Capítulo 26

1.8K 198 79
                                    

 ***Elsa***

Caminaba a casa de brazos cruzados, el sol pegaba sus rayos con más intensidad. Tenía ganas de ver a Merida, saber que está bien y si era de lo contrario quería ayudar, pero con Hiccup molesto y atendiendo a Mer no tendría ni tiempo de hacer un gesto de ayuda.

¿Qué pienso hacer ahora?

Vuelvo con Jack, hablar con él y demostrarles a Hiccup y a Tadashi que puede que no sea el mismo, pero que no volverá a cometer ningún crimen.

Camino en dirección a la parada del autobús, con 5 minutos después pago uno con el cambio de mis hamburguesas y tomo asiento tranquila en espera a la llegada a la orilla de la ciudad.

Después de 10 minutos consigo bajar en la parada, miro a los lejos el comienzo del bosque y empiezo a andar, pero antes me fijo a mi derecha y es el mismo camino de roca que llega a Guardianes.

Todo este tiempo Jack estuvo demasiado cerca de nosotros.

Voy a continuar al bosque pero escucho el claxon, me giro y veo a Jackson llegar en una motocicleta distinta a la que tenía. Es más negra y grande. Le veo vestido completamente de negro, pantalones, un suéter y ¿zapatos? No botillas, no tennis......zapatos.

-Hey – Dice con ronca voz - ¿Cómo sigue tu herida?

-Hola, bien, ya mejor – Digo perpleja - ¿No estás molesto?

-¿Por qué lo estaría? – Dice encogido de hombros.

Su mirada es extraña, sonríe más que hace unos días, más que ayer por la noche. Su sonrisa es delgada y no muy llamativa.

-Me fui esta mañana, no te vi y necesitaba una ducha.

-Ah si- Mira hacia los lados – No hay problema, en serio, vamos, sube.

Camino decidida y subo atrás de él aferrándome a su cintura.

-¿A dónde vamos?

-Al muelle.

No me deja preguntar el por qué, simplemente acelera con velocidad. Llegando con sólo unos minutos de camino. Bajamos justo en el camino que lleva al océano.

Me bajo primero y comienzo a andar hacia adelante, la fresca brisa que me traen las olas es delicioso, muy frías para el sol del día.

Escucho el propulsor familiar al de Tadashi al volar, me giro mirando al cielo pero entonces Jackson llega a abrazarme.

Yo le devuelvo el abrazo, si realmente Tadashi está en los cielos cercanos puedo mostrarle el Jackson del que creo.

-¿Vendrías a Guardianes?

-Tranquila – Siento su mano bajar a mis costillas – Ellos vendrán.

A las espaldas de Jack consigo ver la motocicleta negra deshacerse en polvo negro, frunzo el ceño y entonces mi cerebro entiende con rapidez. Voy a empujar al supuesto Jack pero antes siento una fina hoja de metal incrustándose en mi costillas, haciendo escuchar el crujir de mi piel cortada y de mis huesos recibiendo el impacto.

Gruño de dolor.

-¿Sabes? – Dice la voz de Pitch en el cuerpo de Jackson – Lo que delata a las personas son sus ojos, que bueno que Jack y yo compartimos los mismos ojos sombríos.

Siento su palma incrustar con más fondo la daga, en segundos no hay nada ya entre mi piel y su mano, sólo el polvo negro que se inunda a mis adentros.

Me separo unos pasos atrás con debilidad, y ahora no es Jack sino Pitch. Escucho las olas a mis espaldas y Pitch con su mano en mi hombro, me empuja levemente.

-Te visitaré en tus pesadillas Elsa, nos veremos pronto – Sonríe y termina por empujarme con más fuerzas.

Mi cuerpo cae en el agua, consigo quedarme suspendida en el agua, llevo mi brazo derecho a la herida de mis costillas, intento nada hacia la superficie pero es inútil con una sola mano mientras que el ardor del polvo comienza a dormir mi cuerpo.

Las piernas no me responden, mi cuerpo se hace más pesado y mi visión se nubla. Sólo veo la superficie, el sol a lo lejos.

Mi brazo ahora también ya me ha abandonado.

Mi consciencia continua despierta, pero ya no puedo aguantar más la respiración, dejo de hacerlo.

Me permito cerrar los ojos y dejar que el destino haga lo que tenga que hacer conmigo.

No ha pasado más de 15 minutos, cuando por fin siento una presencia pegada a mi cuerpo. Abro ligeramente los ojos y no veo su rostro, pero si su cabellera blanca.

Al salir a superficie de nuevo cierro los ojos, sólo siento la fría brisa pegando contra mi cuerpo empapado.

-Niña, despierta, no cierres los ojos.

La presión de mi pecho es fuerte, con gran potencia, hace liberar el agua que he tragado. Toso pero después comienzo a gritar de dolor con mi herida, me retuerzo en la arena.

-Tranquila, por favor quédate quieta- Veo como Jackson sostiene mi cuerpo contra el suelo para evitar que me mueva – Voy a absorber el polvo negro pero necesito que te quedes quieta.

-Yo.....Tu.... –Pero no puedo terminar, mis palabras se las traga el dolor.

-Vas a estar bien, pero no tenemos tiempo, quédate..... –No termina. Un rayo de luz azul lo golpea justo al pecho, haciéndolo caer a distancia.

-¡Rápido! – Grita una voz masculina.

Veo entonces el rostro de Tadashi llegar a mi visión, parado a mi lado para verme caída y herida. Niega con su cabeza al verme.

-Encárguense de él, yo llevo a la señorita Arendelle – Me toma entre sus brazos pero cuando paso su mano por mi herida grito con potencia. Se sobresalta asustado.

Me fijo en Jackson y está en el suelo, inconsciente después de recibir un rayo más directo a la cabeza. Lo esposan a sus espaldas y lo levantan para llevárselo.

-No.....N-No hay tiem...po... Tad.....

-Silencio, hablaremos después de curarte – Tadashi me lleva en brazos, trato de buscar con la mirada a Jack, pero ya no respondo, el ardor me consume y mis fuerzas se debilitan.

La Caída Del Guardián. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora