Luís se fue hacia donde había un teléfono fijo y Matt lo siguió. Luís tomó el teléfono y marcó unos números.
― Hola, ¿señor Díaz?... Necesito su ayuda, soy Luís Ceballos, ¿me recuerda?... Podría ir a la casa de doña Sara Arriagada y decirle que voy a ir a dejar a su sobrino a su casa… Bien, gracias señor Díaz. ― Cortó la llamada― Me dijo que no molestara ― dijo seriamente.
Matt lo miro asustado, no entendía bien qué pasaba
― ¿Qué? ― dijo confundido
Luís se rió
― Es broma, niño, ahora le van a avisar que vamos nosotros
― Gracias, y… me llamo Matt
― Entonces, Matt, ya le van a avisar
― Gracias, Ruíz, por ayudarme
― Luis ― dijo marcando la “i” y alargando al “s”―, creo que Ruíz es un apellido
― Ay ― hizo una pequeña risa― al menos yo intento aprender su nombre ― sonreía
Subieron al auto, no era u auto hermoso, no; sino, para ser sincero, a Matt, le sorprendió que avanzara y que encendiera. No era un auto hermoso (por fuera), pero por dentro, perdía un poco ese aspecto de “auto abandonado”.
Al ver por primera vez el estacionamiento para buscar el auto, notó que se dirigían hacia donde habían tres autos. Dos que estaban juntos y otros dos espacios más abajo, otro. Ese otro, era el auto de Luís Ceballos, pero Matt no lo sospechó, creía que era un auto abandonado, por el oxido y la pintura casi desteñida. Así que cuando pasaron junto a él, Matt siguió caminando hacia uno de los otros dos autos; cualquiera; siguió caminando mientras Luís abría la puerta. Se paró entre los dos autos y miró a Luís. Al notar que Luís se habría subido en ese “auto”, se fue disimuladamente, corriendo, hacia donde estaba Luis. En eso se quedó pensando todo en todo el viaje en el auto, cada vez que lo pensaba, le daba vergüenza, se ruborizaba un poco al pensarlo, quizás Luís se molestaría por ello o se sentía mal, eso era lo que menos quería hacer “enojar a quién te está haciendo un favor por nada”, en eso pensaba. Hasta que Luís rompió el silencio.
― Y… ¿A qué vas a Luz Viva?
― A ver a mi tía Sara, a mis primos y a mi tío
― ¿Y tus padres?
― En casa
― ¿Por qué no vinieron?
― Es que mi tía nos invitó y ellos no podían, pero yo quería, así que me propusieron venir solo
― Y, ¿dejaste a tus amigos y tu novia?
― A mis amigos sí, pero no…, no tengo novia
― Entonces… novio, ¿tienes un novio? ― Matt lo miró sorprendido, y notó cómo se volvía la cara de Luís roja, mientras el momento se volvía más y más incómodo
― Bueno, digo ― siguió para romper la incomodidad ― hoy en día no se sabe, hay que aceptar
― No, no dejé un novio― dijo mirando a Luís de nuevo, ya que en el silencio había apartado la vista.
Pasaron de treinta a sesenta minutos viajando. Casi matan a un conejo, casi chocan a tres vacas y burro, pero… nada fuera de lo común.
En el camino hablaron sobre las historias de las animitas del camino. No era un tema muy cómodo para hablar a esa hora, anocheciendo; pero a ninguno pareció molestarle, saber sobre Andrea, que desapareció en la carretera, pero ahí encontraron su sangre; sobre Guillermo y Paulina, que aparentemente desaparecieron y encontraron sus cuerpos a tres metros del bosque, una joven pareja. Nada parecía incomodarles en ese tema, solo porque no quería volver al anterior.
Hasta que llegaron a su destino, a Luz Viva. Iban a la casa de la tía Sara cuando de repente, Luís tímidamente habló cambiando el tema
― Eh… Matías… ¿Te molestó mucho mi pregunta del novio?
― No tranquilo, ―dijo extrañado― no sé por qué me molestaría
― Gracias a Dios, pensé que te habías enojado
― No, no me enojo por esas cosas ― dijo sobándole un momento el brazo. ― Lo que sí te voy a criticar es que me dijiste Matías
― ¿No era así?
― No, es Matt ― dijo pronunciando lentamente
― Perdón, pero es un nombre raro, jamás lo había oído
― Lo sé
― ¿Por qué te llamas así?
― Me dicen Matt, pero me llamo Martino
― Eso parece más un nombre, pero… eres la primera persona que conozco que se llama así, conocía Martina y Martín, pero no Martino
― Es que Martino Irarrázaval y Simonni Pettit, iban a ser mis padrinos, y cuando me faltaba poco por nacer, ellos iban a venir a Chile a conocerme, pero, en el viaje desde algún lugar de Europa, tuvieron un accidente y fallecieron ambos, por eso, me pusieron sus nombres en honor a ellos
― Entonces, ¿te llamas Martino Simonni?
― Simón― dijo Martino mientras Luís paraba el auto. ― Pero por favor, dime Matt
― Bueno, niño
![](https://img.wattpad.com/cover/14039849-288-k116624.jpg)
ESTÁS LEYENDO
El bosque prohibido
Ficção AdolescenteMartino (Matt) Arriagada es hijo de un hombre que nació en Luz Viva, un pequeño pueblo junto a un extraño bosque. Un día la tía de Matt lo invita a pasar una temporada. Como ni su padre ni su madrastra quisieron ir a Luz Viva, Matt se fue solo hacia...