DANIEL CÁRTER 🌵
Ya estaban retrasados y por más que Daniel intentaba calmarse ¡No podía!, había tenido una semana de perros y un mes atrás de pura mierda,
-¡maldita sea ya es tardisimo!- apenas llegaron a esa plaza donde estacionaron las motocicletas, las personas comenzaron a verlos extraño, como si fueran una especie en peligro de extinción o una amenaza. No, a nadie le gustaba su presencia en ningún lugar, ¿Tal vez si eran una especie en peligro?, Para los civiles son lo peor, los tratan con desconfianza, son problemas donde esten pero hoy no.Y como le jodía a Daniel que sobre todo el género masculino los observará mal. No éran amigos de muchos civiles pero tampoco unos extraños totalmente, solían hacer las compras en el mercado del mismo pueblo cada mes así que no entendía sus miradas llenas de desconfianza. Ellos los protegían siempre sin hacer alarde.
Pero hoy particularmente no tenía ánimos de discutir, lo que lo tenía al límite tenía nombre y apellido.
Alexander Cárter. Había desertado del puto club y... Eso lo tenía cabreado, nadie lo sabía solo Erik su mejor amigo y vicepresidente del club. Kali el prospecto mas reciente y leal asta la muerte que lo seguía a dónde fuera, además con tantos otros problemas en el club. Alex y sólo él era el maldito protagonista de sus problemas personales. Su propio hermano de sangre.
¡Joder Alexander!,
¿Tenía que ser él?,
¿Su puto hermano de sangre...?-¡Puta madre Dany ya tranquilízate esa, pin#$÷.. mujer no merece que te pelees con tu propio hermano!- Dany negó furioso mirándolo más rabioso, quería golpearlo, arrancarle los ojos por lo que decía pero... Desgraciadamente tenía razón, estaba jodido y a muy poco de quedarse con las ganas de romperle la jeta a Erick y a Alex, al muy hijo de puta, (que al cabo no tenían la misma madre). Ladeó una sonrisa carente de alegría.
Decirle a Tobías su hermano menor la verdad, iba a ser la jodida mier#$÷ de todo. Respiró profundo, -¡no se que demonios le voy a decir a Tobías!- su primero al mando le miró con pena, sabía que ellos eran lo más importante en la jodida vida de Daniel y que, asta maldita lastima también le tenía, pues su chica, como solían llamar a sus mujeres, debería acompañarle a este evento como estaba previsto desde hace meses, -¡la verdad! no hay de otra- soltó Erick de manera borde y bajó de su motocicleta con desgarbo, levanto los hombros resignado a seguir escuchando la triativia de Daniel. -Tiffany solo ve por sus propios intereses- siguió. Daniel hizo lo mismo y bajo de la suya, vestía de cuero como siempre, con tranquilidad fingida encendió un cigarrillo y maldijo entre dientes mientras los demás caminaban ya hacía el edificio. Tenía que calmar un poco al menos la bestia furiosa que tenía dentro por todo lo que estaba pasando le. Que ganas tenía de romper todo a su paso carajo.
Erik su vicepresidente siempre tenía razón, esto no le debería de afectar, Tiffany era una chica hermosa y de eso se valía para entrar y salir del club como le diera la gana, de igual manera se metía con cualquier miembro del club y actuaba conforme iba mirando las cosas , solo a su favor , -tsst, pero hoy no, mejor le digo después hoy es dia de festejo en el club y de alegría, no pienso arruinarle este día a nadie- sonrió sin ganas, no amaba a esa mujer pero traición era traición, iba tan jodido y de malas que blasfemó en voz alta.
De pronto al ver a lo lejos a la chica de gafas enormes todo el enfado que había cargado durante las últimas dos semana se fue al carajo, en verdad que era una bonita chica, si no fuera por el destello de los lentes en su crepúsculo no la hubiera visto nunca. Sonrió para sus adentros. No. No era bonita, era una cosita realmente preciosa. Y de la nada fue un agradable atardecer para él.
*
Nunca hubiera tomado decisiones drásticas si su libido no se hubiera despertado como lo hacía en esos momentos por ella, una total extraña en la plaza del pueblo, lo hizo sentir que caminaba sobre nubes y de que manera.
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TU... ME DAS MIEDO \ + 18
RomantizmNo pensé que un simple paseo cambiara tanto mi vida. Las cosas pasan por algo no? Conocí a Cárter por una casualidad de la vida y cuando más triste estaba, tenia todo según mi familia, un buen empleo de maestra de primaria, decente pero gratificant...