I'm Gonna Change You

¿Creía que iríamos en escoba?

"Y caeré
Y romperé
Y fingiré
¡Cuanto quiera!

Y me derrumbaré
Y me vendré abajo
Y te engañaré
¡Cuanto quiera!

Tengo tanto miedo
De lo tengas que decir
Por que estoy callado ahora
Y el silencio te da espacio"

Twenty Øne Piløts - Fake you out

*** *** ***

-Es de tu... Padre.

-Sí.

-¿Cuándo...?

-Hace casi una semana, sólo que no había querido abrirla. Creí que sería otra cosa.

-Y, ¿qué es?

Remus guardó silencio, mirando sus zapatos para distraerse. Parecía contrariado, confundido e incluso un poco... ¿Dolido? ¿Triste? Era una expresión difícil de interpretar.

Hermione le regresó los pergaminos. Si él no quería decirle, mucho menos querría que ella leyera la carta. Aguardó paciente a ver su reacción, aunque esperaba cualquier cosa. Tras un suspiro, Remus continuó.

-Quiere que me encuentre con él.

-¿Piensas ir?

-No lo sé-se pasó una mano por el rostro-. Es que... Hay más.

Un factor sorpresa. ¿Qué podría ser? ¿Estaría muriendo? ¿Le pediría perdón? ¿Ajustarían cuentas? Todo podía pasar, las posibilidades eran muchas.

-¿Qué?

-Yo... Yo tengo un hermano.

-¿Un...? ¿Bromeas?

-No. Me escribió por eso, quiere presentarnos. Yo... Yo no sabía de su existencia, pero él sí de la mía. Al parecer, él le contó todo de mí.

-¿Te lo ocultaron?

-Eso parece. No quiero culpar a mi padre, lo entiendo. Quiero decir, es normal que no quisiera que estuviera cerca de mí. Corría peligro de ser infectado, o algo peor, innecesariamente.

-Detente. No digas eso. Él es tu hermano. Tienes todo el derecho de conocerlo.

Remus se dejó caer en la cama, cubriéndose la cara con ambas manos.

La situación era tan extraña. Hermione no concebía que el padre de Remus le hubiera ocultado a su hermano durante tanto tiempo, y que ahora, como si nada, le enviara una carta para que se encontraran. No sabía qué pensar al respecto, ella realmente no conocía la historia completa como para saber si Lyall Lupin era así de desalmado y cruel. No podía sacar conclusiones cuando no conocía los hechos, pero tampoco podía exigirle a Remus que le contara nada.

-¿Vas a pensarlo?

-Sí.

-¿Vas a responderle?

-Cuando esté listo. Ahora tengo muchas cosas en la cabeza.

Hermione no quiso ahondar más en el asunto. Las cosas tomarían su curso natural, ya fuera para bien o para mal, pero a fin de cuentas lo harían. No quería estresarlo ni perturbarlo con el montón de preguntas que tenía circulando por su cabeza. Si él deseaba contarle, en algún momento lo haría sin que ella se lo pidiera.

-¿Cómo sigues?

-Estoy bien. Mucho mejor de lo que estoy en estos casos normalmente.

-Te traje la cena.