Narra Aiden
-Mierda, mierda, mierda.- comencé a caminar en circulos por el pequeño espacio que había en el ascensor.
-Me estas poniendo nervioso, así que por favor, deja de hacer eso.- pidió Blade.
-No puedo, soy claustrofobica, no puedo estar en un sitio asi de cerrado y ademas a oscuras.- le respondi.
-Genial, estoy en un ascensor con una claustrofobica.- se quejó.
-Si, y yo estoy aqui contigo, asi que no te quejes.- dije un poco ofendida.
Blade suspiró como si le hubiera dolido aquello y se deslizo por una de las paredes hasta caer sentado al piso.
-Maldito Zack, no entiende cuando un no es un no.- maldijo en susurro mirando el suelo.
Me sente a su lado y lo observe detenidamente. Algo le pasaba, estaba cabizbajo, suspiraba con pesadez, ese no era el alegre Blade que yo conocia.
-¿Todo en orden?- pregunté.
-Cody no fue a buscar un bolso en su auto.- dijo sin dejar de mirar sus manos.
-¿Y que con eso?- pregunté aun mas confundida.
-Estoy seguro de que Zack tambien esta en esto...- susurró.
-¿En que? Blade, si no me dices no puedo entender que pasa.
-Esta bien.- Suspiró y al instante le llegó un mensaje, alcance a leer "No saldrán hasta que le digas. Z&C"- malditos hijos de...
-¿Que tienes que decirme?- pregunté y el rapidamente se dio vuelta al notar que había leido el mensaje.
-Bien, te lo diré.- tomó aire.- soy gay.
-¿Que..?- algo dentro de mi tenia ganas de gritar y llorar en el suelo.
¿Era gay? Genial, si antes no me iba a hacer caso ahora menos.
-¿Hablas en serio?- pregunté.
-Oye, ¿Que tiene de malo?- preguntó.
-Nada, solo que...
-No soy gay, Aiden, solo quería decir eso para que lo que te voy a decir ahora no sea tan impactante.- me tranquilizó.
Maldito hijo de perra, deja de jugar con mis sentimientos.
-Ok... no se como pasó, asi que no preguntes, pero... Aiden Wesley, tu me gustas.- dijo y al instante cerró los ojos como si fuera a golpearlo.
-¿C-como dices que dijiste?- comence a tartamudear.
-Lo que escuchaste.
-No es otro de tus juegos ¿O si?- cuestioné nerviosa.
-No lo es. En serio Aiden, tu me gustas.
Cada vez que lo repetía mi corazon daba tres saltos.
Yo no sabía exactamente que sentía por el, pero lo quería, eso estaba demostrado por cientificos.
-Y no importa si no sientes lo mismo, puedo vivir con ello.- anticipo al ver que yo no decía nada.
-¿Que..? ¡No! Oye yo te quiero idiota. sólo necesito aclarar mi mente y, además, esto no va a modificar nuestra relación.
Narra Zack
Besar Cody era la cosa mas linda que me pudo pasar.
Durante la cena no nos soltamos las manos. Verla sonreír era hermoso.
No hablamos del beso en ningún momento, no estaba seguro de lo que ella sentía por mi, pero yo si estaba seguro de que la quería.
Ya estábamos llegando al hotel y se veían las luces prendidas. Así que supongo que ya esta funcionando todo, incluso el ascensor.
Cuando estábamos en la puerta giré a Cody una última vez y la besé. Abrió la boca para decir algo pero no la deje, solo entré sin darle tiempo de hacer nada.
Ya adentro subimos y cada uno fue para su cuarto. Ella con Aiden y yo con Blade.
Al entrar él estaba despierto sentado en la punta de una de las camas. El sonido de la puerta lo alerto y levantó la cabeza.
Con la mirada que me lanzo hubiese preferido dormir en otro lado.
-Hola amigo.- me senté en la otra cama.
-Te odio ¡¿Por que no dejaste las cosas como estaban?! Yo podía superarlo y seguir adelante, ahora en lugar de subir un escalón baje dos.- gritó desesperado.- Yo no quería ayuda, solo quería dejar las cosas como estaban.
