Lucille | 𝗡𝗲𝗴𝗮𝗻

6. "Infidelidad"

Al llegar al Santuario lo primero que hizo Lucille fue ir a "su" habitación y Negan fue detrás  siguiéndola disimuladamente.

La encontró sentada en la cama, parecía pensativa, se acercó a ella y se sentó a su lado.

—No estoy de humor —le advirtió la mujer.

—Creo que estoy progresando, antes directamente mataría al grupo entero —le comentó en un intento de broma.

—Olvídalo, Negan.

El hombre soltó un suspiro y tomó su mano.

—¿Dejarás de ignorarme? Digo, ni siquiera puedo darte un miserable beso, eres mi esposa Lucille.

—Tendré mis razones para no hacerlo. —Ella intentó esquivarlo pero rápidamente él atrapó su rostro entre sus manos.

—Lucille...

Ella frunció el ceño, pero sintió un sentimiento de culpa al ver el rostro de su esposo.
Tal vez estaba siendo demasiado dura con él.

—Lo siento... buenas noches —murmuró Negan.

La soltó y antes de que ella pudiera reaccionar, él besó su mejilla haciendo que una corriente eléctrica pase por todo el cuerpo de la mujer. El líder se marchó y al cerrar la puerta una pequeña sonrisa apareció en los labios de Lucille.

[...]

Al día siguiente lo primero que hizo Lucille fue pasear por los pasillos e investigar un poco, por simple curiosidad. Iba abriendo puertas pero resultaban ser de habitaciones de algún Salvador o simplemente estaba vacía.

En eso abrió una en especial y se encontró con un grupo de mujeres vestidas de negro que Lucille jamás vio. Parecía, más bien, que iban a un funeral.

—Hola... ¿quiénes son ustedes? —preguntó ella.

—Somos las esposas de Negan —contestó una.

—¿Las qué...?

●●●

Mientras tanto, con el líder de los Salvadores, estaba paseando por los pasillos mientras jugaba con su bate. Se sentía raro ahora que sabía que su esposa estaba viva ¿debería dejarlo? Lo hizo en honor a ella.

Al doblar una esquina vio a Lucille, se acercó a ella con una sonrisa pero esta se borró al ver como veía a sus esposas. Lo había olvidado por completo.

—No perdías el tiempo, eh.

Sus esposas al verlo se acomodaron en sus lugares y se arreglaron un poco para él.

—Lucille escúchame...

La susodicha sin decir nada se fue de ahí, dejando a Negan con la palabra en la boca.

Ella sabía que no eran celos, jamás fue celosa con él y menos ahora. Pero debía admitir que al ver a todas esas mujeres tan jóvenes y lindas realmente le molestó.
No podía reclamarle por haber seguido su vida, estaba en su derecho creer que estaba muerta y superarla.

Pero, aún así no podía evitarlo.
De la frustración y rabia que sentía pateó la pared pero inmediatamente se arrepintió al sentir dolor en su pie derecho. Maldiciendo varias veces se dejó caer al suelo, no tenía idea de que hacer ahora, quería estar con su grupo y a la vez con Negan. Su mente era todo un lío ahora mismo.

Unos pasos acercándose se escucharon haciendo que ella se ponga de pie, Negan aparece y rápidamente la sujeta de los brazos antes de que siga caminando.

—Cariño escúchame, ellas no son nada para mi —dijo acariciándole ambas mejillas pero ella no decía nada.

Aún así disfrutó su muestra de cariño, algo que muy en el fondo, extrañaba.
Sin embargo eso no impedía que se borraran sus recuerdos.