❥Capítulo 29

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•Narra _____•

Cuando Mario se fue, cerré rápido la puerta y me giré hacia mi mamá con una gran sonrisa.

—¿Qué pasa?-. Preguntó asustada.

Seguí sonriéndole sin decirle nada.

—Me estás asustando hija.- abrió sus ojos muy grandes.

—No es nada mamá.- intenté mentirle.

—Claro que sí. ¿Qué pasó con Mario eh?-. Me preguntó picara.

—¿Me das permiso de ir mañana con Nirvana a comprar ropa?-. Le cambié el tema.

—¿Ropa para ti? ¿O para ella?-. Me preguntó confundida.

—Para mi, se dio cuenta que Cassy me empezó a copear mis vestidos y quiere que ahora use jeans para ver si me sigue copeando.- le dije y empecé a caminar en dirección hacia las escaleras.

—¡_____!-. Alzó la voz.

—¿Si?-. Le pregunté sonriendo.

Sabía perfectamente lo que ella me iba a decir.

—Regresa aquí y cuéntame qué pasó con Mario.

Me giré lentamente para tenerla de frente y ella tenía sus ojos entrecerrados.

—Fácil.- me encogí de hombros.- Fuimos a cenar, me divertí muchísimo.- le sonreí.

—Eso ya lo sabía.- rodó los ojos.- ¿Hubo algún beso?-. Sonrío ampliamente.

En cuanto mi mamá lo mencionó recordé como había pasado todo y mordí mi labio inferior. No tuve el valor de responderle con palabras así que solo asentí con la cabeza.

—¡Hay Dios mío! Me va a dar algo.- dijo graciosa.

Me carcajeé y subí las escaleras rápidamente. Me metí en mi habitación y busque mi pijama en mi guardarropa para darme una ducha.

Al terminar de bañarme y arreglarme para dormir tomé mi móvil y noté que tenía un mensaje de Saak con las medidas del lugar. Le agradecí y me acosté para dormirme.

A la mañana siguiente me desperté por los rayos del sol. Era el único día de la semana dónde podía despertarme "tarde" aunque realmente hoy si me había despertado tarde.

Salí de mi habitación y baje las escaleras. Fui a la cocina y el desayuno estaba listo. A mí mamá los sábados le daba tiempo de hacer el desayuno, pero aveces no. Y así también era de lunes a viernes.

Decidí desayunar sola ya que Hatziry siempre se despertaba muy tarde, más de lo normal.

Al terminar mi desayuno fui a cambiarme de ropa para estar lista en cuanto Nirvana llegara.

Me puse un vestido un poco holgado para que me fuese más rápido probarme la ropa y no tardarnos tanto. Para ser sincera me parecía un poco extraño comprar ropa en tiendas de la plaza.

De pronto la puerta de mi habitación fue golpeada del otro lado. Rápidamente caminé hasta estar enfrente de ella pensando que Hatziry ocupaba algo. Pero al abrir la puerta me lleve la sorpresa de que era Nirvana.

—¡Hola! ¿Estás lista?-. Me preguntó bastante emocionada.

No tenía la menor idea del por qué le emocionaba tanto comprar ropa para mi. Pero pensé en que debía de agradecérselo.

—Hola. No estoy lista pero...

—Eso no importa.- me tomó de la muñeca.- vámonos.

Me reí y me zafé de su agarre cuidadosamente.

✧Amigos de la infancia; m.b.✧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora