Capítulo 36

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*Narra Ela*
Ha pasado una semana desde que hablé con Kevin. En esta semana lo único que hice fue estar en casa, de la cama al sofá y del sofá a la cama... Me siento rota. Sé que puede ser una tontería, casi no nos conocemos. Nos vimos dos días el año pasado y en este... Pues otro tanto... Pero no puedo evitar estar mal. No creía en el amor a primera vista, en esos estúpidos flechazos... Pero algo extraño me pasó con él... Y no entiendo por qué me sucede esto a mí. Mi vida no ha sido un camino de rosas precisamente, palo tras palo mi dura personalidad fue formándose. Sé que puedo ser inaguantable a veces, muy dura y fría... Pero el mundo me ha hecho así. Hace mucho que dejé de confiar en las personas, ya no me fío ni de mi sombra. Y cuando trato de dar mi confianza a alguien estoy alerta las veinticuatro horas del día y a la mínima cosa desconfío. Mi naturaleza es así y no la doy cambiado... Acabaré quedando sola por el resto de mis días, nadie va a lograr aguantarme...

Me meto en la ducha, no tengo fuerzas ni para desvestirme, abro el agua fría y dejo que caiga por encima de mi cabeza mientras yo estoy sentada en el plato de la ducha. Puedo enfermar pero... ¿a quién le importa?

*Narra Kevin*
- Kevin, hey. Te estoy hablando.
- Perdón Haily. Estaba en otra cosa.
- ¿En otra cosa o en otra persona? ¿Vas a seguir negándome que estás así por la llamada del otro día?
- No inventes, ¿sí?
- ¡No invento! Pero es verdad. Desde esa llamada estás serio, no sonríes, no bromeas... No haces nada, solo te quejas.
- Pues ya hago algo.
- Borde. Haz lo que quieras, cuando quieras hablar me avisas y te escucharé - se dispone a salir de la sala.
- ¿Qué quieres que te diga? ¿Que sí es por la chica de la llamada? Pues sí, ¿vale? SÍ.
- ¿Tanto te costaba?
- Vete a la mierda Haily... No estoy para bromas.
- ¡Hey! Tampoco es para tanto. Era una broma. Pero, a ver, explícame. ¿Qué pasó con esa chica?

Suspiro...

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