07. Un sábado por la noche

925 76 79
                                    


Capítulo sin editar

Capítulo 7. Un sábado por la noche

NARRA SARA

Sábado 30 de septiembre de 2017

Mi vida siempre ha sido aburrida y en ella predomina la mala suerte. Yo sé perfectamente que esto no solo me ocurre a mi y que muchas otras personas en el mundo sienten lo mismo. Sin embargo, aunque hayan personas que sean como yo, también están el otro tipo de personas, aquellas que se parecen más a Laura. Ese tipo de personas viven la vida y toman riesgos que las personas como yo no estamos dispuestos a tomarlos o no somos capaces o valientes como para hacerlo.

Tal vez eso sea lo que más envidio de Laura.

A ella le da igual todo, o al menos eso es lo que siempre quiere aparentar. En ocasiones me encantaría poder ser como ella y ser capaz de afrontar mis miedos.

Esta semana Laura sin ningún miedo a ser rechazada ha estado coqueteándole constantemente a Benjamín, a quién no parecía desagradarle su coqueteo. Yo mientras tanto he estado ahí de sujetavelas o mejor dicho he cumplido la función del aire: estoy ahí presente pero nadie me ve.

Tal vez pueda sonar exagerado pero es totalmente cierto. El otro día en el comedor Laura y yo íbamos hacia la mesa en donde estaban sentados Lucía y sus amigos y justo cuando me fui a sentar al lado de Laura, alguien se sentó en donde estaba a punto de hacerlo yo.

Otro ejemplo fue cuando el martes llegué a segunda hora porque tuve una analítica y el profesor que tocaba a primera ni siquiera me puso una falta. Soy inexistente para cualquier persona, ¡hasta para los profesores!

No sé que hay peor que eso.

Aún así, por patética que suene alguna de mis experiencias, estas anécdotas las escribo en un diario personal para que cuando sea mayor recuerde por todas las vivencias que pasé y los obstáculos a los que me enfrenté.

Una vez que termino de escribir en mi diario que tal ha ido la semana dejo de pensar en esas cosas y enciendo mi ordenador para poner Netflix. Eso es lo único que me anima cuando me siento sola, que suele ser doce de las veinticuatro horas que tiene el día porque las otras doce estoy durmiendo, comiendo o con Laura.

Pongo The Vampire Diaries y comienzo por el primer capítulo de la segunda temporada que es por donde me había quedado ayer. Cualquier persona estaría hoy, sábado, de fiesta por ahí mientras que yo me quedaré viendo una de mis series favoritas.

Maldigo por lo bajo cuando la puerta suena puesto que justo la serie está en una de sus mejores partes. Le diría a mis padres que abrieran ellos pero hoy han decidido ir a cenar con unos viejos compañeros de la universidad de mamá.

Primero miro a ver quién es y cuando veo que se trata de mi mejor amiga abro la puerta. Me sorprendo al ver su atuendo. Ella viene toda maquillada con unos pantalones negros ajustados y un top rosa.

—¿Laura?¿Qué haces tú por aquí?¿Habíamos quedado? Es que no me acuerdo de ello —Las palabras salen disparadas por mi boca.

—¡Nos vamos de fiesta! —exclama abalanzándose sobre mi y abrazándome.

Yo frunzo el ceño y la aparto con suavidad.

Las diferencias entre Sara y LauraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora