Ya era tarde y la cafetería ya casi cerraba pero gracia a que está estaba ubicada al lado de un hospital y frente a un parque, el lugar estaba algo lleno.Su dieta se había ido a la basura por sus increíbles malos días que lo han consumido en todas las formas posibles así que se encontraba comiendo una pequeña bolsa de frutos secos que había comprado para su trabajo tan tarde.
Tras servir unas bebidas se movió al lado de la caja registradora, los últimos minutos solo serían el y Minseok quien solo Dios sabe porque tan noche el joven de mejillas regordetas tenía tanta energía para servir las bebidas. Levantó su mirada para atender a los nuevos clientes encontrándose con una compañera de universidad y a su lado ese maldito pelirrojo que hace meses había tratado de que Jungkook le llevará a la cama.
Soltó un suspiro y sabiendo que con solo verle su paciencia se había acabado pero se decidió a mantener la compostura y se calmo.
— ¡Jimin! Tiempo sin vernos — mencionó la chica a lo que Park le sonrió — ¿que tal has estado? —
— Por ahí, tratando que la universidad no me mate — trato de concentrarse en como había hecho reír a su compañera y no esa sonrisa cínica del engendro a su lado —
— Veo que se aburrieron de ti, Jimin —
Quiso tomar el café helado más cercando y lanzarselo a la cara pero sabiendo que lo que menos tenía que hacer era rebajarse al nivel de el infeliz enfrente de el solo le sonrió.
— No seas así — le reprendió la chica dándole un codazo al pelirrojo —
— No, el tiene razón, se aburrieron de mi — comentó bajándose de hombros — lo bueno es que lo deje ir, no soy mucho de rogar. Mi mamá por lo menos se molestó en enseñarme la diferencia entre las perras baratas que ruegan por amor cuando ni siquiera alguien le quiere dar la hora y yo —
La sonrisa del engendro desapareció y orgulloso de si Jimin levanto sus cejas.
— Aunque luego de irse de su apartamento se quedó conmigo unos día, espero no te moleste —
— Para nada, pensé que lo conocía pero ahora me doy cuenta que lo convenciste muy rápido. ¿Tan urgido estabas para solo abrirle las piernas no más pasara? —
— Hijo de puta —
— No tonto, no soy tu hijo — sentía tanto enojo, quería golpear la cara linda del idiota y dejarlo medio muerto en el pavimento, puro Min Yoongi se sentía — si no vas a pedir nada podrías salirte de la fil-¡mejor! Podrías salirte de el local, caminar a dirección de tu casa y cuando llegues me le mandas saludos a Jungkook, decile que no te de tan duro que te estás quedando sin dignidad —
Recién llegaba a casa pero deseaba dormir como nunca. Lanzó sus zapatos en la sala y terminó cayendo al sofá boca arriba.
Con desconfianza tomo su móvil de su bolsillo, este le había estado estorbando todo el día desde que en camino a la universidad le había venido la idea de borrarle todo su contenido y comenzar de cero pero borrarle todo y conseguir la mayoría de sus contactos e incluso algunas fotos se le haría un dolor de cabeza, por eso en el transcurso de sus pequeños tiempos libres del día había metido en una sola carpeta sus fotos con Jungkook, fotografías de el y vídeos, todo lo que pudiera recordarle a el lo eliminaría.
Era tarde, debería de dormirse si quería despertar mañana a tiempo pero su mirada no se apartaba de esa carpeta que de alguna manera le hacía estorbo así que lo hizo, mantuvo su dedo en la imagen de la carpeta por un tiempo para después apareciera la opción de eliminarla y lo hizo, eliminó las fotografías junto a los vídeos.
Tomó asiento en el sofá y reviso entre sus contactos, eliminó también su numero de telefono.
Deseaba sonreír, que su acción le brindará un poco de confianza en sí o por lo menos una cierta alegría de estar haciendo algo por el, pero no sintió nada más que vacío.
— Claro, ahora sí estoy vacío ¿no? —
"Día 18
Borre nuestras fotos, nuestros vídeos, nuestras conversaciones, borre todo"
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21 días para romper un hábito [Jikook/Kookmin] [finalizada]
Fanfiction- Lo mejor será darnos un tiempo - Había escuchado eso hace ya varios segundos pero no había captado realmente lo que había mencionado Jungkook. Se repitió esas mismas palabras en su cabeza y no pudo evitar sentir un nudo en su garganta. - ¿Por qué...