21 días para romper un hábito [Jikook/Kookmin] [finalizada]

Día 11

Se había dormido un rato más hasta que una pesadilla hizo que se despertara exaltado y su estómago al instante le había pedido devolver todo lo que el día anterior había comido y casi inconsciente había terminado de vomitar después de 20 minutos sentado en el frío suelo del baño cerca del retrete.

Cansado recostó su cabeza en la pared y cerró sus ojos, tenía que levantarse pero no quería, se sentía tan atareado de forma mental y física que si por el fuera se quedaría en esa posición todo el rato.

Fue un trueno que de su estado medio dormido le despertó de una sola haciendo que saltara del susto en su lugar, segundos después otro volvió a sonar y con temor sintió su cuerpo temblar. Se levantó como pudo y corrió sin fuerzas hacia el sillón, cubriéndose totalmente con la manta.

La lluvia golpeaba fuertemente en la ventana pero dejó de prestarle atención a eso cuando el sonido suave de su móvil comenzó a combinarse con el grave sonido de la lluvia, temeroso miro hacia el final del sillón para ver si no era parte de su imaginación y al verlo brillando lo tomó rápidamente en manos y cubrió sus cabeza de nuevo quedando debajo de la manta.

"Kookie"

— ¿Hola? —

— ¿Estas bien? —

— ¿Que? —

— Está lloviendo muy fuerte ¿estás bien? —

— Si — contesto sin saber muy bien a qué respondía o incluso si mentía o no, solo se había quedado sorprendido —

Le había llamado solo para saber si estaba bien.

— ¿Tienes tus audífonos cerca? —

— Eso creo —

— Póntelos —

No entendía el por qué se había levantado del sillón rápidamente buscando su mochila en el suelo haciéndole caso a Jeon, pero su pensamientos se concentraron otra vez en temor cuando un fuerte trueno retumbó y soltó un grito jalando los audífonos de la mochila y simplemente lanzándose al sillón cubriéndose.

— ¡Ponte los audífonos! —

Con sus ojos cerrados bajo la sábana y manos temblorosas conecto -fallando varias veces- los auriculares con el aparato exactamente cuando un trueno volvió a sonar.

— Odio l-los tr-truenos —

— Lose Minie, cierra tus ojos —

— Mañana tienes que ir a estud- —

— Tu también así que shh, solo ciérralos —

Y fue lo que hizo.

Su voz, tenía tanto de no escucharle así que su piel se había erizado y no había podido evitar relajarse totalmente.

Deseaba tanto abrazarle, rodear sus brazos en el cuello de Jeon y solo acercarse lo suficiente para que su aroma invadiera cada parte de su ser. Deseaba sentir los labios del otro sobre los suyos y su manos danzar en su cadera con leves gemidos y risas de parte de los dos en forma de canción.

Quería pensar que quizás estaban destinados a ser pero no había sido su momento.

Quería creerse eso mientras la voz terminaba las últimas palabras de la canción y su boca era tapada por su mano para evitar que sus sollozos los escuchara Jungkook.

— ¿Jimin? —

Mando todo a la basura cuando colgó la llamada lo más rápido que pudo y lanzó el aparato al sillón para después levantarse y salir del apartamento cerrando como si alguien le persiguiera.

Estando afuera trato de calmar su respiración tan agitada y limpio las lagrimas sin vergüenzas que habían salido de sus rojos ojos.

Había dejado de llover, el techo abierto del apartamento le dejaba ver que tras una desastrosa tormenta el cielo se había librado de las nubes oscuras y había dejado a apreciación el oscuro cielo con unas que otras estrellas.

Se recostó en el muro alzando su cabeza aún sin poder parar las lagrimas y no pudo evitar sonreír con nostalgia.

— Tan tonto soy en pensar que algo que me rompió me va a lograr repararme —

Recién salía de su segunda clase y caminaba hacia la siguiente apenas con energía, ya no había logrado dormir nada y tener que prestar atención a la clase le era un problema.

Sin saber cómo su móvil termino en sus manos antes de entrar al salón.

"Día 11
Vomite con el sueño de verte besando a alguien que no era yo pero después mi corazón pareció regresar nostalgia y tristeza con escuchar tu voz"