Capítulo 4

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*Narra Ela*

Me habla mi madre desde las escaleras:
- ¿Y a dónde tienes pensado ir? ¿Eh? Si no te sabes valer por ti misma... - me dice con sorna.
- Eso es lo que te crees y gustaría. Me sabré defender yo solita, relájate...
- Pues corre, lárgate.
- ¡SI ME DEJAS LO HARÉ! ¡DÉJAME VIVIR PESADA! — me voy, la dejo con la palabra en la boca.

Salgo del edificio y me meto en las calles de Pontevedra. La odio, no aguanto como me trata esa mala mujer, es odiosa. Aguanté demasiado sus insultos, sus humillaciones y las veces que me pegó. Pero no aguantaré que le haga lo mismo a mi hermana pequeña. Por ella mato. Más le vale no tocarla...

(***)

Después de estar dos horas caminando con las maletas estoy cansada y mi respiración es irregular. Necesito descansar urgentemente, entro a un parque, me distancio de la entrada y me siento junto a un árbol esperando no ser vista.

Cuando ya estoy sentada me apoyo contra el árbol y me dejo llevar por mi frustración y lloro, lloro como hace mucho no lloraba... Como no lloraba desde que se fue mi padre.
Tengo la cabeza apoyada entre las rodillas y las lágrimas brotan sin descanso mientras sollozo sin parar.

- Hey, perdona. ¿Estás bien? - me pregunta una voz que desconozco.

Levanto la cabeza para ver quién me habla y es...

Mi historiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora