¿QUE PASARIA SI...?

Las Promesas Del Tío Sasuke.

-Por fin estamos solos.... - Susurra contra su oído.

-No hay tiempo, pronto tendremos que ir por las niñas. Mmmm.... - Gimo suavemente al sentir sus labios en su cuello, besandolo y lamiendo con fervor.

-No importa. Joder, Sakura, llevo horas sin ñiqui ñiqui. No seas cruel.

Tras decir eso, la levanta por los glúteos obligandola a rodear su cintura con sus piernas para no caer mientras recargada su espalda en la pared.
Itachi sonrió con autosuficiencia. Ya la tenía acorralada.
Continuó atendiendo su cuello, deslizándose lentamente hasta su clavícula, orejas y descendiendo hasta el escote.

-Itachi...

Suspiro su nombre y sujeto firmemente su camisa tratando de aferrarse a su cuerpo.
Contento por su reacción y más que motivado, recorrió el cuerpo de su esposa con devoción mientras devoraba sus labios. Sin prisas escabulle sus manos bajo la ropa de la kunoichi disfrutando de la suavidad de su piel.

Quita su blusa evitando dejar de besarla lo menos posible. Ella hace lo mismo con su camisa. Comparten un profundo beso e Itachi va por su siguiente objetivo:quitar el estorboso sujetador,pero cuando esta a punto de lograrlo suena el timbre.

-No abras... - Le dice casi en tono de súplica.

Sakura estuvo a punto de hacerle caso si no fuera por los insistentes que eran los timbrasos. Lo alejo y se puso la blusa con agilidad, le miro con una sonrisa ladina. Se estaba divirtiendo con la frustración de su esposo, quien no paraba de maldecir mientras se vestía tratando de recomponerse.

Lo dejó en la cocina y fue a abrir. Encontrándose con una gran sorpresa.

-¡Sasuke! - Grito con euforia y salto a abrazarlo.

El azabache sorprendido respondió el gesto con suavidad, aún no estaba acostumbrado a tal gesto de aprecio.

Itachi al oír el grito de Sakura sale de inmediato. Sonríe al ver la escena y se une al abrazo, estrujandolos fuertemente.

-Que alegría verte por aquí, Sasuke. - Quita a Sakura de enmedio y le da un golpe en la frente con una gran sonrisa. - No seas aprovechado, otouto-baka. - Le Susurra con celos haciendo que solo escuche el. Sasuke sonríe con burla, el solo correspondió a un abrazo de reencuentro.

-Pasa, Sasuke. - Sakura lo jalo hacia dentro de la casa bastante animada. Lo atendió y no tardo mucho tiempo en llegar Naruto con Hinata y sus hijos.
Sasuke se sorprendió al verlo de esa manera y Naruto no perdio la oportunidad de molestarlo.

-Mira, Teme, al final te vas a quedar más solo que un perro. Dime¿De qué te sirvió ser tan popular entre las chicas? Eh, dime. - Se burlo picandole las costillas.

-Dobe... Eres un imbecil. - Fue lo único que dijo antes de propiciarle un golpe en la cabeza con bastante fuerza.

-Eres un bruto, Teme. Ya verás lo que te espera. - Naruto se levanta enfadado y lo enfrenta dispuesto a iniciar una pelea, pero Sakura interviene.

-No, no, en mi casa no peleen. Vayan a otro lado. - Se pone entre ellos.

-Si, si van a pelear váyanse a otro sitio. Que la casa la única que siempre podrá destruirla es Sakura. ¿Verdad, mi amor? - Bofa referendose a cada reconstrucción que habían tenido que hacer gracias a las rabietas de Sakura.

-Tu.... - Con aura oscura se acerca a él. Itachi de inmediato vio pasar su vida frente a sus ojos. - Solo no te pego porque tengo que ir por las niñas y porque eres el único padre que tienen. - Tomo un suéter detrás de Itachi y se acerco a Sasuke. Itachi al ver pasar el peligro de relajo.

