Treinta y ocho

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Me tropecé con la cama, no sorprendido cuando sentí que el pecho me dolía.

Era medianoche y me desperté tosiendo. Recuerdo que me dormí a las tres de la tarde. Se suponía que era una "siesta", pero supongo que no lo fue. Suspirando, me senté en la cama. Probablemente Misty estaba en su propia cama. Miro en esa dirección y frunzo el ceño. Ella no estaba allí.

"¿Misty?" Grito, saltando de la cama.

Miré en todas partes para encontrar a Misty.

Pero ella no estaba dentro de la casa.

Registré el patio trasero y el frente de la casa, pero ella tampoco estaba allí.

De repente, sonó el timbre de mi puerta. Caminé hacia ella y la abrí lentamente. "¿Es este tu gato?" El hombre gruñó. Asentí, tomándola. "Tienes suerte de que la haya visto, iba a ser atropellada por mi camión."

Mis labios se separaron y miré a Misty, quien mostraba miedo.

"Gracias."

Inclinó el sombrero y se alejó. Cerré la puerta y miré a Misty antes de apretar un beso en su frente. "No vuelvas a hacer eso." La regañé.

¿Era malo desear que fuera Willow quien me devolviera a Misty?

Porque eso es lo que quería.

Quería que Willow me regañara por dejar abierta la puerta de mi habitación. Juro que esta chica me estaba volviendo loco.

~*~

Por el rabillo del ojo, veo a la madre y al padre de Willow poniendo bolsas en su carro. Willow salió y saludó a sus padres, abrazándolos. Comparten una breve conversación antes de que sus padres entren al coche y se alejaran. Saqué las luces de Navidad del arbusto y luego regresé a mi casa. Dejé la puerta abierta porque tenía que volver a sacar las luces del otro arbusto.

Me preguntaba si los padres de Willow se habían ido por un tiempo.

Eso significaba que finalmente podría hablar con ella sin ninguna interrupción.

Si ella quería hablar.

¡No hemos hablado por un mes! Duele.

Regreso a mi casa y suspiro. Mi corazón estaba corriendo, pero traté de calmarme. Lo siguiente que sé, es que no podía respirar en lo absoluto.

~*~

El silencioso sonido de los pitidos me asustó cuando desperté.

Inmediatamente mis ojos se encontraron con unos azules. Willow.

Traté de sentarme, pero ella sólo me empujó hacia abajo suavemente. "¿Te sientes bien?" Ella preguntó en voz baja, preocupación en su voz. "Sí."

"No mientas." Ella susurró. Me frotó la mejilla con el pulgar. "No." Le digo en voz baja. "Me siento como mierda." Gimo. Ella se sienta en una silla y me toma la mano. El doctor entra y me sonríe. "Harry, ¿cómo te sientes?"

"Con dolor."

"Te conseguiremos analgésicos pronto. Tuviste mucha suerte de ser encontrado antes de que ocurrieran cosas serias." El doctor dice, agarrando una pluma. "Te traeré tus analgésicos y volveré a revisar tus signos vitales."

Le dí un asentimiento y se fue.

Me volteo hacia Willow y le sonrío.

"Me has salvado la vida, gracias." Era un poco cursi, lo admito.

Ella sonrió un poco pero luego frunció el ceño.

"La doctora me dijo que no tomaste tus medicamentos, ¿por qué?"

"Yo... lo olvidé." Tartamudeé, alejándola. "¿Lo olvidaste?!" Ella exclamó. "Harry, ¿cómo puedes ser tan descuidado?" Ella gimió, levantándose y dando vueltas en la habitación. "¿Tienes idea de lo preocupada que estaba cuando te ví sin vida en el suelo?" Su voz se quebró. Mis labios se separaron mientras ella se acercaba a mí. "Me asustaste mucho." Suspiro. Me siento y agarro su mano. "Estoy bien, comoquiera."

"¿Y si no te hubiera visto?" Ella pregunta, principalmente para sí misma. Antes de que yo lo supiera, ella me abraza.

Y por primera vez en semanas, sentí que la chispa se encendía de nuevo.

~*~

Fue embarazoso cuando salí del hospital dos días después.

Tenía que llevar un inhalador para todos lados.

Willow y yo nos sentamos en el taxi, a unas pulgadas de distancia. Ella estaba de un lado, acurrucada junto a la ventana y yo estaba en el otro, mirando mis zapatos.

Tan pronto como mi casa llegó a mi vista fruncí el ceño.

Salgo del taxi y Willow pagó. Tuve que hacer una nota mental para pagarle de vuelta. Camino hacia mi casa y ella agita la mano antes de voltearse para caminar hacia su propia casa. ¡No podía hacer eso! Después de ser tan amable conmigo y de demostrarme que me cuidó, ella no puede alejarse ahora. La agarro de la mano y la empujo hacia mí. Sus ojos se encontraron con los míos y ella buscó... algo.

"Quédate."

Su boca se abrió y me dió una leve sonrisa antes de sacudir la cabeza.

"No puedo."

Cold || hs [español] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora