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—Harry, hay algo que no le he contado —, mencionó Maura.

—¿Y qué es?

—Bueno, Niall no a pasado tanto tiempo conmigo... es decir. Desde pequeño lo metí a un convento por mi situación. Las hermanas del convento lo cuidaban siempre; lo iba a visitar… bueno el punto es que; para sus 12 años no tiene la mentalidad de uno de 12. No es que este enfermo, sólo que se comporta como un niño de 6 o 7 ya se había acostumbrado a la iglesia asé poco que ya no va... bueno como te decía. Hay algunas que otras palabras que no  sabe pronunciar bien. No es como los demás niños. Es diferente —, Maura tomo un respiro y continuó — Él es  muy sentimental y demasiado curioso; todo lo que ve o escucha lo quiere hacer. No conoce el No, para él es si o sí.

—Mmm, esta bien.


Después de que Maura se despidiera de Niall con un fuerte abrazo. Niall quedo solo con ese desconocido de ojos de gato (por el color obviamente)

—Hola mi nomber es Niall y me gusta jugar mucho — saludo el niño.

—Ah si mi nombre es Harry a propósito odio jugar —, respondió Harry.

—Pero... —,sus pequeños ojos comenzaron a cristalizarse.

—Pero ¡Nada!

—¿Y mí Mami?

—Mami se fue para nunca regresar. Te abandonó — respondió Harry cabreado;  no soportaba pensar que iba a cuidar de un niño.

Niall de repente empezó a respirar pesadamente.
— Mami, Mami me abandono. Mami me dejo so-soleto —, pronunciaba entre sollozos.

Harry medito por un momento lo que había dicho «pero que estúpido» pensó.

—No, no, Niall. Mami no te ha dejado solo. Se fue pero vendrá por ti —, le dijo, se sentía culpable por hacer llorar a un niño tan  hermoso. Se sonrojó con sólo pensar que ese niño es realmente hermoso.

—En seriuu —,preguntó Niall limpiando sus lagrimas.

—Si, enserio. Vamos no llores.

Niall limpia sus lágrimas para después hacer un puchero.

—Quiero jugar —, menciona hipando un poco.

Harry rueda los ojos.

—¿A que quieres jugar?

—Mmm a los soldados.

—Y, ¿cómo se juega eso? — pregunta Harry un poco interesado.

—En que tu tendrás, una aldea tuya y, yo una mía y… y tu me disparas y, yo te disparo con la pistola de lo mano, y tu pistola de mano no sirve y yo te gano — explotó el niño con una sonrisa. Harry era lo contrario así que sólo frunció el ceño ¿Cómo que iba a perder imposible?

—¿Por qué yo voy a perder? Yo tengo que ganar.

—No podemos ganal los dos así que voy a ganal yo .

—Se dice jugar. Y quiero ganar yo —. Reprocha  Harry ya que habla en serio a él no le gusta perder.

—No yo —, replica Niall —, y si los dos ganamos. Aún que no sea así .

—Ok los dos gana...

Unos golpes en la puerta impidieron que terminara la frase, con fastidió fue a abrir.

—Louis — dijo sorprendido.

—Hola amor — saludo el ojiazul.

Estaban por besarse, pero el niño los interrumpió.

—¿Quién es él?

—Él es Louis.

—Hola Luoouuuis — pronunció con dificultad.

—No Louis — corrigió Harry.

—Ay déjalo — le reprendió Louis.

El niño sonrió al saber que habían regañado a Harry.

—Niall. Louis y yo vamos a… hablar en el cuarto a solas. Te quedas aquí a jugar si.


—¿Qué van a hacer en el cuarto? — preguntó el pequeño.

«Bueno, pues follar con mi novio duro, rápido y fuerte» pensó el rizado.

—Vamos a hablar de algunas cosas.

Miró a Louis que este le daba una sonrisa de complicidad.

—A si, vamos a hablar —, respondió Louis.

—Yo quiero hablar también.

«Que niño»

—No. Es una platica de Louis y yo. ¿entendido?

—Entendido — responde  un tanto triste.

Lo cual no le importa al rizado.

Toma de la muñeca a Louis para “hablar” en el cuarto.

Cuando ya están en el cuarto. Harry besa a Louis como le gusta, fuerte y apasionadamente. El castaño gime en su boca. Ese gemido causa que el rizado se caliente demás. Cuando esta apuntó de quitar su camisa. Los gritos de Niall lo interrumpen.

—Harry, Harry, Harry, Harry, mi dedito. ¡Harry!

El rizado frunce el ceño ¿Su dedo qué?

—¡Harry, sale sangre! —chilla el menor.

Harry sale del cuarto.
Encuentra a un Niall con las mejillas carmesíes, el cual mira  su dedo en el que se ha hecho una pequeña herida.

El pequeño levanta su carita y se lanza a los brazos del rizado. Harry se sorprende, el pequeño Niall lo esta ¿abrazando?

—Harry —empieza a sollozar —mi de-dedito.

—¡Hey déjame. No me abraces!

—No — responde el pequeño aferrándose más al rizado.

Harry, podría alejarlo sin ningún problema; pero no quiere alejarlo, Harry no quiere que el calor y el olor que emana el pequeño no se lo quite nadie...

Solo un Niño¡- Narry Storan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora