Drabbles [2Jae]

11. (mensajes de texto)

Género: intento de fluff mal hecho

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Ha estado queriendo inducir su cuerpo a la relajación completa para poder dormir un par de horas. A pesar de la clara actividad en el departamento, y del evidente tiempo libre del cual disponen momentáneamente, JaeBum quiere descansar.

Pero no puede.

En algún momento consideró que algo así podría llegar a ocurrir, es más, sería natural. Sin embargo jamás creyó que tan temprano. Algún día abandonarían el departamento, quizá hasta se mudarían a otro sitio o conseguirían vivienda propia; el paso de los años, la madurez propia de la vida, la carrera como grupo... En algún momento ya no serían los siete conviviendo veinticuatro horas del día los siete días de la semana. Algún día vivirían separados.

JaeBum deseó que ese día fuese uno lejano.

Repentinamente su teléfono vibra a un lado de su cama.

De mysoul
Hey!

Sonríe sosteniendo el celular mientras observa la pantalla y una ya conocida sensación se instala en su pecho. Y es que ahora, cualquier mensaje que llegue de YoungJae le hace vibrar su corazón más de lo que debería.

Para: mysoul
¿Qué pasa?

De: mysoul
¿No me saludas? T-T

Ríe. Siempre le ha causado risa las peculiares maneras que tiene el menor para formar emoticones con letras. Su corazón vuelve a vibrar emocionado mientras teclea una respuesta.

Para: mysoul
Buenas tardes, YoungJae. ¿Cómo has estado?

De: mysoul
Tan diplomático mi hyung (~*o*)~

Golpea su cabeza con la almohada porque no puede evitar reír y moverse por la cama imaginando la real expresión detrás de la pantalla del otro lado.

Dios, lo extraña tanto.

De: mysoul
¿Qué están haciendo? :) ¿Aprovechan el día libre? :'D

Para: mysoul
No lo sé realmente, pero hacen mucho ruido, no me dejan dormir

De: mysoul
¿Ibas a dormir? ¿Te molesté? :"c

Prontamente lee el mensaje, JaeBum recuerda con claridad una de las tantas veces que compartieron la misma cama mientras aun YoungJae vivía con ellos.
Aquél día había sido demasiado pesado, con decir que arribaron a sus habitaciones cerca de las tres de la mañana uno ya puede imaginarse lo terrible que fue. Se había acostado en cuanto sus pies pisaron la habitación sin importarle nadie más. Recuerda haber escuchado la ducha del baño correr antes de quedarse dormido. Fueron minutos de sueño placentero los que tuvo hasta que una fuerte sacudida lo despertó, arrugando la frente por la interrupción.

—Hyung ¡no hay agua caliente!
—Shh —le había callado, haciendo más ruido que el mismo YoungJae—. Pues duérmete así, no es hora para andar pidiendo arreglo del baño.
—Pero hyung... hace frío y quiero ducharme antes de dormir.

Estaba claro que el menor no tenía ánimos de callarse y tampoco de querer dormir, por lo que las palabras no serían suficientes. Con mucha precisión y fuerza, JaeBum le agarró en medio de la oscuridad los brazos y lo arrojó sobre su cama pasando luego sus mantas por encima.

—Pero-
—¿Vas a seguir quejandote, Choi YoungJae? —un murmullo incomprensible se había escapado de los labios rosados del menor, los cuales hacían juego con su rostro. JaeBum no le había dado importancia al irreconocible sonido—. Duerme.

Lo sujeto fuerte de la cintura y permaneció así hasta que volvió a quedarse dormido.

De haber sabido que sería una de las últimas veces que estarían así antes de que cambiaran de compañero de cuarto, habría disfrutado mucho más ese momento.

Ese y todos los que siguieron luego de que ellos dos se confesaran lo que sentían.

Un largo suspiro se escapa desde su boca y golpea en sus manos que aun sostienen el teléfono. Están frías.

De: mysoul
Te has dormido, hyung ^^~

Para: mysoul
Te extraño mucho Jae. Extraño que duermas conmigo.

Se da cuenta segundos después de enviar el mensaje que no quiere arruinar el brillante humor que trae YoungJae en sus mensajes, así que decide cortar la pizca de nostalgia con un emoticón poco acostumbrado por él.

Prefiere eso en vez de preocupar a su cálido rayo de sol.

Para: mysoul
<3

Sonríe para sí mismo al ver recreada en su mente la característica risita nerviosa que suele soltar YoungJae cuando se avergüenza, con las mejillas ascendiendo en una mueca de felicidad. Ojalá pudiese fotografiar cada uno de esos instantes en los que sutilmente le besa sobre la sien y se gana a cambio una mirada bañada en ternura, esa que sólo le dedica a él cuando no es capaz de tocar sus labios.

A veces sólo disfruta viéndole.

De: mysoul
¿Has usado un corazón? :0
¡Eso amerita festejo!

Se queda tranquilo sabiendo que YoungJae ha ignorado lo que su mensaje cargaba detrás. No le da tiempo a teclear cuando otro mensaje llega.

De: mysoul
Iré a festejar contigo <3<3 :*
¡Levántate!

Para: mysoul
No digas cosas que-

Las palabras mueren allí cuando otro sonido llega a sus oídos. Pero esta vez no es el bullicio de los demás miembros, ni el vibrar de su celular. Es la puerta de la habitación que se abre y deja pasar la figura de YoungJae hasta que ésta se cierra haciendo click.

El intenso cosquilleo recorre su cuerpo una vez más, hasta que se sienta sin despegar su mirada del nuevo visitante.

—Hey... —le llama YoungJae reprimiendo una sonrisa—. ¿No vas a saludarme?

JaeBum se queda inmóvil. No sabía cuánto podía extrañar a alguien por más que se vieran todos los días.

Hasta ahora.

Sale de su aturdimiento cuando tiene a YoungJae frente suyo levemente inclinado y a centímetros de su rostro, acariciando su nuca con mucha calma. La presión sobre su hombro se incrementa cuando él usa de apoyo su cuerpo para terminar con esa distancia que no hace más que anhelar la próxima vez puedan volver a besarse. Es muy calmo, pausado, dejando suaves espacios entre tacto y tacto, tan abrumador en cierto punto que olvidan dónde están. Es uno de esos besos mágicos que son capaces de transportarte a lugares muy lejanos, a lugares que sin duda alguna te llenan de felicidad.

—No preguntes que hago aquí —se ríe YoungJae separando a penas su boca para poder hablar. La afilada mirada de JaeBum le hace reír aún más: sus ojos se vuelven más pequeños cuando sonríe con ímpetu, y le parece de lo más bonito.
—¿Pasarás el día libre con nosotros?

JaeBum olvida el sueño y deja atrás cualquier rastro de cansancio que haya podido tener. No quiere perder ni por un sólo segundo la posibilidad de tener a YoungJae entre sus brazos, así sea enfrente de sus compañeros.

El menor vuelve a reír, provocando la vibrante sensación alegre en su pecho.

—No —niega. La confusión se instala en el rostro de JaeBum pero se suaviza en cuanto le escucha decir—: pasaré el día libre contigo, hyung.

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N/A: por qué me los separó de casa el destino cruel? xqxqxq
Nótese cómo lo agenda jb cofcof