Mi molesto compañero ~Jikook~

Parte 23 (FINAL)

Pov Jimin

Claro, aquí tienes el texto corregido:

No dormí en toda la noche porque no he parado de pensar en Jungkook, en cómo estará y si volverá a confiar en mí. Me salté las clases y ya puedo salir de la escuela para poder ir a verlo. Me di una ducha rápida y me fui. Tomé un taxi, pero antes de ir donde Jungkook, pedí al taxista parar en un puesto de flores para llevarle. Compré un poco de todo, pero no un ramo muy grande, ya que no se lo dejarían tener. Luego de veinte largos minutos, llegué a la clínica. Pagué al taxista y caminé lo más rápido que pude para llegar adentro de la misma.

Una vez adentro, comencé a correr. Subí las escaleras velozmente y aquí estaba, parado frente a la puerta de Jungkook, con unas flores y unos chocolates que compré esta mañana en el kiosco de la escuela. Abrí la puerta bastante nervioso. Mis manos temblaban y sentía que mi corazón latía exageradamente rápido. Cuando terminé de abrir la puerta, vi a Jungkook correr hacia mí y me abrazó con fuerza. Eso no me lo esperaba. ¿Los médicos le habrán dicho lo que sucedió?

-Hola, Jiminie, te perdono. -dijo para luego dejar un tierno beso en mis labios.

-Eso no me lo esperaba, Kookie. -dije con una gran sonrisa de alivio en mi rostro.

-Tampoco yo. Los médicos me dijeron que he pasado el brote psicótico, y mañana me podré ir. -dijo entusiasmado con una sonrisa.

-¿Lo dices en serio? -pregunté sorprendido.

-¡Sí!

-No sabes lo feliz que me hace saber eso, Kook.

-¿Qué me has traído?

-Pues te traje flores y tus chocolates favoritos.

-¿Cómo sabes que son mis favoritos?

-Digamos que cuando no te dejaba en paz, siempre miraba lo que hacías, y siempre venías con barras de estos chocolates, así que supuse que eran tus favoritos.

-Aún no me dejas en paz.

-Ya entiendo por qué dicen que estás curado.

Reímos y volvió a abrazarme.

Al día siguiente, Jungkook ya estaba en la escuela. Sus padres lo habían traído, y su hermana ya vino a asegurarse de que esté bien.

-Jimin -me llamó desde su cama.

-¿Sí?

-¿Jugamos a las cartas? -dijo sentándose en frente mío con un mazo de cartas en sus manos.

-Me parece una buena idea. ¿Qué ganamos?

-El que gane será el activo esta noche.

-Me parece una buena idea.

Como no me lo veía venir, Jungkook ganó el partido.

-Ahora te haré mío. -dijo acercándose a mi oreja. -¿Estás listo? -susurró.

Tomé su rostro y junté nuestros labios. El sabor de sus labios era dulce, y un gemido quizás más agudo de lo que esperaba salió de su boca. Su respiración comenzó a acelerarse, al igual que la mía. Los besos bajaron hasta su cuello. Quité su remera, y él hizo lo mismo con la mía. Jungkook acercó su rostro a mi cuello y lo acarició con su nariz.

-Jimin, yo te amo. -dijo gimiendo alto.

-Yo también te amo. -susurré.