-Pero pero... ¿Que pasó? ¿Te rechazo?- le pregunté.- Solo quería ayudar.
-¡No necesitaba ayuda!- gritó de vuelta y salió dramáticamente de la habitación.
Mierda. Esto no tenía que pasar. Ellos debían corresponderse, casarse, tener muchos hijos y... Me estoy juntando mucho con Cody.
Salí de la habitación intentando seguir sus pasos, pero no había rastros de el. Supongo que necesitara estar solo.
Narra Blade
Estaba furioso, me hervía la sangre. Zack no tenía por qué meterse en MIS cosas, yo no necesitaba ayuda y tampoco la había pedido.
Lo mío con Aiden no iba a funcionar, ¿Por que? Porque no siente lo mismo que yo por ella, y yo no quería que ella lo supiese, pero ahora lo sabe. Y ya nada será igual, por más que ella lo niegue, nada volverá a ser como antes.
Sin darme cuenta estaba caminando por una especie de plaza del pequeño pueblo en el que estábamos. Había un par de niños jugando y corriendo por ahí, yo me senté sólo en una banca a pensar. Necesitaba tomar aire, estaba muy alterado luego de mi pelea con Zack.
-¿Todo en orden?- preguntó una desconocida y suave voz a mis espaldas.
-Ya quisiera.- respondí sin mirar al dueño de aquella voz.
-Se nota desde metros, ¿Quieres hablar?- preguntó sentándose a mi lado en la banca.
-Es un tema muy denso.- respondí volteando por primera vez a mirarla.
Era una chica de tes bronceada, cabellos ondulado y castaño, lindas pecas y ojos esmeralda. Era bastante guapa.
-Bueno, tengo todo el día.- dijo subiendo y bajando sus hombros.
-Es por una chica.- suspiré.
-¿Tu novia terminó contigo?- supuso antes de que hablara.
-No, no tengo novia.- reí.- es una amiga... ella me gusta, y por culpa de mi mejor amigo tuve que decírselo...
-¿Te rechazó?- interrumpió.
-No, no lo se, dijo que necesitaba tiempo para saber que sentía.- respondí.- pero todo estaba mejor cuando ella no lo sabía, o al menos para mí.
-¿Por que dices eso? Tal vez te estas perdiendo muchas oportunidades con ella solo por tener miedo.- dijo ladeando un poco su cabeza y frunciendo el ceño.
-No quiero que nuestra amistad se arruine por esto... por mas que ella me halla dicho que eso no va a pasar, se que no será lo mismo, para mi no lo será.- dije agarrando mi cabeza.
-Hey, tu amigo solo quería ayudarte, no lo hizo con mala intención, además si no te arriesgas no ganas. Si esa chica te rechaza es una estupida- reí levemente, si Aiden la hubiera escuchado estoy seguro de que aquí se desataba la tercera guerra mundial.- yo no se ni tu nombre, pero estoy segura de que las cosas mejoraran, chico del parque.
-Soy Blade Johnson.- me presenté.
-Beth Lightwood.- sonrió.
Pasamos horas y horas hablando de miles de cosas, Beth era realmente interesante y divertida, me hizo olvidarme de todo lo que tenía en la cabeza durante casi cinco horas. El tiempo con ella pasaba rápido, y solo en esas pocas horas ya le había agarrado cariño.
Ahora estábamos caminando al hotel, resulta que ella también estaba hospedada allí hace tres días y luego debía volver a su hogar, el cual queda muy cerca de nuestro internado.
Todo iba excelente, hasta que crucé el umbral de la entrada principal y la mirada de Aiden cayó sobre mí. Pero no le dí mucha importancia, yo estaba ocupado abrazando a Beth por el cuello.

ESTÁS LEYENDO
Chicas vs Chicos
Fiksi PenggemarCuatro chicos cruzan caminos al entrar en un internado para niños problematicos. Al principio, las cosas no van muy bien, hasta que comienzan a encontrarse sentimientos de por medio. Aiden y Cody, dos chicas que se hicieron buenas amigas al comparti...