¿QUE PASARIA SI...?

CAPITULO 23: VIDA NO ES ABURRIDA

Realmente en la vida no hay un solo momento que la haga a esta aburrida. Es más, si cada quien escribiera su vida con lujo de detalle y luego la leyera sería lo más divertido que hagan leído. Porque al final de cuenta el mundo nunca se está quieto, gira e interactúa a nuestro alrededor. A lo mejor nosotros no tenemos nada planeado pero alguien más si lo tendrá y nosotros nos enteraríamos ya cuando lo interesante esté ocurriendo.

Ejemplo de lo anterior es que Sakura no tenía planeado encontrarse aquella tarde con Uchiha Itachi, pero el sí. Ni estos dos anteriores hubieran planificado encontrarse con Uchiha Sasuke, pero el azabache ya lo había predestinado. Y no porque fuera un genio - aunque sí lo era - solamente tenía que escuchar a sus miedos para saberlo.

Otro ejemplo que hace a la vida entretenida, es cuando n que uno planea no sale como tal. Eso le paso a nuestro querido Uchiha menor. ¿Qué planeaba? Algo de lo que su loca mente le había convencido: disculparse con Sakura. Porque sus propósitos trataban de alejarla de su hermano mayor y de todo aquello que le hiciera recordar algo, solo por la seguridad de su compañera de equipo y la de su hermano. Pero eso no le daba el derecho de tratarla como la había tratado y aceptaba totalmente que se había comportado como un idiota.

Se hubiera desahogado, le hubiera contado toda la verdad, solo si la hubiera encontrado en la habitación al lado de las gemelas. Pero él hubiera es algo tan lejano...

Lo único que se le ocurrió al ver la bola de chackra en la habitación usurpando el lugar de Sakura, es que la pelirosa había recuperado todos sus recuerdos. Ninguna ex ninja, como le conto que era, habría podido hacer eso que requería un enorme control sobre el chackra y vaya que la antigua Sakura lo tenía.

Por primera vez, después de un mes le hablo a Karin solo para que cuidara a las niñas si despertaban. Al principio la Uzumaki se había alegrado al saberse necesitada, pero luego al ver los ojos vacíos de Sasuke un ligero temblor recorrió su cuerpo.

-Karin, rastrea el chackra de Sakura - Hubiera ignorado la situación al no ser por la voz tenebrosa de Sasuke. Por reflejo dio un ligero brinco y se dispuso a buscar.

-N-no lo encuentro.

Como respuesta recibió un gruñido de frustración que retumbo en toda la habitación al igual que el portazo que dio Sasuke al salir de la habitación. Entonces Karin se dio cuenta que había retenido el aire o tal vez que este se había vuelto tan pesado con la presencia del Uchiha que respirar se había vuelto una verdadera hazaña. Su corazón tenía miedo por lo que pudiera ocurrir. Pero no era el mismo que estaba sintiendo Sasuke, más bien este sentía un gran pavor. Era sorprendente que, a pesar del dolor en todo su cuerpo y, sobre todo en su pecho, no hubiera desfallecido. Porque la presión era el peor enemigo de todos en diversas situaciones y para una persona normal tanta presión lo hubiera llevado al colapso. Pero Sasuke lo único que pensaba era en encontrar a Sakura antes que nadie. Recorrió de lado a lado la aldea, donde había gente y donde no. En el bosque... en las casas... en los puestos... pero nada. Caminaba de lado a lado sin rumbo fijo, porque si paraba sus piernas le fallarían.

Sasuke era conocido por hacer todo solo, a veces porque realmente no necesitaba ayuda y otras veces porque su orgullo no le permitiría no poder hacer algo por su cuenta. Pero sabía con quienes contar en especificas situaciones y en esta tenía la esperanza de que Karin le fuera de utilidad, pero no. Ahora su única oportunidad era ella. No tenía nada en su contra pero realmente era incomodo verla. Tal vez por las cosas que habían vivido juntos o porque ella le miraba con tristeza mientras le insultaba. Pero no era el momento de sentimentalismos tontos, así que sin demora se dirigió a casa la casa de la pelinegra, que más bien era una cabaña situada a las afueras de la aldea a petición de ella. Porque él le había ofrecido ir a vivir junto a todos en la mansión del Otokage, como forma de agradecimiento por todo lo vivido y porque tenerla de su lado era de gran ventaja, aunque se sintió aliviado de que no aceptara cooperar con él, ya que su petición era muy egoísta, sobre todo después de esa noche...