-¿Vamos? - Le propone acompañarla para recogerlas. El asiente y sale junto con ella dejando a Itachi solo con Naruto y Hinata, además de dos bodoques.

Durante el camino casi ninguno habló, pero no hacían falta las palabras para hacerse saber lo felices que estaban al reencontrarse después de tanto tiempo.
Al llegar al colegio, las niñas salen buscando a su madre encontrándose con una grata sorpresa.
Corren entusiasmadas a abrazar a su tío.

-¡Tío Sasuke! - Saltan a sud brazos olvidándose de su mamá.

-Hola, renacuajas. - Les revuelve el cabellos con ternura y las mira con cariño. Nunca Sakura había visto tanta emoción caber en el. Era una imagen que guardaría para siempre en su memoria.

Las niñas piden que las carguen, el tío consentidor las complace y las lleva hasta la casa, cada una en un hombro mientras van platicando.

-Mmmm, ese tal Satoshi ¿va en tu salón? - Pregunta Sasuke con curiosidad.

Kohana le ha dicho a Sasuke que Yuuki ha hecho un nuevo amigo con el que pasa mucho tiempo. De inmediato Sasuke activo su alerta de peligro.

-Si, es un buen chico y es el único que no es un idiota conmigo ni con Kohana. - Dice tratando de justificarse. Sakura sonríe sin querer intervenir. Sabía perfectamente que sus hijas habían nacido bendecidas con el don de la belleza y que desgraciadamente hacía que los chicos las acosaran constantemente.

-En eso tienes razón, a mi me cuida mucho por que soy su cuñada y a ti te ama por lo que es bueno contigo para ganarse tu cariño. ¿Verdad tío Sasuke? No debería confiarse. - Dice socarronamente.

Ahora si Sakura se quedó sorprendida ¿Esa era su tranquila Kohana? Estaba metiendo en dificultades a su hermana. Por otro lado, Sasuke no se percató de la jugada de Kohana y estuvo de acuerdo.

-Kohana tiene razón, Yuuki. No debes fiarte de su buen comportamiento al final esos son los peores. - Dice un poco enfadado. - Además ¿Ya no recuerdas nuestra promesa? - La miro con una sonrisa cómplice y una mirada de cachorro.

-Si, si. Me acuerdo, tío Sasuke, no pienso romper nuestra promesa. Tranquilo. - Le da un beso en la frente para tranquilizarlo, Sasuke sonrió satisfecho.

-Y tu, Kohana¿Recuerdas la promesa?

-Si, nada de novios hasta después de que te quedes sin dientes. - Con una sonrisa traviesa voltea a ver a su gemela. - Y pienso cumplirla. Lo juro.

-Me alegra. Ahora vamos por un helado. Sakura, regresamos más tarde. - Para su andar.

-De acuerdo, cuídense y no lleguen darte a cenar. - Se despide y cada quien toma rumbos diferentes.

Sasuke cumplió su palabra y llevó a las niñas a comprar un helado para premiarlas por cumplir su promesa hasta ahora.
Caminado ya de regreso, Yuuki le confiesa algo a su tío antes de salir huyendo junto con su hermana rumbo a casa.

-Tío, como prometimos no tener novio hasta que se te caigan todos los dientes hemos pensado que cuando queramos tener un novio, este tendrá que tumbarte todos los dientes. ¿Eso cuenta no? No aclaraste que se te tenían que caer por la edad. - Dijo con astucia y salió corriendo junto con su hermana.

Sasuke se quedó en shock por unos segundo antes de correr tras ellas.
¡Maldita sea! Heredaron la astucia de su madre. Penso mientras se imaginaba las múltiples peleas que tendrá con los pretendientes de sus sobrinas. Al menos tendría con que entretenerse por un rato. Pero por un ningún motivo, iba a dejar que esas mocosas tuvieran novio, eso lo juraba.

Hola.
Gracias por su apoyo.
Traigo un poco de ternura. Espero les guste.