❥Capítulo 8

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•Narra Mario•

—¿Bautista? ¿Porqué diablos estás fumando?-. Esa voz me saco de mis pensamientos.

—¿Vives aquí?-. Me asombré al ver a _____.

Tiré el cigarrillo, y lo pisé para apagarlo, después empecé a caminar hacia ella.

—Sí, vivo al lado de tu casa. Ahora tú respóndeme.- dijo sonriente.

—¿Qué quieres saber?-. Le pregunté mientras admiraba su rostro.

—Quiero saber ¿por qué fumas?-. Ella parecía estar molesta.

—De esa forma intento olvidar mis problemas.- me encogí de hombros.

—Y en el tiempo que haz fumado... ¿Haz logrado olvidar tus problemas?-. Me observo detenidamente.

Ella tenía razón, no había olvidado ninguno, solo lo hacia por unos cuantos segundos. Negué con la cabeza lentamente.

—¿Sabes que es lo único que estás logrando?-. Me pregunto seria.

—No...- quería preguntarle que si que era, pero un nudo en mi garganta se formó.

—Estas auto- dañándote, auto- destruyendote Mario, es lo único.- trataba de hacerme recapacitar.

—Sinceramente no me gusta fumar, pero una vez logré olvidar mis problemas por un momento, entonces pensé que si lo seguía haciendo lograría olvidar todo de una vez.- le dije sin ocultarle nada.

—Todos tenemos problemas Mario, y yo no fumo para olvidarlos.- se cruzó de brazos.

—Seguro tus problemas no son tan graves como los míos.- negué con la cabeza.

—Podría apostarte que mis problemas son el doble de graves que los tuyos.- dijo pero no le puse tanta atención por admirarla a ella. Se miraba hermosa.

—Está bien, cada quien tiene su intensidad en los problemas. Dejaré de fumar, en mi conciencia está que los cigarrillos no me llevarán a nada bueno.- le dije sincero.

—Gracias, platicamos más tarde. Cuando llegue ¿te parece?-. Me sonrío.

—Me encanta la idea.- le dije feliz.

Ella se despidió de mi con un beso en la mejilla y se subió a su coche.

Cuando vi su auto retirarse camine hacia adentro de la casa, subí hasta mi habitación y me di una ducha rápida. Me puse un pantalón de mezclilla y una camisa blanca con una gorra color guinda.

Cuando termine, pase mi mano por mi cabello para hacer un intento de peinado y baje hasta la sala para esperar a que llegara _____.

Decidí ver la televisión un gran rato hasta que tocaron la puerta. Me levanté y fui a abrir la puerta. Era _____ muy sonriente.

—¿Quieres platicar aquí adentro o afuera?

—Me parece bien afuera.- me sonrío.

Salí de la casa y cerré la puerta detrás de mi. Nos sentamos afuera de nuestras casas y ella se animó a iniciar la conversación.

✧Amigos de la infancia; m.b.✧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora