Roy Mustang.
Narra Edward.
Mis ojos se abrieron de apoco, me senté en la cama y aun lado mio se encontraba la teniente y Al. Este al verme me abrazo.
-¡Nii-san! ¡Estas bien!
-A-Al...-lo abrase un poco.- donde esta...
- Roy esta ocupado con tus papeleos...tranquilo no tardará.
- Me sonroje al escuchar eso de la teniente.- g-gracias...
- Nii-san...estaba muy preocupado, Roy fue a buscarte y pidió algunos camaradas para que ayuden. Gracias por aparecer hermano.
- si...-susurré.-...
- chicos, les dare privacidad iré con Mustang. -la teniente se levanto y salio.-
Me sentía raro, sentia que algo iba mal , no sabia que era pero aun asi me siento mal.
Se escucho la puerta abrirse por lo cual mire rápidamente. Era Roy entrando con dos vasos.
- despiertas chibi.
- ¡R-Roy! -me sorprendió y avergonzado desvíe la mirada.-
- Al, podrías dejarnos hablar un momento.
- por supuesto Coronel. -dijo tímido y salio.-
- Chibi, eres fuerte.
-idiota... -mi voz se quebró.-
Sorpresivamente Roy me abrazo indundado en lágrimas abraze al pelinegro .
- estabas asustado ¿no?, y adivino, fue por mi. Te preocupaste mucho que saliste a buscarme pero te desangraste en el camino pequeño. Por suerte no fue grabe...yo estaba preocupado por ti...
Este sentenimiento cuando me dice cosas asi, sus suaves manos, sus dulces labios que muero por probarlos, solo quiero tenerlo a él solo a él.
- tu estabas por ahí arriesgandote y yo...casi muero de preocupación chibi...tu fuiste mi mayor preoridad.
¿Porqué me matas de esta manera Roy?...¿porque tu?.
- sabes...me gusto lo que me dijiste -acaricio mi cabello.-
Idiota.
Sin pensarlo ni dudarlo, lo abrase rápidamente y lo mire a los ojos, me acerque lo suficiente a sus labios para unirlos a los mios mientras que lentamente su lengua estaba dentro de mi zona bucal e invadía toda esta, ambas lenguas comenzaron una pequeña batalla de lado a lado mientras nuestros labios no se separarían.
Roy, me quema por dentro, cada rose que siento de su parte es como si me quisiera pasar toda mi vida sintiéndolo cerca. Su cuerpo, sus labios, sus ojos, quiero todo de ese hombre, ese hombre fue el que me volvió loco y no pienso dárselo a nadie.
Ok...sueno algo celoso...
Su cálida mano de bajar de mi barbilla, bajo hasta mi pecho donde comenzó a moverme justamente en un pezon, hacia movimientos circulares y claramente un pequeño jadeo salio de mi boca, interrumpiendo aquel beso, el aprovechó mi estado y beso mi cuello. Se separo de este y río mientras bajaba su mano apartándola de mi zona.
- chibi, eres rápido
- tu...
-me interrumpió.- yo solo te toque por accidente, tu mente tal vez te jugo una broma.
- sorprendido y enojado lo mire.- ¡tu me provocas idiota!
- después de escuchar tal declaración que hiciste ayer me sorprende.
Mierda la declaración.
- olvidala -susurré.- tu ya no quieres nada de mi y yo ya no pienso caer bajo tus enredos.
- di que me amas...-sonrió.-
- p-pero...-enojado con algunas lágrimas lo mire.- ¡¿que es lo que me estas haciendo imbécil?!... No permitiré que jueges con mis sentimientos bastardo... Largate. Te odio.
-¿porque debería irme?
- p-porque...me molestas...
- pero si hace unos minutos dijiste que me querías ver
- eso jamas paso.
- suspiro pesadamente y miro el suelo.- tu no quieres que yo me quede pero yo realmente si quiero estar a tu lado Fullmetal. Yo no quiero que me odies porque siento feo que me digas eso -dijo agotado.- yo solo quiero hacer algo digno para que veas que eres muy buen compañero. -me miro.-
- impactado y sin palabras no hize más que mirarlo mientras temblaba, no sabia si era bueno o malo lo que acababa de decir solamente que en cierta parte quede mas enamorado y en otra parte quede sumamente deztrosado pues al decir "compañero" me dolió, yo no le veo como uno. O me gustaría creer eso.
Por favor Roy Mustang ...
Perdoname por hacerme iluciones...
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Di Que Me Amas. (RoyEd)
FanfictionEdward Elrik famoso alquimista estatal conocido por su nombre artístico "El alquimista de Acero", cae bajo los enredos amorosos del " alquimista de fuego"