leyera mis pensamientos. 

-Yo también - dije, me levante un poco para verlo mejor, y nos besamos. Pero su teléfono nos interrumpió-Toma el teléfono.

-Déjalo que suene - dijo y volvió a besarme- Estoy muy ocupado ahora.

-Solo tómalo y luego seguimos - dije y el se levanto de la cama y tomo su teléfono. 

-¿Si? - dijo - Si soy yo, ¿que ocurre? ... ¿Que? ... entiendo - Leo hablaba algo molesto y desconcertado. -Gracias por llamar. 

-¿Que ocurre? - dije cuando colgó la llamada. 

-Tengo que ir al hospital - dijo el 

-¿Por que? ¿Son tus padres? ¿Es la abuela? - dije preocupada. 

-No, preciosa. No es nada de eso. Alex, fue hospitalizada, y sus padres no están en la ciudad. 

-Oh, Dios. ¿Ella se encuentra bien? 

-No lo se, quieren que vaya. Aun cree que tenemos algún tipo de relación. 

-Entiendo... - dije mirando al suelo. 

-Te llevare a casa, me asegurare de que este bien y luego volveré a tu casa. ¿Ok? -dijo y beso mi frente, solo me quedaba aceptar lo que estaba ocurriendo.