...Con el paso del tiempo todas fuimos tomando un rumbo diferente ya que todas nos habíamos graduado de nuestras universidades. La primera en irse del país fue Elissa se mudo a Perú, luego Dafne que se mudo con su tía a Reino Unido, aunque ese siempre fue su sueño, luego fue Melanie tenia la idea loca que conocer Noruega así que lo hizo, la pequeña Sandy se fue a Suecia, lo se! chicas de mentes internacionales, aunque todas en algún punto querían vivir en corea, ese era nuestro plan, y solo quedamos Annie y yo. Nosotras ya vivíamos juntas y trabajamos mucho ya que ambas si seguíamos con el plan original "Viaja a corea" era nuestro sueño, estudiar y trabajar allá, hacer una nueva vida. Con el paso de los días Annie y yo seguíamos investigando sobre instituciones y trabajos en dichoso país, cuando por fin conseguimos un lugar donde Annie pudiera estudiar Gastronomía y yo Periodismo, cerca de alli conseguí un estudio donde podría retomar mi carrera como bailarina (nunca es tarde para cumplir un sueño) todo lo que estaba pasando era excelente era como un sueño.
Pasaron los días y llego el momento que tanto habíamos anhelado.
- Por fin llego el día -Dijo Annie- he estado con mucha ansiedad y nervios.
- Lose, yo también lo estoy, pero es algo que habíamos estar esperando por mucho tiempo -dije con una voz muy baja ya que mi respiración era rápida por los nervios-.
- oh! Están llamando nuestro vuelo -dijo Annie-
Mire a mi alrededor y aun seguía sin creerlo, aun no creía que esto estaba pasando era como un sueño. Así que fuimos al área de abordaje, tomaron nuestros boletos y subimos al avión, la verdad estaba muy asustada y con muchos nervios era mi primera vez en un avión, en cambio Annie estaba muy relajada y feliz. El viaje duro 1 día unas 10 horas ya que tuvimos que hacer dos escala para poder llegar Corea del Sur.
Llegamos a Seúl el 20 de febrero faltaban 7 días para mi cumpleaños y una semana para iniciar clases, el día era muy frió puesto que era invierno y wow si que era frió o para mi lo era, en ese momento solo extrañaba el calor tropical de mi país pero era algo a lo que me debía adaptar, a Annie no parecía importarle pues ella amaba el frió; tomamos un taxi y nos dirigimos al apartamento que habíamos alquilado por Internet unos meses antes, cuando llegamos el lugar era tal cual en las fotos, sala, cocina y comedor (se compartían en mis espacio), dos cuartos y un baño, todo era chiquito y acogedor bien para dos personas, ademas era feliz estaba el país que había planeado visitar con mis amigas, pero ahora no estoy de visita sino viviendo en el y con una de mis mejores amigas de la universidad, todo era como un sueño.
