Un día Jackson y Mark habían salido de el instituto temprano y aprovechaban cada minuto juntos, ya que, sus horarios estaban muy apretados y podían verse solamente de noche y a lo único que se dedicaban era a dormir juntos. Ambos caminaban hacia la casa de Mark, eran felices.
Una señora de estatura medio baja, cabello moreno, piel blanca, bien maquillada y muy bien vestida se quedo frente a ellos. Mark se quedó en shock y apretó con fuerza la mano de Jackson
—¿Mark?
—¿Qué haces aquí? Se supone que nos veríamos dentro de un mes
—Mark, te extraño, cariño
La mujer se había acercado a ellos, Jackson había puesto a Mark detrás de él a pesar de no saber que estaba pasando no quería que Mark sufriera o tuviera algún daño físico. De lejos la mujer parecía un poco más joven pero de cerca se le podrían calcular unos 45 años, su voz era dulce y cuando vió a Mark lágrimas amenazaban con salir de sus ojos.
—Jackson vámonos...
—Mark, por favor, he hecho todo lo posible para que me perdones y vuelvas a casa conmigo
—Sabes que no puedo hacer eso
—Cariño...él...Él es tu novio?—finalmente fijó la vista en Jackson
—Lo siento, madre pero eso es algo que a ti no te incumbe
—Mucho gusto, soy la madre de Mark —dijo estrechando la mano de Jackson
—Un gusto señora, si le molesta, Mark y yo..ummm...iremos a mi casa...perdón.
—Te amo, Mark
—Adiós, Dorine
Al alejarse lo suficiente de Dorine, Mark soltó un largo suspiro que parecía que había estado aguantando durante mucho rato, bajó su cara y se escucharon sollozos.
—Mark...
—Ella...ella es mi madre, quiere que vuelva a su casa a vivir con ella, sabe que no la odio pero jamás se había atrevido a venir a mi casa y...y...no quería que vieras todo esto...lo siento
—Mark, está bien, sabes que te apoyaré en todo lo posible.
—Me siento mal por ella, realmente quisiera encontrar el valor y las fuerzas para poder irme con ella a su casa otra vez...pero no puedo, Jackson...no puedo
—Sabes qué? Mejor, para que olvides todo esto, vamos a comer helado.
Mark sonrió, Jackson siempre le sacaba una sonrisa.
—Esta bien.
—Peeeeero...sube
Jackson se agachó para que Mark pudiera subir a su espalda y así poder cargarlo todo el camino.
—Estas seguro? —preguntó Mark un poco inseguro
—Más que seguro—rió Jackson
Mark enfrentaría sus problemas luego, ahora disfrutaría de su tiempo con Jackson...
