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A pesar de ser una bonita tarde primaveral, hacía frío en el parque.

Tú me apretabas contra ti mientras me llevabas de la mano.

Aún así, el lago estaba más precioso que nunca, así que nos sentamos en un banco cerca de la orilla.

— ¿Tienes hambre? — me preguntaste. — Puedo ir a por algo de comer a esa cafetería, y podríamos comérnoslo aquí.

— Vale. — asentí.

Tú te marchaste y yo te esperé, perdida en mis pensamientos.

Ni siquiera me di cuenta de que alguien se sentaba junto a mí; pero cuando lo hice ya era demasiado tarde.

Ella me acarició el cabello con su gélida mano, provocándome un escalofrío.

— Buenas tardes, Willow. — dijo Alyssa.

Ella estaba junto a mí. Y no era un sueño.

Y tú estabas demasiado lejos para salvarme.

Intenté gritar, pedir ayuda, pero Alyssa, viendo mis intenciones, puso un dedo índice en mis labios, advirtiéndome.

— No grites, querida. — me dijo. —. Créeme,no te conviene que alguien nos vea juntas.

Yo le miré con rabia.

— Mi hermano vendrá.

— Lo sé, Willow, por eso debo darme prisa. — respondió.

— ¿Qué me vas a hacer?

— ¿Yo? Nada. — soltó una carcajada. — Sólo quiero saber cómo estás, querida.

— Pero en mis sueños, tú...

— ¿Acaso crees que algo que sucedió en un sueño es real? — me cortó. — Oh, Willow, yo nunca te haría daño.

— Pero...

— Olvídate de los sueños. Yo siempre estaré contigo. Lo único que debes hacer es acabar de leer el libro.

— Alyssa...

— Sólo acaba el libro. — dijo, justo antes de desaparecer en el aire.

— ¡Ya estoy aquí! — exclamaste al llegar. — Te he traído patatas fritas. Willow, ¿te pasa algo? Estás pálida.

— Estoy bien, es solo que... me duele un poco la cabeza...

Era cierto en parte, mi cabeza me daba vueltas, haciéndome incapaz de pensar en nada, me encontraba muy mareada.

— Paul. — te llamé, justo antes de caer inconsciente en tus brazos.

El secreto tras la niebla (1) | Ganador #Wattys2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora