Un corazón roto puede curarse con el tiempo, sólo hasta que de nuevo pueda volver a amar. ¿Qué pasa cuando ese corazón se vuelve a enamorar de la persona que lo rompió por completo?
2° Temporada en edición.
Portada hecha por: Lion_blue1
No podía dormir por más que rodará en la cama, me le quede viendo al techo como si el fuera a darme una solución. Me alarme cuando escuche un ruido proveniente del armario. Encendí mi lamparita de noche y me levanté de a cama con precaución.
Esto me recuerda a las típicas películas de terror en las que un fantasma demoníaco se oculta en el armario y justo cuando la protagonista lo abre el fantasma la mata. Sacudí la cabeza apartando esos tontos pensamientos, esas cosas no pasan en la vida real.
¿O sí?
Tomé una de mis zapatillas y caminé hasta el armario a paso lento, trague saliva cuando estuve frente a el. Agarré la perilla y empecé a contar hasta tres para abrirla.
Uno, dos, ¡tres!
Abrí la puerta rápidamente con los ojos cerrados esperando a que el fantasma acabará conmigo. Tras unos segundos sin que pasara nada abrí mis ojos lentamente. Dejé caer mi zapatilla de golpe al ver lo que había ahí dentro.
Era un gatito.
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Estaba acurrucado entre algunas sabanas que guardaba dentro. Lo acaricié despacio provocando que ronroneara, era muy lindo. Busque el reloj de la mesita de noche, eran las 5:00 a.m y aún no tenía sueño.
Cuando regresé la mirada al lugar donde estaba el felino él ya no estaba. Lo busqué por toda la habitación hasta que vi la ventana abierta. Corrí hasta ella y pude ver como el gatito trepaba por las escaleras hasta la azotea. Me puse un suéter rápidamente junto con mis pantunflas, tomé mi celular y salí por la ventana detrás de él.
Los edificios eran de sólo seis pisos, yo vivía en el último así que las escaleras se emergencia eran las únicas que se dirigían a la azotea. Cuando llegué lo busque con la mirada y lo vi comiendo de un tazón. Me acerqué con cuidado y me agache para acariciarlo.
Yo amaba a los gatos pero en casa jamás pude tener uno ya que a papá no le agradan mucho. Al parecer alguien lo alimentaba por que había mucha comida y agua.
-¿Cuál será tu nombre?-le susurré con una sonrisa. Claro, como si fuera a contestarme.
-Su nombre es Molly- dijo una voz a mis espaldas.
-¡Ah!- grité sobresaltada. Me giré para ver a la persona y si que me llevé una gran sorpresa. Era Jessey.
-¿Qué haces aquí tan tarde?- me preguntó con curiosidad. El traía la pijama puesta y una suéter enorme con el gorro puesto.
-Yo...eh...estaba...vine con ella- dije tartamudeando como boba- ¿Tu que haces aquí?- pregunté también.
-Escuché a Molly trepar y vi una sombra por la ventana seguirla- se sentó en el borde de una barda destruida que separaba de los tanques de agua enormes.
-¿Por tu ventana?- me senté a su lado observando a Molly comer plácidamente.
-Si, al parecer también somos vecinos de ventanas- me sonroje y no tenía idea del por que.
-¿Tú la alimentas?- me dio curiosidad preguntarle. Aunque fue extraño por que hacía mucho tiempo que no hablábamos.
-Si, desdé hace unos meses. Ella entró por mi ventana y cuando desperté ella dormía conmigo en mi cama. Por las noches la escuchaba maullar aquí arriba así que subí y le traje comida como siempre a esta hora- metió sus manos en su abrigó mirando a un punto fijo- ¿Cómo la conociste?-.
-La encontré en mi armario y la vida subir hasta aquí así que la seguí para ver si estaba bien- saqué mi teléfono para ver la hora. Las 5:50 y no tenía sueño.
-Que raro- hizo una mueca extrañada- desdé que lo hizo conmigo jamás supe de alguien más- sacó su teléfono también- ¿Estabas despierta?- me sorprendí ante su pregunta.
-Si, no he podido dormir por más que lo intente- suspire metiendo las manos en mi suéter.
-Yo igual- hizo un puchero que significaba que estaba pensando.
-Es por lo de Jack y Alex ¿verdad?, también te sientes culpable como yo- él asintió levemente.
-Es nuestra culpa Juliette, nosotros destruimos todo al paso que íbamos- mi corazón se estrujó. Él tenía razón.
-Es cierto y he estado pensando algo- su mirada se posó en mi causando que un escalofrío me recorriera el cuerpo- Hagamos algo para unirlos de nuevo- el negó rápidamente.
-No lo sé, no creo que eso se pueda-.
-Piensalo un poco solamente, son nuestros mejores amigos y no es justo que sufran por nuestra culpa- intenté convencerlo pero volvió a negar así que rodeé los ojos.
-No es solo por nosotros, también está lo de Allyn y Mike- hice un resoplido.
-Sólo lo de Allyn por que lo de Mike es mentira- me miró confundido.
-Pero ella dijo que...-lo interrumpí.
-No es verdad se lo dijo por que estaba enojada y también quería hacerlo sentir molesto.
-¿Y por qué no le dijo la verdad?- levanté los hombros.
-Eso no lo sé- fue todo lo que dije- ¿Por qué te gusta estar aquí?- mi pregunta lo tomó por sorpresa.
-Mira hacía allá- me señaló a donde el veía. El amanecer estaba comenzando a hacerse presente, y puedo decir que era lo más hermoso que había visto hasta hoy.
-¿Sabes que lo haría mejor?- le dije con una sonrisa en el rostro sin apartar la mirada de esa belleza.
-¿Qué?- saqué de mi bolsillo mi celular y mis auriculares. Se los puse y puse mi canción favorita, le pasé uno de los auriculares y el otro me lo puse yo reproduciendo Somebody else a todo volumen.
I don'twantyour body but i hatetothinkaboutyouwithsomebodyelse.
Esa era mi canción favorita desdé que Jessey se fue, la letra describe perfectamente lo que yo siento y espero que él no lo note. Por que así era, él no estaba conmigo y lo aceptaba pero imaginarlo con alguien más me mataba por dentro. Si algo podía admitir era que tenerlo a mi lado escuchando mi canción favorita me hacía volver a estar feliz.
Atesoraré este momento como si fuera una fotografía.
