Di Que Me Amas. (RoyEd)

capítulo 3

Narra Roy.

Estaba apunto de decirle que...yo fui quien le robo un sándwich hace unos dias, Fullmetal puede ser un poco histérico es por eso que estaba tan nervioso.

Un cadete me aviso que un alquimista nacional habia llegado esta tarde, era con él que me debía unas cosas pendientes,camine hacia la puerta principal , al abrirla me tope con una fuerte lluvia que tarde o temprano se convertiría en una tormenta.
Di un gran suspiro, volvi a entrar topandome con el chico de cabellos dorados.

- Ire contigo. Al me contó.

-mire a Al el cual estaba riendo nerviosamente.- jeje

- de acuerdo...iré por el paraguas...-camine, di unos pasos cerca del rubio y senti su fría mano de metal.-

- No te preocupes, yo traigo uno.

-¿hum?

Mire a este chibi y efectivamente tenia un paraguas justo para dos personas, Sonreí y note su leve sonrojo, camino hablando entre dientes, reí en silencio y lo seguí, este se acomodo su rojo abrigo mientras salíamos y bajábamos las escaleras. El camino fue algo eterno, los hermanos platicaban tranquilamente mientras mis nervios aumentaban. Al llegar me pare frente a las ventanillas del tren, el rubio y la armadura estaban a un radio de 7 metros.

- ¿Mustang Roy? -un chico sujeto mi brazo.-

- volteé al sentir el agarré. - ¿Si? ¿Quien...?

-¿como has estado llamas.?

- muy gracioso... ¿Traes el encargó?

-por supuesto...no fue fácil... Asi que necesitó mi recompensa.

-¿cuanto dinero?

- no busco dinero...

-que raro -dije sarcásticamente.-

- vengo por ti, Alquimista de fuego. -sujeto mi camisa.-

- sueltame...se supone que tu tienes pareja.

- te corrijo...se suponía. -acerco su rostro.-

-no alejate...-trate de retroceder.-.

- ¿me regalas uno? -con su dedo índice toco suavemente mis labios.-

-ahg,¿Que?

-ya sabes -acerco su rostro.-

- Estupido...alejate...-gruñi.-

-sera rápido..

Sentí como su aliento calentaba mis labios y su respiración se mezclaba con la mía. A unos centímetros de que me besara mire sorprendido y enojado.

- ¡Estúpido de mierda! -lo pateó,provocando que se alejará.-

- Chibi...

-¡No me digas asi Roy, o también te patearé! -dijo haciendo un puchero.-

-¡Quien es ese niño! -el tipo se levanto.-

- es un perro del ejercito...vámonos Chibi.

Este miraba al tipo con rabia, parecía un pequeño perro tratando de cuidar a su dueño. Senti algo de nervios, Sonreí y revolví sus cabellos,este me miró y repentinamente se sonrojo.

-idiota...-susurro mirando abajo.-

-mh...vámonos. - suspire pesadamente y camine para irnos de ahí.- Enano, tenemos que hablar. En mi oficina.

- ¿¡Ah!? -estaba a punto de golpearme, enojado y fastidiado camino a mi, senti el rose de su puño pero su hermano lo alejo.- ¡sueltame Al!

- Nii-san, relajate.

Después de que en todo el camino el rubio me queria golpear por llamarlo enano, llegamos a la base, fuimos a mi oficina y Al se quedo afuera a esperar a su hermano.

-¿Que quieres Mustang? -cruzo los brazos enojado.-

-suspire y lo abraze.-

El ojidorado estaba sumamente impactado, no se movía, lo apreté un poco. Escuche como trago saliva y sus manos se colocaron delicadamente en mi espalda.

- Gracias -me separe sin soltarlo ni un poco y lo mire directamente a los ojos, este sonrojado hasta las orejas solo se limito a verme volteando el rostro debido a su sonrojo que le provocaba pena.

-alejate...-sujeto mi pecho y me aparto.- no me dañes de esta manera...-susurro.-

-¿Dañarte?

-asintió.- yo ..te...

- Chibi...

- te amo...-susurro muy bajo, mire como sus ojos brotaban lágrimas de sus lagrimales y recorrían toda su mejilla.- tengo...que irme...-corrio a la puerta.-

Trate de detenerlo pero me fue imposible, salio muy rápido, salí para ver su dirección y seguirlo pero ya no estaban los hermanos, suspire pesadamente y volví a entrar, fui a la ventana y mire el gris cielo. Mi cabeza estaba por estallar, tenía muchos problemas enzima y todavía un mocoso viene y me declara sus sentimientos...

Aunque ...

No esta mal.